CAPÍTULO 14

Han pasado un par de meses desde que Harry y yo conversamos en la playa. Intenté olvidarme de lo sucedido y creo que al principio me resultó bien, incluso me presentó a su chica, su nombre es Isadora Mitchelle, es una chica hermosa, tiene los ojos del mismo color de Harry, pero su cabello es negro, muy negro. Es de tez trigueña, es alta, pero no tanto como él, es una chica agradable, resultó ser una gran chica, me agrada, se nota que le interesa H. Creo que el unico defecto que tiene es que se robó a mi mejor amigo. Al principio Harry estaba siempre en casa, pero a medida que pasaba el tiempo lo veía cada vez menos, viajaba con ella a todas partes, la llevó con Annie y Stu. La acompañaba a sus desfiles de moda, fueron a la semana de la moda en París y también a la de New York. Él se quedaba en su casa cada vez que podía, ya no hablabamos con tanta frecuancia y el departamento estaba solo y vacío sin él, lo extrañaba, era la misma sensación de cuando Shine murió, me sentía muy sola a veces.

Estando en el estudio con los chicos se me pasaba, me divertía y me hacian reir, disfrutaba estar con ellos, eran mi familia, pero Harry siempre llegaba tarde y estaba encerrado en su mundo. Carl le llamó varias veces la atención, pero no hacía nada por mejorar, se volvió distante y su encanto de siempre estaba cada vez más lejos. Todos lo extrañábamos.

Pasó el primer año y ya no era lo mismo. Nos fuimos de gira y ella fue con nosotros, estuvo un mes porque después tenía que ir a trabajar. Harry estaba feliz cuando ella estaba, se comportaba como antes, pero sin ella era esa persona sombría y distante, estaba un poco cansada de ese Harry. ¿Dónde estaba el chico encantador?

Tuve la oportunidad de converzar con Isadora, ella me comentó que estaba preocupada por Harry, decía que se comportaba extraño y que hablaba muy poco de mi o de los chicos. Me decía que si éramos su familia debería estar orgulloso de hablar de nosotros pero que era todo lo contrario. Me gustó mucho que me lo comentara, me dijo que quería que no dejaramos de ser amigos, que según sabía eramos inseparables y que no quería que me perdiera. Me pidió que hablara con él cuando ella se fuera, quería que todo se arreglara. Me dijo que lo amaba y no quería separarlo de esto, de lo que era.

– Lucy.

– Dime cariño.

– Quiero hablar con él – apunto a Harry que está acostado en el sofá.

– Ya era hora, espero que te escuche.

– Lo hará, ya estoy cansada de esto.

– Chicos, todos fuera – de a poco todos salen del camerino. Cierro la puera, me apoyo en ella, tomo aire. No hay que tener miedo, solo dile lo que tienes que decirle Claire, tiene que escucharte.

– Harry – me pongo en cunclillas para verle la cara – Harry – se mueve – despierta, tengo que hablar contigo – abre los ojos.

– ¿Qué sucede? – pregunta distante – estoy tratando de dormir un poco – vuelve a cerrar los ojos; tomo aire.

– Por favor – digo un poco mas firme – tengo que hablar contigo.

– ¿Qué pasa? – está molesto.

– Quiero saber de una vez que es lo que te sucede.

– Estoy cansado, estoy durmiendo porque tenemos un concierto en seis horas y no podré dormir.

– No me refiero a eso, ¿qué pasa?, ¿dónde está Harry? – frunce el ceño.

– ¿A qué te refieres?.

– En simples palabras, ahora eres un completo idiota. – me crizo de brazos.

– Hey… no soy un idiota. – dice molesto – Solo salí de un mundo de fantasía… creo que este siempre fui yo, o al menos el que debía ser.

– ¿De qué demonios estás hablando? Esta persona que está frente a mi ni siquiera se parece a Harry. H es el chico divertido, carismático, el exhibicionista, el que acepta salir con una completa extraña y se encanta con ella, es el que cree en las personas, el que se burlaba de mí, el que me ayudaba, el que tomaba vasos de tequila para pasar el tiempo, es mi mejor amigo – veo nostalgia en sus ojos.

– Ya no está más Claire – su miraba se ensombrece.

– Dime la verdad, sé que hay algo mas derás de todo este acto de niño malo, dime que demonios es eso. – lo miro lo más severa y enojada que puedo.

– No es nada Claire. – mi paciencia llega a su fin.

 – ¡Me tienes harta maldita sea! – Harry abre mucho sus ojos – Me dejaste sola, dejaste de preocuparte por la banda y por tus amigos. Te fuiste del departamento y me dejaste ahí enfrentadome a mis mayoeres miedos. Hiciste lo que promestie no hacer Harry, me dejaste en silencio ¿y sabes a que me recuerda? – le reclamo con rabia y lágrimas en los ojos – ¡sabes a quién me recuerda esto Harry!

– A Shine – susurra.