Siempre Fue Complicado

¿Destino o casualidad?

 

 

Cuando entro Linda cierra la puerta dejándome sola con el señor elegante. El mantiene su mirada fija en unos papeles que está revisando en nuestro anterior encuentro no llevaba consigo los lentes que tiene ahora tengo que admitir que se le ven bastante bien.

¿Debería saludarlo? ¿Presentarme? ¿Tratar de llamar su atención?

Me siento como una tonta, no sé qué hacer ni decir.

De pronto el levanta su mirada hacia mí me analiza unos cuantos segundos y vuelve a bajar su mirada a los papeles.

¿Me reconoció?

- Nuevo encuentro chica cereza – si me recuerda – ¿casualidad o destino? – dice señalándome la silla frente a su escritorio para que me siente

A pasos lentos y torpes me siento en la silla.

- ¿sabes cómo funciona esto? – se recarga en su asiento con un gesto de superioridad

- Observo y tomo nota de todo lo que haga – digo al recordar que Daniela me dijo que eso fue lo que hizo cuando ella realizo esta actividad solo que ella estuvo con una diseñadora grafica

- Exacto – se inclina sobre el escritorio y señala a un sillón que está en su oficina – ese es tu lugar

Me levanto para caminar con dirección al sillón pero antes de que pueda dar el primer paso me dice que tengo que quedarme ahí sentada como un mueble más sin hacer el más mínimo ruido.

Son las 5:47  de la tarde y esto es lo más aburrido que he hecho en toda mi vida no he tomado ni una sola nota desde que llegue aquí mi cuaderno está lleno de garabatos sin sentido.

Don elegante solo se la ha pasado revisando documentos y a realizado solo un par de llamadas.

Pero qué vida más interesante la de un abogado.

- ¿es demasiado aburrido? – pregunta de repente

- No – tan rápido como dije eso el quita su mirada del ordenador y me mira con una ceja arqueada – tal vez un poco

- ¿pensaste que este trabajo solo eran juicios? – pregunta levantándose de su asiento y caminando hacia mi dirección

- Por supuesto que no – al decir eso elevo un poco la voz – es obvio que antes de todo se debe revisar detalladamente el caso para ver si se lleva a juicio o no

- Interesante – se sienta en el sillón que esta frente de mi recargando todo su peso sobre las rodillas

Me están sudando las manos me esfuerzo tanto como puedo para parecer ser una persona serena y tranquila pero es imposible.

- Casi son las seis – digo mirando la hora en mi celular – tengo que irme – me pongo de pie y camino hacia la puerta

- Hasta pronto cereza – escucho que dice a mis espaldas pero evito girarme para que no vea que me sonroje

Al salir me despido de Linda y de la señora Consuelo.

Cuando estuve afuera del edificio el frio inundo rápidamente mi cuerpo.

Creo que mañana traeré una chamarra.

20 minutos después de la hora en la que dijo mi madre que pasaría por mi veo llegar el coche de mi papa.

- ¿y mi mama? – pregunto tan pronto subo al coche

- Con Lily – contesta mi papa sin volver a mencionar palabra alguna en todo el viaje a casa

Cuando llegue a casa el sonido de la música del violín se escuchaba por toda la estancia.

Lily movía sus dedos por las cuerdas del violín como si estos danzaran sin descanso sobre ellas, siempre envidie que ella pudiera tocar el violín de tan maravillosa manera cuando era pequeña al igual que a Lily mi mama me mando a clases para tocar el violín pero mi manos eran demasiado pequeñas para poder llevar el ritmo suficiente que necesita la música clásica.

- ¿Qué tal tu primer día? – escucho que pregunta mi mama saliendo de la cocina con un plato de fruta picada en sus manos

- Interesante – contesto tomando un trozo de manzana del plato

- Debes estar hambrienta – dice mi papa tomando su Tablet y sentándose en uno de los sillones

En todo el día ni siquiera había pensado en comer estaba tan distraída pensando en lo aburrido que era estar en esa oficina solo escuchando el sonido del teclado.

- ¿Y cómo es ser abogado? – pregunta mi hermana dejando de tocar el violín

Trato de sonar lo más emocionada posible al platicar con mi hermana sobre la hermosa profesión de derecho.

La semana paso sin ninguna novedad incluso cuando llego el viernes, día que me tocaba mi segundo encuentro con el señor elegante fue igual de aburrido que el primer día.

- Que aburrido – se queja Lily entrando a mi cuarto

- ¿no ensayaras hoy? – pregunto escribiendo en mi laptop la parte del ensayo que me toca hacer con Gustavo

- Hoy no – se acerca para ver lo que estoy haciendo – tarea ¿en domingo?

- Quiero adelantar lo más que pueda a la tarea ir dos días a la semana a la firma me quita tiempo

Y vaya que estar viendo dos veces a la semana al señor elegante hace que me estrese más de lo normal.

- Yo creo que te estas estresando tu sola más de lo normal porque no quieres ir a ese lugar

Dirijo mi vista  mi dedo índice y no puedo evitar pensar en la primera vez que lo vi y lo que menciono sobre mi dedo aún sigue teniendo esa herida solo que está comenzando a agrandarse más.

- Mi maestra de violín dice que gracias a mis esfuerzos participare en el recital – Lily se pone a dar brincos en la cama logrando sacarme de mis pensamientos

- No brinques en la cama – digo entre dientes

- ¿no dirás nada de mi recital? – pregunta caminando hacia la puerta de mi cuarto

- Felicidades Lily – digo girándome hacia ella – lo lograras

- Gracias – dice haciendo una pequeña reverencia para después salir de mi habitación

El lunes en la escuela al entrar a mi salón veo a Daniela platicar alegremente con Carmen. Cuando me siento en mi lugar veo a Gustavo dirigirse hacia mí.

Por favor que me diga cosas buenas.

- Tu parte del ensayo fue interesante – dice sentándose en el lugar enfrente de mi




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.