Le confesé pero se lo tomó mal.
Creí que nuestro tiempo juntos cambiaría la forma en la que me ve.
Pero...nada.
Quiero llorar.
No puedo forzarla a gustarle. No puedo forzarla a que me quiera.
Pero...duele.
Me ha rechazado tajantemente. Ya le gusta alguien. No sé quién es.
Y tampoco quiero averigüarlo.
Me voy de este diario hasta nuevo aviso...