Silencio de un corazón roto

Carta 2: Te quiero

Supe que te quería desde el primer momento en que te vi, luego con el paso del tiempo me sonreíste y abrazaste y me sentí parte de tu vida, recuerdo ese día y lo hare siempre, así como recuerdo cada momento a tu lado, cada risa, cada pelea y cada abrazo.

Supe que te quería porque me hacías sentir que tenía un corazón, este latía como loco solo al verte o cuando reías, ese perfecto sonido que me erizaba la piel y ni hablar cuando me mirabas y me regalabas esa sonrisa, la más hermosa de todas y la forma en que decías mi nombre como si fuera lo más interesante del mundo. Era increíble como mi corazón respondía como un desquiciado ante todo eso.

Supe que te quería cuando tuve miedo, miedo a encariñarme más de lo que ya estaba contigo y terminar con el corazón roto. Quería alejarme y no seguir derritiéndome cada vez que te acercabas, debía apartarte pero no podía, pasaban los días pero seguías teniendo ese efecto en mi, ese que hacía que me olvidara hasta la forma de hablar, que mis piernas temblaran y mi corazón se desbocara.

Supe que te quería porque deseaba besarte, sentir que me pertenecías aunque sea solo unos instantes, pero la realidad era otra y no quería terminar dañando lo que era una amistad tan bonita, eras el hombre que rebasaba mis limites en todos los sentidos, desordenaste mi vida, mi mente y mis emociones.

Supe que te quería cuando acepte lo que mi corazón decía y negaba darle la razón, sabía que lo que estaba sintiendo me podía llevar a la gloria o al mismo infierno ya que te estaba dejando el poder de destruirme en cualquier momento. Supe que te quería porque estaba sintiendo mucho, sentía que al tenerte así de cerca…tan mío… mi corazón explotaría de amor.

Supe que te quería cuando las palabras cursis querían hacerse presentes y no podía dejarlas salir, no podía decirte que estaba estúpidamente enamorada de ti, no podía decirte que mi corazón ya te había elegido solo a ti.

Supe que era amor cuando solo verte sonreír me invadía una gran alegría, cuando tu felicidad era capaz de crear la mía e incluso tu tristeza me la transmitías como si fuera mía, tus sentimientos eran como si fueran uno solo conmigo.

Te quería, lo cual significaba que no estaría solo para lo bueno sino también para lo malo.

Te quería conmigo pero no atado a mí, te quería sin cadenas, sin preguntas y sin respuestas.

Te quería de verdad, como el hombre que eres, te quería con todos tus defectos, porque eras más que una cara bonita, pero no lo sabrías porque no pensaba decírtelo y tú no estarías dispuesto a escucharlo.

Te quería y estoy realmente jodida porque estoy segura que no querré a otro hombre como lo hice contigo.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.