Días después...
—¡Hailee!— la regañé, sólo se la pasaba comiéndose los bocadillos que daríamos en la reunión.
Sí, después de nuestra graduación, el regreso de Ash y que yo volvería a vivir a casa con mamá, decidimos hacer una pequeña reunión para "celebrar" todo eso.
—¡Lo siento, Sam! Estoy muy nerviosa, Calum ha estado muy extraño estos días... Se va durante el día y no me dice a donde va... ¡SEGURAMENTE ME DEJARA HOY!— Hailee comenzó a llorar extrañamente, como si estuviera fingiendo, pero realmente estaba triste.
—Escucha, no creo que él te vaya a dejar, han estado juntos por años. Él te ama, Hailee.— La abracé, no quería verla así.
—Tienes razón...— Se secó las lágrimas. —Terminemos con la cena.
Minutos más tarde, la cocina de mi departamento quedo hecha un desastre, pero no podíamos negar que nos había quedado todo perfecto para esta noche.
No faltaba mucho para que diera la hora acordada y nosotras estábamos hechas un desastre al igual que la cocina.
—¡Hailee, vamos a arreglarnos!— La tomé del brazo y la llevé a rastras a mi habitación.
No podía creer que las primeras veces ella era la que le preocupaba todo esto, pero hoy sería un día muy especial, yo lo sabía.
Claramente había un motivo más importante que el sólo reunirnos, Calum me pidió ayuda para esto. Así que tenía que dejar más que hermosa de lo normal a mi mejor amiga.
Un par de minutos más tarde, no sé cómo logramos vernos presentables en tan poco tiempo, pero me alegré, seguramente Calum y Ashton ya vendrían hacia acá.
A pesar de que en está cena estaríamos en parejas, porque sí, Ash y yo en cuanto nos vimos de nuevo, nuestra relación continúo como si no hubiesen pasado los años, después de todo, eso pasa cuando encuentras al amor de tu vida, pueden pasar muchas cosas o separarse y el amor seguirá intacto.
Decidimos también invitar a Chris, ya que él también ha sido nuestro amigo aunque no estudiáramos juntos y fuese un par de años mayor. Alex por suerte había estado libre estos días y en casa, así que se unió a nuestra reunión.
Alguien llamó a la puerta y ambas nos sobresaltamos, a pesar de ya tener todo listo, Hailee me estaba transmitiendo sus nervios.
—¡Abre tú, aún no estoy lista!— Corrió de nuevo a la habitación, ya estaba más que perfecta pero insistía en que no.
Me dirigí a abrir la puerta, no sin antes darme un vistazo en el espejo junto a la puerta.
Abrí la puerta pensando que era Ash y mi mejor amigo, pero me equivoqué.
—¡Sam, qué gusto verte!— Chris se abalanzó sobre mí, le correspondí a su abrazo, riéndome demasiado fuerte.
—Hablas como si hubieran pasado años sin vernos.— Seguía riendo. Él me miro mal.
—No, pero ya no te veía a diario.— Hizo un pequeño puchero. Era tan tierno.
—Lo sé.— Fingí quitarme una lágrima imaginaria de la mejilla.
—¡Amor!— Hailee apareció en la sala muy entusiasmada.
—No, lamento decirte que no soy tu amor— Chris se burló de ella. Ella sólo rodó los ojos.
—¿Lo ves, Sam? Calum no vendrá, ya no me ama.— Sus ojos comenzaron a tranquilizarse.
Chris me miró extrañado. Yo me acerqué a ella rápidamente para abrazarla y evitar que llorará, además su maquillaje se arruinaría y estoy segura que cuando suceda lo de esta noche, ella le dará un mini infarto al estar así.
—¿Bromeas, verdad?— Chris no paraba de reír. Hailee sólo lo veía mal. —¡Nunca había visto a un chico tan estúpidamente enamorado como Calum lo esta de ti! Incluso que ahora con las pocas fans que tenemos, él se siente incomodo porque se acercan demasiado.— Dejó de reír al ver como los ojos de mi mejor amiga se iluminaron.
—¿En-en serio?— preguntó con una gran sonrisa en su rostro.
—Claro— le sonrió sinceramente.
Sabía que hablaba muy en serio, su banda ahora estaba empezando a ganar un poco de fama y las chicas solían estar detrás de ellos. El mismo Calum Hood me contó que había algunas que eran muy intensas, que incluso trataban de besarlo, pero él siempre ha respetado a Hailee, tiene miedo de perderla. Sin embargo, le he explicado que eso es parte de la fama, pues ahora no es un chico común, también debe entender a las personas que lo admiran.
Volvieron a llamar a la puerta, haciendo que Hailee se alarmara.
—Voy yo— les avise, para que ellos siguieran con su conversación sobre Calum en la banda. —¡Alex!— Me apresuré a abrazarlo. A él, hace mucho tiempo no lo veía.
Hailee y Chris se acercaron donde nosotros.
—A él si lo recibes con gusto y a mí no— Chris se quejó en broma.
—Perdón, pero él es como el bebé del grupo.— Lo solté para que saludara a los demás.
—Es verdad... Ustedes ya están a punto de casarse y yo sólo soy un universitario— rio, haciendo fruncir el ceño a Hailee.
—¿Quién se casará?— preguntó extrañada. Le di un golpe discreto a Alex en el brazo.
—Nadie... Nadie... Sólo lo decía porque... Porque... Ustedes son mayores.— Alex era pésimo mintiendo, pero Hailee no lo notó, al parecer seguía más preocupada porque 'Calum ya no la amaba'.
Estuvimos un rato charlando los cuatro, les conté como es que Ashton y yo habíamos vuelto a retomar la relación... No estaba lista para contarles acerca de que mi padre había regresado, ya que eso implicaba contar todo lo que había sucedido con Luke, y necesitaba que Ashton aprobara eso, después de todo, Luke era su hermano.
Poco después un golpe en la puerta hizo que el pequeño silencio que se había formado entre nosotros se esfumara.
—¡Debe ser Calum!— Hailee se levantó escandalizada.
—Yo abro...— Chris se ofreció, mientras yo trataba de calmarla.
—¡Mi amooor!— Hailee corrió a los brazos de Calum y este le correspondió el abrazo extrañamente.
Seguramente estaba muy nervioso.
Por fortuna mi mejor amiga no lo notó y la noche transcurrió normal. Estuvimos hablando sobre lo que cada uno haría en el futuro ahora que nos graduamos. Incluso Ash y yo nos abrimos a contar todo lo que habíamos pasado antes de irse. Desde cuando me empezaron a llegar los extraños mensajes, pasando por las cartas, el "secuestro" de Ash, cuando Luke nos quiso matar y les contamos las historias de como sus padres se conocieron y resultaron ser hermanos. Para finalizar, hubo que explicar que mi padre había regresado y alejado a Luke de nuestras vidas. Todos estaban atónitos, no creían nada lo que les habíamos contado, incluso Ashton, pues no sabía nada de lo último. Sin embargo todo era más que real...