Seres Almáticos. Fuerza Espiritual. Inari Masga.

2. Laboratorio.

El lugar estaba lleno de pantallas, una mostraba imágenes de las noticias que habían publicado en el periódico sobre la muerte de mi padre y la enfermedad de mi madre, las personas que se encontraban observando hablaban en voz baja, comparando archivos uno con el otro; ladee la cabeza con curiosidad de qué conversaban, sin embargo, el jalón en mi brazo izquierdo me hizo reaccionar de forma violenta, queriendo soltar el agarre de Milagros, ella tenía la suficiente fuerza para traerme a rastras, empujando y chocando contra quienes estaban en medio; lo admirable fue caer en la cuenta de que ninguno reclamó o se quejó de los empujones, al contrario, se acercaban a donde nos dirigíamos nosotros.

Milagros me sentó en una silla plegable, unos hombres colocaron una mesa frente a mí y se armó una algarabía entre gritos, demandas y órdenes de diferentes personas; la mayoría portaban una bata blanca, como la de mi padre; suspiré ante el recuerdo de verlo afanado con sus descubrimientos. La mujer jaló una silla que colocó enfrente, mostrándome un folder lleno de papeles con garabatos y fotografías - ¿reconoces este aparato? - señaló una bala de Biotecnología - papá lo llamaba "bala", se inyecta con una pistola especial y regenera las células dañadas en un tejido lesionado con heridas graves, como quemaduras o cortadas inferiores a los diez centímetros de profundidad - respondí con la información que recordaba - al parecer, hubo mucha demanda de este producto, sin embargo, los registros indican que sólo vendió un millar de piezas, pese a existir más de doscientos mil solicitudes rechazadas para su compra, ¿estabas enterado de ello? - mostró una lista de correos y una lista de compradores, negué con la cabeza observando los papeles, varios nombres se repetían por lo menos tres veces - ¿Qué relación tiene la "bala" con la enfermedad de mi madre? - Cuestioné confuso, los nombres comenzaban a causarme mareos y temblores, me concentré en controlar mis emociones para evitar que desviara el tema - tu madre participó abiertamente en este proyecto, y tu padre le dio el crédito de su desarrollo; los componentes que se encontraron  en el análisis de su medicamento son similares a éste; por lo tanto, entre más información tengas de este producto o de sus compradores, tendremos mayores probabilidades de lograr una solución - la respiración me fallaba, no pude controlarme más, me levanté transpirando, caminé de un lado a otro tratando de llenar mis pulmones de aire, esos nombres, esas compras, esas solicitudes, esa gente...

Milagros se levantó cerrando el folder - ¿te encuentras bien? - levantó las manos mientras se acercaba, la miré a los ojos y me esforcé en calmar mis nervios, ambos sabemos que soy violento; asentí y retrocedí, buscando la hoja de solicitudes, tomé su lapicero y empecé a marcar el patrón, una; dos; siete [...], doce veces enviaron solicitudes la compañía fantasma de la que mis padres peleaban constantemente - ellos, ellos intentaron matar a mi madre cuando comenzaba el proyecto - comencé a soltar mis recuerdos - por ellos mi madre tiene la columna de Biotecnología - golpeé la mesa y me levanté con los nervios del eco de las balas de aquella noche...

》El estacionamiento se encontraba vacío, la luz era tenue y lejana, era un silencio sepulcral, sin grillos ni moscas deambulando; la puerta trasera del edificio se abrió chocando contra la pared, una figura salía con un gran bulto seguida por dos sombras más, el estruendo de una pistola se escuchó con eco, haciendo que mi corazón brincara por el miedo, impactando en el pavimento - ¡Christian! - la voz de mi madre sonaba temblorosa y tenue, opacada por las balas; mi padre salió del auto y agachandose apuntó a las siluetas de atrás, atinando al primero, sin embargo, el otro sujeto logró derribar a mi madre con un grito de dolor, mi padre enfocó y disparó al culpable; la policía y la ambulancia llegaron al tiempo [...] 《

El abrazo de Milagros se sentía acogedor, me recordó a mi madre en sus años más felices, no pude contener las lágrimas y lloré hasta sentir que el cuerpo me pesaba; sin embargo, llegó un policía con dos bolsas de comida y algunas bebidas - es hora de comer, detective - lo colocó en la mesa y se marchó - ¿te encuentras mejor? - ella buscó mi mirada, asentí y suspiré mientras me alejaba de ella.  Las emociones me golpeaban el pecho, y los recuerdos zumbaban en mi cabeza, me mantuve en silencio al comer, Milagros formulaba una serie de listas en diferentes hojas, por un lado los nombres que marqué, por otro algunas direcciones y finalmente, en una hoja aparte escribió cada uno de los productos que más demanda tuvieron y los que actualmente continúan en venta.

Mandó a llamar a un policía y le dio una serie de órdenes, entre ellas, solicitar a la empresa de papá una pieza de cada producto, la petición del juzgado se encontraba en recepción; el hombre apuntó todo en su libreta, tomó el listado que ella le entregó y se marchó en silencio - el día que tu padre falleció, dejó esto - hizo una pausa mientras me acercaba un sobre blanco con mi nombre en bolígrafo - en uno de los libros en los que trabajaba, no le dimos la importancia requerida dado a que buscábamos pistas en la escena y no en su trabajo; ahora, hemos detectado la sustancia en las dosis de tu madre, por lo que sospechamos que algún empleado de Biohoward puede estar involucrado en ambos casos - detalló mostrándome ambos expedientes, la brillante luz del laboratorio rebotaba en las hojas haciéndome parpadear repetidamente para enfocar la vista - ¿lo leyeron? - Pregunté al ver el sobre abierto - si, pero no encontramos respuestas a lo que buscamos - torció la boca en un gesto de frustración, suspiré y saqué el papel que estaba doblado:

》James, he de admitir que llegaste a nuestra vida a darnos fuerza, porque a pesar de los obstáculos y constantes persecuciones, el tenerte con nosotros nos daba la fuerza de salir adelante, para protegerte y avanzar; la rama laboral que elegimos tu madre y yo, siempre ha sido peligrosa, y ambos sabemos que si tú no estuvieras aquí, nos hubiésemos rendido hace varios años.




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