Capitulo 7 "La primera prueba de fuego "

Gerard se quedó pensando por un momento, baja el celular y piensa en lo peligroso que sería para Shadow el enviarlo. Gerard le dice al jefe que Shadow aún no está listo para una misión, pero el jefe le insiste mucho y que es muy importante la misión ya que se trata de un rescate humano y algunas otras cosas que fueron robadas. Gerard aún piensa, y no deja de pensar en María y cómo reaccionaría ella mientras el jefe insiste.
—Por favor, Gerard. Es solo una misión. Además, es para rescatar a una chica —dijo el Jefe de GUN.
Pensó Gerard, cerró los ojos y dijo:
—Está bien, puedes venir a buscar a Shadow al mediodía.
El jefe se puso contento y se notaba un aspecto raro en su voz, como si lograra conseguir lo que él quería.

Después de hablar con el jefe, Gerard decidió ir al cuarto de María.
Gerard entró al cuarto de María para darle la noticia; mientras se acerca, nota que María está haciendo unas pulseras. Y las pulseras tienen algo escrito: "Shadow y María". María, al ver a su abuelo presente, decide contarle que compartirá pulseras con Shadow y que tienen planeado hacer muchas cosas mañana después de las pruebas de Shadow. Gerard se pone serio y le dice a María sobre la noticia de la misión de Shadow. María rápidamente cambió su rostro a algo triste y le cuenta a su abuelo que es peligroso llevar a Shadow a una misión, ya que Shadow no sabe controlar su poder al 100%.
En ese momento ya estaba Ronald en la puerta de la habitación, escuchó a María y le dio su opinión también: él tampoco quiere que Shadow vaya a una misión. Él aún no sabe usar su poder al 100% y apenas lo controla con la presencia de María, pero sin María él podría causar un caos peligroso.

Gerard se siente arrepentido, pero pensó en la vida que podría salvar Shadow si rescatara a la chica. Entonces decide compartir eso con María y Ronald. Y desde ese momento el ambiente para María se volvió más tranquilo, al igual que para Ronald. Entonces los tres decidieron que Shadow fuera a la misión y se fueron a descansar, dejando un poco de nervios, miedos y pensamientos revueltos al tomar esa decisión. Y la noche fue un poco fría para todos.

Al día siguiente, Ronald fue a despertar a Shadow para que él fuera a despertar a María. Shadow se va directamente a la habitación de María. Pero en medio del camino, mientras él caminaba, todos los científicos lo miraban con un aspecto raro, como si tuvieran miedo. Shadow agachó un poco la cabeza y siguió su camino.
Shadow llega a la habitación de María e intenta despertarla. María, al despertar, le da los buenos días a Shadow y él le responde con una media sonrisa.
—¿Quieres desayunar? —preguntó Shadow.
—Me encantaría, vamos —respondió María.
María toma su mano y se dirigen juntos a la cafetería. Mientras ellos comen y disfrutan, el ambiente se vuelve un poco lento y frío en la base, esperando que vengan a buscar a Shadow. Ronald y Gerard estuvieron trabajando toda la mañana para hacerle unos nuevos anillos inhibidores para las muñecas de sus brazos; estos son un poco más fuertes para controlar un poco más de su energía caos. Gerard y Ronald buscan a Shadow en la cafetería y logran ponérselos.

En ese mismo momento llega el Capitán Wolters y su equipo para llevarse a Shadow, y traen una camioneta que detrás lleva una jaula, lo cual parece extraño y eso preocupó a los presentes. Gerard mira a María, y María se despide de Shadow dándole un abrazo. En ese momento María le coloca la pulsera a Shadow y le da un beso en la frente. En ese instante ocurrió algo raro: usaron fuerza bruta para llevarse a Shadow, le amarraron con una cadena en la pierna y lo metieron a la jaula.
Eso dejó a María intranquila y gritó fuertemente diciendo que no trataran a Shadow de esa manera, que él no es un animal. Eso incomodó a Ronald y a Gerard. Ronald reclama por cómo tratan a Shadow. El Capitán Wolters se sorprende por lo que hacen sus compañeros y les ordena tratar a Shadow con cuidado, logrando cambiar un poco la situación, pero en ese momento María sale corriendo a su habitación toda enojada. Escucha que su abuelo la llama, pero María siguió su camino.
Shadow queda un poco confundido, mira a Gerard con miedo y cuando intenta romper la jaula, Gerard le dice que se tranquilice, que solo es una misión y que le prometerá que esto no volverá a pasar si lo seguían tratando así. Se llevan a Shadow dejando un vacío en la base.

El equipo estaba en el lugar de la misión; el ambiente era un poco frío y lleno de árboles y montañas. Un vehículo extraño golpea la camioneta y se volcó. Cuando Shadow despierta y logra salir de la jaula, un grupo de 8 personas roban la camioneta e intentan escapar en un helicóptero. Cuando el otro grupo del equipo GUN llega a la escena, ya el grupo se había escapado. Shadow los persigue desde abajo hasta que logra subir a una montaña alta y sus anillos inhibidores brillaron e hizo un súper salto que logró entrar al helicóptero. Empieza a desmayar a todos los ladrones con golpes básicos y pudo lograr recuperar todo lo robado.

Entonces Shadow, desde las alturas, logró ver a la chica que tenían secuestrada en una parte inferior de la montaña, rodeada de ladrones y con varios vehículos en el centro. Shadow no logró hacer un aterrizaje perfecto con el helicóptero, pero logró salvar todo lo robado y el helicóptero quedó un poco dañado. Al bajarse, él se va directamente al lugar donde estaba la chica; se infiltra, pero lo terminan rodeando. En ese momento llega el equipo de GUN y logran detener a todos. Shadow libera a la chica; resulta ser que ella es sobrina del jefe de GUN. Es una de las fuerzas especiales que tiene GUN, ya que ella sabe mucho de tecnología y es una buena hacker.

Después de mucho alboroto, todos empezaron a tratar a Shadow de buena manera, pero algunos de ellos no están contentos por su presencia.

Mientras tanto en la base, Gerard entra al cuarto de María y le dice que todo estará bien con Shadow. María, con lágrimas, le dice a su abuelo que no le gusta que vean a Shadow como un animal, un alien o un demonio, que él se merece ser tratado de buena manera, ya que ella lo quiere y lo ama como un hermano. Gerard, al escuchar sus palabras, la abraza e intenta calmarla.
En ese momento tocan la puerta. Gerard responde: "¿Quién es?". Y resulta ser el comandante Wolters. Gerard abre la puerta y ve a Wolters con Shadow. Gerard queda sorprendido y Wolters le responde que trajo a Shadow él mismo y solo, ya que no le tenía miedo a Shadow y lo veía como un compañero. Shadow, sin pensarlo, fue a abrazar a María. María lo recibió con un beso en la frente y lo abrazó más fuerte.