Siempre Cerca Nunca Juntos

Sin salida.

-¿Cómo que no está embarazada? -Pregunté mirando a Gaia, ésta se había quedado totalmente muda -¿O sea que no hay un bebé? -Yo seguía aún perdida.

-¡No está embarazada pero si hay un bebé!-Gruñó Glenn sarcásticamente desde el otro lado de la línea.

Todo estaba yendo demasiado rápido, era casi vertiginoso. Ella no había estado nunca en embarazo solo había estado mintiendo...

-Deberíamos vernos en alguna parte -Sugerí. Pero ambos me ignoraron, así que decidí guardar silencio.

Era obvio que todos estábamos perplejos por la noticia. En forma personal me había afectado mucho, pero me imaginaba qué estaría pasando por la cabeza de mi mejor amiga. Le habían destruido se relación a costa de mentiras y no había podido hacer nada; pero era obvio que tendría que haber algo que pudiéramos hacer. Estaba casi cien por ciento segura que Glenn ya no seguiría con la babosa después de eso.

-Tengo que marcharme, quizá después hablemos -Se despedía Glenn -Gaia...-Dijo pero después sólo se quedó en silencio y luego simplemente colgó, dejando sus palabras en el aire.

-Vas a arreglar las cosas con él ¿verdad? -Pregunté sin esperar -Ya no va a haber un Glennsito -Dije bromeando a tiempo que Gaia me daba su mirada de muerte.

-Quiero dormir un rato -Las palabras de ella eran claras "Kay, vete de mi casa, quiero llorar tres horas más"

-Vamos, salgamos a hacer algo -Me puse de pie y la miré de reojo -Necesitas sacar toda esa mala energía de adentro y además no quiero ir a casa, mi madre me matará por llegar tarde. -Gaia sonrió y yo le devolví la sonrisa.

-Tienes mucho que contarme ¿Sabes? -Preguntó un poco más emocionada y levantó sus oscuras cejas -Así que Iker... -Mis mejillas se pusieron rojas enseguida - Por ahí escuché rumores -Ella ensanchó su sonrisa y yo rodé los ojos.

-Vámonos ¿quieres?. Tengo hambre -La tomé de la mano y la arrastré hacia abajo antes de que le entrara la depresión.

-No puedo salir con este uniforme -Se quejó, pero la ignoré. Como si a ella le importara salir así vestida.

-Podemos ir a las Tarvacois -Sugirió ella -Hace tiempo no vamos -Asentí mientras ella tomaba las llaves del auto.

En el auto todo estaba fresco. El cielo había tomado un matiz un poco oscuro y varias nubes ahora estaban tapando la vista. Lluvia, era obvio, pronto comenzaría la tormenta.

Gaia arrancó el coche. Íbamos a Tarvacois. Era un pequeño restaurante portugués que quedaba casi llegando a las afueras del pueblo. Era cierto que hacía tiempo no íbamos a ese lugar, quizá fuera porque la comida era muy cara o porque quedaba muy lejos; yo optaba más porque la comida era demasiada cara.

El camino se iba a hacer largo si no conseguía que ella hablara conmigo.

-¿Cómo te sientes? -Directa, como siempre, o como casi siempre.

-Bien, supongo -Se encogió de hombros y la miré de reojo.

-Así que te sientes bien -Murmuré tratando de parecer casual.

-Pues si, Kay. No hay mucho qué hacer ¿Sabes? Puede que la estúpida esa ya no esté embarazada, pero eso no quita el hecho de que Glenn me engañó con ella, y después me lo escondió.

-No quería lastimarte -Contra ataqué -Además él estaba tomado, puede que ella lo haya violado -Me reí mentalmente de mi estupidez.

Gaia giró hacia la plaza y tomó toda la avenida de frente. Era más cerca si rodeábamos el lago.

-¿Me estás diciendo que debo perdonarle simplemente porque él estaba tomado? -Ella apretó el volante con fuerza -Así que cuando Iker te engañe con María, Claudia, Susan, Ángela y otras más ¿vas a buscar una excusa para perdonarle?

Sus palabras me abofetearon fuertemente en el corazón. Ella simplemente había deducido que Iker en algún momento me cambiaría por otra.

-Lo siento -Balbuceó ella -No quise decir eso, sólo que...

-Detén el auto -Dije tranquilamente, mientras mi corazón latía histéricamente.

-Vamos, enserio. No te enojes, Discúlpame ¿si? -La miré a los ojos y vi que estaban llorosos.

Lo haría. Cada que me molestaba con ella por algo que hacía, ponía cara de perro y después simplemente lloraba porque ella sabía que era incapaz de verle llorar.

-¿Deberas crees que tan poco le importo a Iker? -Pregunté. Necesitaba saber qué pensaba ella.

-¡Claro que no! -Me miró rápidamente -Siempre te había dicho que él te miraba de una forma especial, sólo que tu jamás le pusiste atención -Añadió - Siento lo que dije, es sólo que... Dios deberías tratar de entenderme un poco más -Continuó manejando -Cada que miro a Glenn o escucho su voz, recuerdo ese día en la cafetería. La humillación aún está presente. La forma de cómo me miraban y él no se alejó de ella en ningún momento...-Suspiró -Aún no estoy lista para lidiar con ello ¿Si? -Paró en el semáforo y se giró para mirarme complemente - Solo te daré un pequeño consejo y espero que lo tomes en cuenta, Kay, porque eres mi mejor amiga y no quiero que te lastimen. En una relación siempre hay alguien que ama más que el otro, y por tu bien, te sugiero que no seas tú.



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Editado: 10.06.2018

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