(serie Recuerdos) - Recuerdos de mi vida 1

LIX

Arcángel

Tengo a mis dos hijos reunidos he decido contarles la verdad después de todo merecen saber.

Me acerco  a Diocles y me siento alado suyo, llamo a Artemis para que también lo haga pero alado mío. Después de quejarse y a  regañadientes lo hace.

-¿Qué vas hacer?- pregunta Diocles.

-Hacer lo que mejor se hacer, mi error fue no haber luchado hasta el final por ustedes cuatro, no haber recuperado lo que me arrebataron.

-¿Qué te arrebataron?- pregunta Artemis curioso y asustado.

-Ah ustedes- digo finalmente colocando ambas de mis manos a cada lado de sus sienes.

Diocles

Un fuerte dolor de cabeza aparece, me alejo bruscamente de Arcángel y me arrodillo en el piso colocando mis manos en mi cabeza, comienzo a sangrar por la nariz y no tardan en llegar, como el paso de un cometa mi vida ha sido un caos. Veo de reojo que mi a hermano le sucede lo mismo, después regreso a mí y en mis recuerdos logro distinguir la cara de Arcángel siendo mi padre.

Artemis                              

¿Yo también?, yo tampoco tuve recuerdos que farsante que es Euphoria y me las va a pagar, no sabe cuánto sufrí por él.

Veo a mi verdadero padre, y las lágrimas comienzan a salir de mis ojos. Diocles grita y sé que duele como a mí, hemos sido engañados.

Arcángel parece asustado, nervioso, estático.

-Donde están mis galletas con leche, padre- le digo suavemente y me acerco abrazarlo. Diocles se levanta y sale corriendo de la casa.

-Lo siento- dice con voz temblorosa.

-Yo lo siento, por haberte olvidado y no haber reaccionado ante tal engaño. Cuando mi madre sufría pensé que era por la usencia de Euphoria pero no, ha sido porque extrañaba su verdadera vida.

Diocles

-Llámalo- grito a Ava. Ella tiene cara de asustada.

-¿Qué pasa? ¿Cómo me encontraste?  Y  llámalo tú si es que quieres verlo.

-¡¡Llámale!!- grito más fuerte y no es correcto que le grite pero después de lo que ha pasado no aguanto más, no aguanto tanto sufrimiento.

-Está bien- cierra los ojos y por mi mente cruza. “Ella no es de confiar” mi  verdadero padre tenía razón. No lo es. -Ya viene, va estar feliz de ver a su hijo.

-No te creas- la rabia me enciende y el hombre que me mintió y me vio la cara  aparece vestido de blanco al igual que su barba y  enormes alas, su  sonrisa lo enciende como un resplandor pero no dudara por mucho tiempo.

-Mi querido hijo al fin me llamo, después de tanto- quiero gritarle como nunca, quiero insultarlo, ¿porque nos manipulo?, ¿porque trato  mal a mi madre?

-La razón por la que te cite, no es por queria verte, ni felicidad siento Euphoria- su sonrisa desaparece y se queda estático.

-¿Cómo me llamaste?

-Euphoria, Euphoria, ese es tu nombre tío- regreso a ver a Ava y sus ojos son de miedo, se le cayó la mentira.

-Imposible, yo te borre esos recuerdos- dice con seguridad y nerviosismo.

-No ibas aguantar con este engaño- le digo.

-Déjame adivinar ¿cómo es que mi hermano te devolvió tus recuerdos si yo se los quite?, ya se, su amiguito, estoy más que seguro que le ayudo. Debí haberlo matado cuando pude.

-Y yo debí quitarte el trono cuando verdaderamente podía. No lo hice porque me parecía justo lo que hacías en el pasado, pero ahora  que veo todo el caos que has armado como desterrándonos, matando a personas. No estas calificado para mandar en el cielo a los ángeles.

-Pequeño Diocles ya que recordaste es mejor que esta lucha sea cara a cara con tu padre así que llámalo, porque voy a creer que envió a su corderito al hueco.

-No necesito que me defie….- alguien me interrumpe y aparece Artemis con Arcángel.

-Tú- señala a mi padre- debiste morir.

-No hay ninguna persona que sea gloriosa para una persona que sea humilde de corazón-  Arcángel le dice a Euphoria.

-Se acerca a nosotros y nos empuja hacia la pared, Ava desaparece al instante dándome la última mirada de odio.

-Yo les voy a destruir a todos, nadie va a quitarme lo que me pertenece- y desaparece.

Ya en mi casa, me ofrezco nuevamente para buscar la llave. Artemis acepta y Arcángel parece emocionado.

-Antes que todo, quiero que sepan que estoy feliz y que tienen una hermana- nos dice de sorpresa. Siento emoción.

-¿Cómo se llama? – pregunto.

-Sasha.

-¿Iremos a conocerla no es cierto?- preguntamos ambos a mi padre.

-Si, pero antes organicemos como van a quedar las cosas.

-Todo será distinto, padre- digo valientemente.

-Todo.

Grecia




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.