—Prefacio

Sentí un fuerte dolor de cabeza al encontrarme de nuevo en ese lugar y todo volvió a mi mente en un momento, había olvidado por completo que ese lugar era especial y que no debía decirle a nadie que existía ni siquiera a mi hermano, traté de quitar esos pensamientos y giré mi cabeza buscando donde siempre lo hacía, a pesar de estar flotando en un lugar vacío sin nada ya estaba acostumbrada, era como nadar en una piscina, tu cuerpo es tuyo y en este caso la galaxia era el agua, suspiré pesadamente, sabía que cuando abriera los ojos me vendría una horrible jaqueca y un dolor en todo el cuerpo como si estuviera haciendo algo durante varias horas, negué.

— ¿Mamá? — llamé a la nada con voz suave y ligera — ¿Este es el lugar correcto o tengo que encontrar otro? — dije en son de broma pero con algo de verdad, ese lugar era un completo laberinto, dabas vueltas y vueltas hasta encontrar el lugar correcto — Me queda claro que tengo que dar una vuelta — dije rendida para partir a otro lugar pero no lo entendía, solo era una simple galaxia no tenía que haber lugares fijos, era como el espacio simplemente sin nada.

— Esperanza — oí mi nombre a lo lejos, me limité a voltear para ver a esa 'persona' fijamente — Bienvenida — dijo con voz suave, rodeé los ojos, era la misma rutina cuando siempre venía a este estúpido lugar, la primera vez que vine de verdad pensé que tenía ese vínculo con mi madre que muy pocas veces tenía en la realidad, era ingenua, solamente me mostraba ese lugar por su conveniencia, buscaba su beneficio, siempre que estaba en ese lugar era por algo, esta vez no sería la excepción.— ¿Cómo estás? — me preguntó.

— Bien — respondí extrañada y con un brillo en mis ojos, era la primera vez que me preguntaba algo así desde que podía comunicarme con ella.

— Que bueno — me respondió con una sonrisa — Hoy — completé la frase.

— Volveré a ese estúpido colegio donde es un infierno al igual que como lo deje — dije, pero en realidad estaba exagerando, había extrañado todo, casi todo.

— Quería decirte que alguien te va a acompañar siempre, en cualquier momento aparecerá — dijo — Y una cosa más — sabía que esto pasaría, siempre que iba ahí era para algo, solo soy un objeto — ¿Conseguiste información de tu hermana? — busqué algún lugar o alguna cosa para simular que era una persona y fulminarla con la mirada, nada, así que solo me quedé con las ganas de hacer dicho acto, negué con la cabeza — Esperanza — me miró con una mirada que conocía muy bien, esa mirada que a cualquier hijo le daría miedo.

— De verdad no sé nada — dije, desde que mi madre había desaparecido junto con mi padre nunca supe nada de ellos, a penas pudieron criar a una niña de diez meses para que luego sufra un 'accidente' y como lo inteligente que soy me lo creí para que luego después de años me dijeran que estaba viva y que mi deber era buscarla. — Si eso es todo, quiero irme de este lugar y seguir durmiendo — dije con una sonrisa forzada, para luego despertar en mi habitación con una jaqueca y dolor en todo el cuerpo — Gracias mamá, primer día de clases y me haces esto — dije con sarcasmo, oí que mi nombre que fue llamado desde la planta baja — ¡Ya voy! — dije levantándome de la cama con un dolor en mis piernas, suspiré, iba a ser un día largo.

“Y acá es donde mi historia comienza”