XX

NOAH

-Buenos días- entra Sarka saludando. Me bebo toda la limonada y me alisto para irme a duchar.

-Ah por cierto, ¿sabes donde vive Oneday?, me gustaría disculparme con ella, necesita una explicación.

-No pero puedes averiguarlo, capaz con algunos de los guardias, te pueden conseguir la información- ella hace puchero y cruza los brazos.

-Le pediré a Orlando que me ayude- me volteo, pero de nuevo me vuelve a llamar.

-Por cierto como te fue con ella ayer. La pasaron bien.

-No necesitas saber, con tal que las cosas entre ella y yo hayan sido aclaradas todo estara bien.

Se ríe y se da por vencida.

**

Saliendo de mi trabajo, los guardias me siguen hasta la casa de mis padres. Cuando llego y aparco en nuestro estacionamiento de siempre. Mi madre me saluda por el retrovisor del auto. Y es una alegría que me invade al instante.

-Bienvenido hijo- me recibe con los brazos abiertos al igual que yo- entra tu padre estará feliz de verte.

Saludo a los invitados y entre ellos están mis hermanas Sara y Sarka, una pelinegra y la otra pelirroja, también esta Diana su amiga, la entrometida de la familia pero ya es habitual su presencia. Abrazo a mis hermanas y ellas me reciben muy contentas.

-No viniste con tu esposo- le afirmo a Sara viendo que no hay nadie más con ellas.

-Tenía asuntos que atender, además está muy ocupado. Y por cierto no soy la única casada también está Diana con Eduardo.

-Vaya.

Pero mi hermanita Sara casada con el joven Jack es lo que más me sorprende. El día de su boda mi padre y yo la llevamos al altar justo como lo deseo, siempre quise lo mejor para ella, que cumpliera sus sueños. No estuve de acuerdo cuando decidió renunciar a su carrera de chef para irse con un mochilero. Sí que me enoje con ella porque quería que asiente cabeza, era toda una rebelde. Y ahora es una señora casada, como creció.

Por otro lado Sarka, sabía que mi madre le gusto tanto el nombre de Sara que quiso poner a su otra hija el mismo nombre, todos gritamos por todos los cielos, acepto que es hermoso el nombre de Sara pero iba a ver  confusión en un futuro más cuando no son gemelas. Es por eso que decidió ponerle un nombre que tenga que ver con su país Rusia. Sarka. Aunque trata de que le salga el acento ruso es muy difícil para ella. Es tranquila, alegre, extrovertida y para rematar sabe artes marciales. Aunque en el fondo es la más delicada por las situación que vivió. Le gusta Dru desde el primer día que lo vio. Y me pregunto siempre el porqué.

Por otro lado yo, Noah, el expresidente de los Estados Unidos, si que me quedo grande ese nombre, sentí que me ahogaba con tantas cosas, no aguantaba, además con la aparición de algunas canas que me salían a mi temprana edad. Tuve que asumir la presidencia cuando mi padre decidió que ya no se volvería a postularse. Lo hiso dos veces, una vez en los noventa y otra cuando yo ya estaba por querer otra cosa, pero como sus deseos son forzados no quería decepcionarlo y decidí postularme para ver si salía y vaya que salió. Se puso contento cuando su primogénito salió como el futuro presidente y se decepciono cuando renuncie. Pero yo no quería, nunca me gusto la política y aún sigo amarrado estando en mis 31 años.

Yo solo quiero ser libre…como una persona normal. Estancando en la puerta doy un respiro y abro la chapa y lo veo leyendo el periódico, lo deja cuando me ve y parece una mirada de serio.

Aquí voy.