J & L  Abogados

- Es imposible – grita mi abuela en el desayuno – estuvimos 20 minutos esperando a Cassandra

Ayer cuando llegue al punto de encuentro con la abuela se enfureció porque llegue tarde, desde ayer por la noche me ha estado reprochando mi impuntualidad y dándome charlas de la importancia de ser puntual.

- ¿no cree que está siendo un poco exagerada suegra? – pregunta mi padre bebiendo un sorbo de su jugo de naranja a lo que mi abuela solo le contesta con un gesto de mal gusto en su rostro.

- Deberíamos comenzar a hacer los preparativos para esta noche – dice mi mama al notar que si esta conversación continuaba pronto mi abuela y mi papa discutirían

Poco a poco todos fueron levantándose de la mesa acatando las órdenes que les daba la tía Magda para organizar la fiesta de la abuela. Ella siempre era buena organizando este tipo de eventos y no era para tanto la decoración del jardín para la fiesta realmente quedo bastante bien.

Al llegar la noche poco a poco fueron llegando los invitados en su mayoría todos igual de viejos que mi abuela.

- Esto ya parece asilo – dice Luis sentándose a lado mío}

- Si seguimos aquí los próximos 5 minutos no será  un asilo si no un cementerio – bromea Rogelio comiendo una rebanada de pastel

La fiesta a estado demasiado aburrida para nosotros mientras que nuestros padres y la abuela no han dejado de hablar con los invitados, mi mama siempre dice que hacer este tipo de conversaciones ayuda a establecer conexiones.

- Me voy esto es muy aburrido – se levanta Allyson de su asiento – avísale a mi mama que me fui – ordena a su hermano

- Avísale tu – contesta entre dientes Luis

- Yo siempre te ayudo avisándole a mi mama cuando no estas

- ¿Cuándo has hecho eso Allyson? – Luis alza levemente su tono de voz

Luis y Allyson no tienen exactamente la mejor relación de hermanos pero siempre me divierte mucho ver sus peleas.

Rogelio me hace una leve señal para que nos vayamos y evitemos la incómoda escena de los hermanos.

- ¿Peleas mucho con Lily?

- Lo normal – me encojo de hombros - ¿Qué hay de ti?

- Kathy y yo – se queda un momento pensando como tratando de recordar algo – si te soy sincero no recuerdo cuando ella y yo hablamos los dos asolas – dice finalmente – solo hablamos cuando la situación lo amerita

- ¿Entonces no tienen una buena relación? – tan pronto como hice esa pregunta quise desaparecer por lo directa que fui al realizarla.

Realmente espero que no se enoje por hacer esa pegunta sobretodo porque mi relación con Rodrigo no es tan cercana para hacer esa pregunta.

- No lo sé – me contesta rascándose la cabeza – creo que he estado tan metido en mis asuntos que me he olvidado que tengo una hermana

Ambos nos sentamos en unos de los bancos que están en el jardín, no decimos nada solo nos quedamos viendo a las personas que pasan frente a nosotros.

- Es difícil – escucho decir Rodrigo

- ¿Qué es difícil? – giro mi mirada hacia él y noto que está jugueteando con los dedos de sus manos

- Complacer a mis padres – esa frase rápidamente capta mi atención y no puedo evitar sentirme identificada con esa oración – mi mama dice que debo elegir una carrera con buena estabilidad ¿sabes a lo que me refiero?

- Vaya que lo sé – suspiro

- Este es mi penúltimo año en el bachillerato en el próximos año tengo que elegir una carrera – dirige su vista hacia mí y me da una pequeña sonrisa – mi papa dice que tiene que ser una carrera igual o mejor de la carrera que estudio Luis es como si me quisiera poner a competir con el

- Mi mama dice que la vida es una competencia en donde solo el mejor gana – veo a mi mama a lo lejos brindando con una copa de vino junto a un grupo de personas

Rodrigo se levanta y camina sin ninguna dirección en particular solo camina sumergido en sus pensamientos dejándome ahí sola con una conversación sin terminar.

Me levanto y subo a la habitación busco en unas de las bolsas de mi maleta la tarjeta que el señor elegante me dio  Licenciado Nikolai  Vasiliev  Abogado en Derecho civil.

¿Realmente quiero esto en mi vida? Ni siquiera estoy segura de estudiar derecho.

xxxxxxxxxx

Llegamos a casa el domingo por la noche y estoy segura que mis ojeras dan a entender que no tuve una buena noche.

- ¿me estas escuchando? – pregunta Gustavo con la cejas fruncidas

- Te escucho – digo recargando mi rostro en mi mano derecha

- Somos equipo para este trabajo – dice escribiendo en su libreta – tal vez no te esfuerces demasiado con tus trabajos con Daniela pero conmigo será diferente

Al parecer sigue molesto por lo de la última vez.

- Solo dime que hacer – digo finalmente

- Investiga datos relevantes del tema lo que encuentres me lo envías a mi correo para revisarlo – levanta su mirada y veo como sus ojos azules están tratando de analizarme - ¿podrás hacer eso?

No digas nada solo lo hace para molestarte. Pero es que el realmente comienza a hacer insoportable.

- ¿Qué es lo que te molesta tanto? – pregunto inclinándome hacia el frente tratando de averiguar cuál es su problema conmigo

- Nada -  se levanta de su silla y sale del salón a pasos apresurados dejándome ahí sola con más preguntas que respuestas.

- Al parecer el señor perfecto se enojó – dice Daniela sentándose en el lugar donde estaba Gustavo hace unos segundos

- Espero que tu vayas mejor con tu pareja – menciono cerrando mi libreta