CAPÍTULO 21
—Hey, Sky —lo saludó Jack con actitud despreocupada, en marcado contraste con la situación tan poco cómoda en la que claramente se encontraba—. Aquí nuestros superiores y yo tenemos una pequeña diferencia de opiniones.
—Cierra la boca —le espetó Mark con agresividad, zarandeándolo un poco.
—Éste no es tu asunto, novato —sentenció Orien mientras miraba a Sky fijamente y señalaba con un dedo hacia la puerta—. Sigue caminando.
El Blue Ranger se quedó inmóvil en su sitio con expresión indescifrable. Miraba a los tres hombres uno detrás del otro, en especial a Jack. Su intención no era nada clara, pero tampoco retrocedía y se iba como le estaban ordenando.
—Piensa bien lo que harás, amigo —le advirtió Orien con seriedad, dando un paso hacia él—. Charlie dice que tú sí tienes potencial, no como el resto de perdedores de tu equipo. No lo arruines por un donnadie como éste —añadió por último, señalando con su cabeza en dirección a Jack.
Sky siguió quieto en su sitio, pero visiblemente menos seguro y firme que hace un momento. Incluso fue incapaz de sostener la mirada del Green Ranger, y terminó virándose hacia un lado.
—Está bien, Sky —pronunció Jack de pronto, jalando de inmediato la atención del Blue Ranger de vuelta hacia sí. Él le sonrió, de nuevo bastante calmado—. No te preocupes. Los superiores y yo sólo… charlaremos un rato.
—Sí, sólo charlaremos —secundó el Yellow Ranger, riendo divertido.
Sky volvió a vacilar unos momentos, miró hacia otro lado, y después… giró sobre sus pies y caminó en silencio hacia la puerta, con la clara intención de retirarse.
Orien y Mark sonrieron complacidos, y en cuanto Sky se retiró del todo, centraron su atención enteramente de regreso en Jack.
—Ahora, volvamos a dónde estábamos —propuso Mark con elocuencia, tomándolo bruscamente de su uniforme para acercarlo a él y encararlo de frente—. Vas a ir con el Comandante, y les dirás justo lo que te dijimos.
—¿O si no? —le respondió Jack, bastante desafiante.
—No quieres saberlo, idiota —le indicó Orien con tosquedad, parándose a su lado.
Jack miró hacia arriba, como si en verdad ponderara sobre aquella cuestión, antes de dar su respuesta final:
—Yo creo que sí.
Aquello puso punto final a la poca paciencia que le quedaba a los dos Rangers del Escuadrón A.
—Listo, este idiota se lo buscó —exclamó Mark, exasperado. Tomó entonces a Jack con brusquedad de su traje con una mano, mientras alzaba su otro puño en alto, jalándolo hacia atrás con la intención clara de estampárselo en el rostro.
Jack se mantuvo extrañamente calmado ante esto, al parecer dispuesto a recibir el golpe, o con alguna estrategia para esquivarlo pese a no tener sus poderes de momento. Por suerte, no tuvo que hacer ninguna de las dos.
El puño de Mark se precipitó directo al rostro de Jack, pero no alcanzó a tocarlo. En su lugar, terminó estrellándose de lleno contra algo duro e invisible que pareció materializarse justo delante de Jack. Y no sólo eso, pues aquella barrera pareció reaccionar al choque del puño del Yellow Ranger, regresándole la misma energía en la forma de un pulso que lo empujó hacia atrás, tirándolo de espaldas al suelo.
Mientras Mark se recuperaba del impacto en el suelo, Orien se volteó a mirar al Red Ranger con confusión. No alcanzó a siquiera a cuestionarse si acaso él había hecho aquello, pues de inmediato notó que no estaba solo: el Blue Ranger del Escuadrón B estaba de pie a su lado, con una mano extendida hacia delante que brillaba con una extraña energía azulada.
—¿Otro meta humano? —exclamó Orien, confundido.
—¿Qué crees que estás haciendo? —le cuestionó Mark con agresividad, poniéndose poco a poco de pie, sujetándose la cabeza.
Sky se paró firme en su sitio y alzó sus puños en posición, claramente listo para atacar o defenderse, según fuera el caso.
—Regla 105-A del Manual para Oficiales de la S.P.D. —pronunció con voz clara y firme—. Un Ranger siempre defenderá y apoyará a un compañero Ranger ante cualquier peligro, y contra cualquier adversario.
—Me agrada esa regla —comentó Jack justo después, divertido. No tardó en igualmente pararse a lado de Sky y también ponerse en posición de ataque—. Me la tatuaré después de esto.
La intención de ambos era clara, y los dos Rangers del Escuadrón A no estaban dispuestos a quedarse de brazos cruzados ante ella.
—Bien, idiotas —exclamó Mark con furia. Pasó una mano por sus cabellos rubios para acomodarlos, y luego se puso también en posición—. Ustedes fueron los que lo pidieron.
Sin más espera, el Yellow y Green Ranger se lanzaron hacia ellos con clara actitud agresiva. Jack y Sky los recibieron, bloqueando sus primeros golpes a su propio estilo. Los cuatro comenzaron luego a moverse con agilidad por la estrecha habitación, lanzando y esquivando ataques, e incluso Jack hizo una demostración de su habilidad para improvisar, usando una de las sillas de la mesa de reuniones como escudo, y luego como arma empujándola como proyectil en contra de Orien.
Sky no se quedó atrás, pues tanto entrenamiento y peleas en el simulador no habían sido en balde. Y así lo demostró bloqueando los golpes de Mark y demostrando también su propia agilidad, como la pirueta que hizo para saltar sobre la mesa en el centro y caer al lado opuesto de su oponente.