LXXVI

ONEDAY

Camino por la mansión observando cada objeto, paredes y recuerdos que acechan mi mente. Enciendo la música y comienza a sonar U2 - One. Amo, amo esa música, me siento en las gradas de la entrada y veo el cielo, estamos a mitad de Octubre en se puede ver la naturaleza de distinto color. Mientras tarareo la letra escucho unos pasos y me giro a verlas feliz.

-Bienvenidas- Grecia e Iris vinieron, aceptaron mi invitación que les hice hace dos días cuando Dru mi querido novio, si novio al fin puedo decir, envió un carta que hice hacia ellas. El fin es contarle mi idea y espero que les guste y me ayuden.

-Para que somos buenas- dice Grecia dándome un abrazo-

-Mirate estas cambiada, más hermosa- menciona Iris dándome un beso en el cachete.

-Como están chicas. Rayos puedo llamarlas así, perdón ángeles, perdón Grecia e Iris- se ríen y niegan.

-Claro que puedes llamanos chicas, estamos en el mundo mortal. No crees- dice Grecia sentándose en la grada.

-Entra en confianza Oneday- me da una palmada Iris y me invita a sentarme en medio de ellas.

Lo hago mientras suena una melodía encantadora por la radio.

-Las invite porque tengo una idea, un proyecto que quería cumplir y quería saber su opinión – miro a amabas apretándome los dedos, y ¿si dicen que no?.

-Cuéntanos- dicen al unísono ambas.

-Es hacer de la mansión un lugar de entrenamiento, que los ángeles pueden también entrenar en tierra. Hace tiempo Arcángel me conto algunas historias antiguas de que los ángeles bajaban para entrenar, y estudiar en el mundo humano, claro siendo un lugar seguro. Podríamos convertir de la mansión un lugar así- les cuento mi profundo sueño y espero que les agrade.

Grecia sonríe e Iris parece estar sorprendida, se levanta y se toca el vientre. Sé que aún tengo la maldición como ella tiene la suya echada por Euphoria y yo por sus padres, pero podemos romperla de eso estoy segura. Ya falta poco.

-A mi me encantaría, y estaría dispuesta ayudar- Grecia me toma de las manos y nos levanta. Me uno.

Iris se gira después de quedarse en silencio y me mira- Si, también me uno- cambia su cara de triste a feliz y también me toma de la mano- esto será diferente, estoy segura.

-Compartamos esta idea con los demás a ver que opinan- menciona Grecia- estoy segura que Arcángel estaría más que dispuesto.

-Tus sobrinos también- las tres sonreímos y un grito de felicidad de Grecia nos hace saltar.

-Amo esa música, hace mucho que no la escuchaba- se comienza a mover y las dos nos unimos a ella. Es una de la década del 2000, y si que esta buenísima.

Si, esto es de verdad va existir un nuevo lugar para los ángeles, entre mortales e inmortales será duro pero valdrá la pena.

**

Hades esta encadenado, mientras su cuerpo débil reposa en una silla de madera. Doy pasos y observo sus facciones mientras tiene los ojos cerrados. ¡Vaya idiota! Es atractivo, mandíbula marcada, labios que parecen hinchados y rosados, tiene un poco de barba no tan crecida en si facciones que pueden ser falsas, solo es alguien malo.

Me alejo y el abre los ojos.

-Que te pareció mirarme. Te enamoraste- dice muy atrevido- niego y le saco la lengua.

-¿Ya les confesaste a todos la verdad?- asiente.

-¿Porque?, Dejame adivinar. No te contaron nada- se burla y me da una mirada guasona.

En la mañana que vinieron las chicas, mientras yo iba a la cocina por jugo me las encontré hablando solas sobre lo que les había confesado Hades, me disgusto no haber estado presente y tuve que esconderme atrás de la puerta solo para escuchar casi nada. Son unas expertas ellas dos para que nadie descubra lo que dicen.

Así que tuve que hablar con una de ellas a solas para que me traiga aquí sin que los demás se enteren. Y por lo visto hasta ahora nadie se ha enterado porque no viene nadie y debo descubrir los secretos de este tipo.

-¿Vas a contarme a mi algo?- pregunto dudado de si lo hará.

Parece desinteresado, como si nada le importara más aun la situación en la que se encuentra capaz pase muchísimos años encerrado aquí o talvez en otro lugar, no lo se pero yo no me voy sin antes escuchar todo lo que tiene que decirme si no si me vengare de la peor manera.

-Está bien- dice y una emoción surge dentro de mi. Espero que por ahora sea honesto y no me mienta.

-Dímela- me paro recta con los brazos sueltos a ambos lados de mi cuerpo.

-Los dioses griegos son una cagada, se creen unos mejores que otros, esto viene antes de que tú existieras. El padre de padres y de muchos padres hasta que llego Arcángel- donde quiere llegar Hades yo solo quiero saber porque reemplazo a Santa, no sus dioses- el tipo se las sabia todas en el pasado, en fin no soportaba que los ángeles tuvieran su territorio en el cielo, porque ellos y no yo. Ah ya lo sabemos, soy el pecador, fui expulsado y pude hacer mi territorio en las profundidades del mundo pero nunca quise eso.- pero te lo merecías - Cada cosa que quieren los mortales quise arrebatárselos como el amor, ja si, mis hermanos lo tenían ¿porque todo lo malo tienen que dejarme a mi?- nos miramos a los ojos- en fin manipule a la pequeña Ava la atraje hacia el mal, le ordene que manipulara a Euphoria, el ángel estaba muy lastimado, era muy fácil de corromperlo Oneday- se ríe como loco- tocando su pequeño corazón pude destrozarlo- pienso en todo lo que me conto Arcángel de lo que paso en el pasado, de lo que le paso a sus hijos y a Grecia. Hades está loco. – Después Arcángel fue desterrado, paso la historia que seguro conoces - chasquea la lengua- pero todo tenía un precio, yo que soy el rey del inframundo no iba a dejar a Euphoria ni Ava, obvio que siguieron conmigo. Uy me había olvidado de tu maldición, que aún no ha sido rota- se vuelve a reír- que envidia le tenía Euphoria a su hermano, no le importo destruir a los demás de su familia. Si, él sabía que existías, escondió los pergaminos, nunca ¡QUISO! destruir la maldición más bien, observo desde el cielo el sufrimiento de tus antepasados, el del pequeño Grevor Black. Y si que se enojó mucho cuando Arcángel descubrió su secreto- estoy que tiemblo por su confesión. Secretos de Arcángel y secretos de este tipo son mi tormento- se quedó estático sin tocarles un pelo porque Grevor desapareció por un buen tiempo, mira como reacciono cuando descubrió que Iris lo estaba cuidando y más aún que se fue a vivir al polo norte junto con Santa Claus, el peor error fue acompañarlo para volver a pisar suelo mortal, si no lo hubiera hecho, no habría conocido a tu abuela, tu padre tampoco existiera y tú no hubieras nacido. Pero lo hizo. Nunca debió visitar al longevo Moe porque ara alguien que estaba conectado con el mundo espiritual, ángeles estaban cuidando de él. Mira las coincidencias. Ahí fue cuando me volvió a pedir con maldad que destruyera todo lo que tenga que ver con ustedes, no quería imperfecciones. Pero ¿cómo podría?, yo era Hades, y el mundo de Santa Claus y mi mundo no se mezclan, cada quien tiene su pequeño mundo, ¿no crees?. Yo solo observaba para ver cuando atacar, Grevor viviendo en la tan soñada Nueva York, tratando de cuidar un niño, cuyo niño sus padres habían muerto por una enfermedad, ojo cualquier enfermedad sin cura mata- abro los ojos, y pienso si él tuvo que ver con la muerte de los padres de Thomas. Me mira bien y sonríe falsamente- la enfermedad los atrajo hacia mí, ¡Muerte!, que crees que significa, lastima- se recompone- el ser humano hace mucho daño a la humanidad, y por culpa de su desorden es que aparecieron esas enfermedades. Los padres más la hermana de Thomas fueron llevados al más allá por ángeles, la misma Iris les guio hasta Dru para que descansen en paz, como siempre el bien de los que se merecen interviniendo. No creas Euphoria también estuvo al tanto, pero que podía hacer ya era demasiado tarde para mandarlos hacia mi y sufran su purgatorio, el cual no tenían. Sí que se volvió loco, el muy idiota se puso de rodillas para que esta vez sí atacara y lo hice. Un día, usurpe la identidad de Santa Claus, él y Grevor estaban haciendo la carta tan mencionada, yo invisible ante él y Santa sin darse cuenta, podrá ser Santa pero mis habilidades son superiores - aprieto los puños y tengo ganas de llorar.