Capítulo 6

Estoy dormida pero a lo lejos escucho como alguien se acerca a mi habitación, escucho su voz, es mi madre... DIOS MI MADRE, me levanto a toda prisa para darme cuenta que Álex sigue en mi cama, dormido como un bebé, intento levantarlo antes de que mamá entre o esto se pondrá incómodo.

—Alex, Alex, despierta.—le susurro mientras lo tomo por los hombros para poder moverlo.

—¿Que pasa cariño?—dice mientras me toma de los brazos para tirarme encima de él.

—Alex, mamá está en casa y viene hacía acá, levántate o estaremos fritos.—digo tratando de escapar de su amarre.

—¿Que?—pregunta mientras se levanta con algo de pereza.—¿Vero está en la casa?

—Si, creo que entró al despacho.

Se escuchan pasos hacercandose a la habitación.

—Es tarde ya viene hacía aca. —digo mientras me levanto rápidamente para colocarle el seguro a la puerta. —Ve y escóndete en el baño.

Veo como se levanta y se acerca a darme un pequeño beso en los labios.

—Si así serán los amaneceres contigo, déjame decirte que estaré encantado de jugar al escondite. —dice en un susurro mientras me sonríe de lado dirigiéndose al baño.

Veo como mamá intenta abrir la puerta pero el seguro se lo impide.

—Lia es mamá, vengo a saludarte.—dice mientras toca a la puerta. —¿Lia me escuchas? ¿Que hacéis? Abre por favor.

Dios ¿que hago? ¿Que escusa le doy para que no pregunte sobre el por qué le puse el seguro a la puerta? Dios ayudame!!

—Eeh mamá me estoy duchando, dame uno momento. —digo mientras corro de aquí para allá mientras me tomo de los cabello.

A mi madre nunca le a gustado la idea de que meta chicos en mi habitación, sólo familiares pero que la puerta permanezca abierta, pero esta vez es diferente, aunque Alex sea parte de la familia sigue siendo hombre y lo peor es que dormimos en la misma habitación y con la puerta cerrada, además el está semi desnudo y solo lo acompaña ese pantalón.

Entro a toda prisa al baño y le hago seña de que haga silencio a Álex.

—Volteate.—le digo.

—¿Por qué?

—Me voy a meter a las ducha, le he dicho a mi madre que me estoy duchando.. debo quitarme la pijama así que por favor volteate.— le digo en un susurro, el sonríe y se da la vuelta.

Me quitó la pijama de un solo golpe pero siempre pendiente de que Álex no se le dé por voltear y me vea.

—¿Que no miréis te digo?— le digo en susurro.

—Vale, Vale pero ni que te fuera a comer con la mirada.—me dice con una sonrisa picarona mientras intenta voltear para verme.

Mamá vuelve a tocar y me meto de una a la ducha para empaparme de agua, cuando ya estoy toda mojada salgo de rapidez y veo como Alex estuvo viéndome todo el tiempo con cara de sorprendido.

—Se te caerá la baba cariño.—le digo mientras me envuelvo en la toalla y le cierro la boca.

Salgo del baño corriendo y le abro a mamá.

—Lo siento mamá, ¿Te hice esperar mucho?—pregunto y ella solo ignora lo que digo y entra a mi habitación.

—Nunca le pones seguro a la puerta, ¿Con quién estás?

—Con nadie mamá, sólo me estaba duchando y aunque no lo crear ya le coloco el seguro cuando me baño o me cambio, recuerda que ahora vivimos con un hombre.—le respondo tratando de sonar confiable y no desesperada para salir de esta situación.

—Tienes razón pequeña, cuando estés lista baja a desayunar, te espero... Espera ¿y Alex?

—Eh salió a trotar.

—¿Como sabéis eso?

—Mm porque me invitó pero tenía pereza así que fue solo.

—Esta bien, te espero abajo cariño.—termina diciendo aún con un poco de desconfianza en la cara. 

Mamá es muy estricta cuando se trata de mi y de chicos. 

Entro rápidamente al baño para avisarle a Álex que ya puede salir, al salir me da un pico y se marcha.

Luego entro a terminar de ducharme, me cambio y bajo, desayunamos y mamá se despide porque iba a hacer unas llamadas.

—Esta lista para el almuerzo cariño, Eli y Lina vienen a almorzar.—dice antes de irse, me da un beso y se retira.

Me quedo sola para terminar mi desayuno cuando siento que hay alguien detrás de mí.

—¿Por qué tan sola pequeña?—pregunta con voz gruesa.

Dios apiádate de esta pobre alma!

—No estoy sola, ahora estás tú.—le respondo volteando para quedar a pocos centímetros de su rostro.

Me quedo ahí quieta, observando esos hermosos y perfectos rasgos que tiene, pero me saca de mi trans al escuchar hablar a mi nana.

—Cariño retiraré los platos de tu madre, mi niño ya te traigo tu desayuno.

—Gracias nana.—dice Alex y se sienta al lado de mi.—Estas preciosa.

—Lo sé—digo sonando un poco arrogante pero en broma.

—Me da gusto que lo sepas.—termina diciendo sin darle importancia a mi arrogancia y terminando con un beso que fue correspondido.

Besa como los dioses, cada vez que me besa hace que desee más de él y es un martil no poder seguir.

Debemos separarnos porque nos falta el aire y porque Aurora se acercaba.

—Aqui tienes cariño.—le dice a Alex mientras coloca el plato en la mesa. 

—Gracias nana.

Luego de eso desayunamos y hablamos de nosotros, de lo que seríamos de aquí en adelante y me propuso que fuéramos novios, quedé un poco ida ya que esto está pasando muy rápido y no sé cómo sobrellevarlo pero aún así acepte porque quiero estar con él, me siento bien con él.

—Veamos una peli mientras llega mamá, la tía Lina y eli.—le digo.

—Claro, vamos.

Subimos a mi habitación y nos pusimos a buscar en Netflix alguna peli buena para ver mientras pasa el tiempo.

Mientras Alex buscaba una película yo bajé a hacer palomitas de maíz, cuando estaban listas subí y Alex ya tenía la peli, el y yo tenemos gustos similares así que optó por una de acción llamada Escuadrón 6, nos acomodamos en la cama y le dimos play a la mañana de películas.

Luego de 2 horas se acabó la película y solo nos quedamos ahí acostados mirándonos las caras y sin darnos cuenta comenzamos a besarnos, besos con un poco de deseo.