Siempre Tú

CAPÍTULO 23

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Logan

Regreso al departamento después de dejar a Mei en su casa, voy a mi pequeño gimnasio a entrenar un poco antes de ir a mi próxima entrega. Mientras golpeo el saco de box recuerdo las palabras que le dije a Mei, la verdad, no sé qué tipo de relación hubiese tenido con mi hermana si hubiese nacido junto conmigo.

Tal vez nos llevaríamos bien o no, pero estoy seguro de que siempre la protegería. Cuando escuché las palabras de la doctora pensé en matarme, estaba deprimido, triste tanto que fue a su tumba a pedirle perdón por arrebatarle la vida. Mei me hizo recapacitar con su cachetada, es cierto no soy un asesino no tenía conciencia. Dicen que los bebes sienten todo cuando están en el vientre como daría por recordar esos meses que pase junto a ella.

Quitarme la vida es el camino fácil, un camino cobarde si lo hubiese hecho dejaría a Mei y su tía devastadas ellas fueron las únicas personas que me mostraron cariño no podía hacerles eso. Por eso voy a vivir por mi hermana Elizabeth, por Mei, por la señora Maylin.

Me voy a dar una ducha rápida me cambio a la ropa adecuada, tomo mi mochila y mis llaves y salgo hacia el lugar indicado. El señor Xun Qian se molestó un poco por que no fui el día anterior le expliqué la situación en la que me encontraba para mi suerte ese tipo también va estar este día. Subo a mi moto y me dirijo hacia el callejón del perro.

Después de un largo tiempo al fin llego al lugar son las diez y media dejo la moto junto a otras, camino por el callejo hay trozos de fundas, papeles por el lugar esta, oscuro giro a la izquierda y miro a la gente haciendo un circulo rodeando a los peleadores a diferencia de los otros lugares aquí las peleas se las hacen al aire libre, miro por los alrededores y cuatro edificios rodean el lugar de peleas.

Busco por el lugar algún sujeto de seguridad o demuestre algo de autoridad rodeo todo el lugar y finalmente lo encuentro es un tipo alto vestido de terno por su apariencia y sus expresiones es alguien con autoridad me acerco.

–Buenas noches. Busco a Lion Álvarez –el tipo me mira de reojo analizándome cuidadosamente enseño mi tatuaje.

Se mueve de la pared en la que estaba arrimado –sígueme –comienza a caminar y voy tras él abre una puerta del edificio entramos aun va delante de mi caminamos hasta las escaleras a tres pasillos y subimos hasta el cuarto piso y caminamos regreso hasta el tope del pasillo en la última puerta toco la puerta una cerradura para ver se corrió –soy yo –dijo y la puerta se abrió.

Me hizo una señal para entrar mire todo el lugar y es igual de lujoso que los otros, mire hacia un extremo donde se encontraba un jacuzzi ahí se encontraba un sujeto con una gran melena castaña acompañado de cuatro hermosas mujeres acomodados en sus brazos mirando las pantallas con las peleas afuera –señor el enviado de Jin Chen está aquí –dijo el que me escolto.

El tipo se volteo y me miro unos segundos se levantó y beso a cada una de las hermosas mujeres en los labios. Vaya mujeriego o don Juan –ya vengo linduras –les dijo y ellas le pidieron que no tarde se colocó una toalla se paró frente a mí –tráelo –ordeno y el que estaba dentro fue a traer el maletín –toma asiento –señalo unos muebles me senté –te ofrezco un Whisky –algo me incomoda declino amablemente su oferta –¿Cómo se encuentra Jin?

–Creo que ya lo sabe –se ríe y se sirve un whisky el sujeto viene con el maletín enseñándome el dinero y en ese mismo instante el tal Lion me apunta con una pistola.

–No tan rápido –lo miro fijo conservando la calma –las manos arriba –obedezco –tus intensiones ¿Cuáles son?

No entiendo su agresividad en los otros lugares me trataron bien ¿Por qué? Se toma tantas medidas. Y lo recuerdo Jin me dijo que fue atrapado por ayudar a escapar a uno de sus apostadores que había asesinado a un hombre y este lo traiciono dejándolo a merced de los policías Jin me dijo que cuando salga se las iba a cobrar.

–Vengo por el dinero de Jin, nada más –digo con calma.

–¿Por qué no viniste ayer? –pregunta, seco.

–Estaba enfermo.

–Crees que estoy jugando –dispara al aire.

El ruido activo un poco mis nervios y eso es exactamente lo que no debo mostrar –entiendo los motivos por lo que actúas así, pero, yo no tengo asuntos contigo el que los tiene es Jin –trato de que mi voz salga lo más calmada posible, pero la estoy perdiendo otra reacción suya y esto se vendrá abajo debo actuar rápido. –Solo vengo por el dinero que me encargo Jin nada más –el sujeto me mira y baja la pistola.

–Por tu bien espero que así sea –se levanta y vuelve al jacuzzi con sus hermosas acompañantes tomo el maletín y lo guardo en la mochila el tipo que me escolto me acompaña a la salida.

–Largo –dice fríamente.

Lo miro fijo este lugar es distinto –quiero pelear y ganar algo de dinero.

–Largo –vuelve a decir.

¿Qué demonios le pasa? Mejor digo

¿Qué demonios le pasa a ese tal Lion Álvarez?

Su problema es con Jin no conmigo por las medidas que tomo en mi contra diría que está asustado con cualquiera que tenga relación con Jin hay tanto lio entre ellos que no me dejara pelear. No hay opción regreso por el callejón subo en mi moto y vuelvo, pero tomo algunas medidas de seguridad las acciones del tipo ese me las dejaron claro.




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