Silver sigue con su relato de la primera expedición a las Rockers:
Al día siguiente nos dividimos en cuatro grupos para explorar cada camino por separado. No teníamos mapas de las cuevas así que teníamos que ir haciéndolos nosotros mismos. Como puedes adivinar nosotros tres fuimos en el mismo grupo. Nuestro plan era no alejarnos a más de un día de distancia para luego volver y poner en común como era cada camino.
Empezamos nuestro estudio con buen ritmo, encontrando el camino despejado y sin ningún problema obstáculo. Encendimos las luces igual que hice en el inicio. El día se desarrolló sin problemas; descansamos, y a la vuelta tampoco tuvimos problemas dificultades. Al reunirnos los cuatros grupos supimos que nuestro camino era el único despejado, el resto estaba obstruido más tarde o más temprano.
Así pues, decidimos hacer una expedición de varios días por nuestro camino. Nosotros estábamos en el plan porque ya lo conocíamos, pero no fuimos todos; los que se quedaron se encargarían, en el plazo de una semana, que era el tiempo que nos habíamos dado para avanzar y retroceder, de conseguir más comida.
¿Por qué éramos tan miedosos?, te preguntarás sobrino. Teníamos miedo de que los caminos estuvieran infectados por homs u ogros. Lamentablemente ese hubiera sido un problema que podríamos haber solucionado, no el que nos encontramos. Pero me estoy adelantado a la historia.
Durante los primeros tres días pudimos caminar sin problemas por la luz desprendida por los faroles hasta que la luz desapareció. Justo en ese momento decidimos acampar para descansar y al día siguiente seguir con las antorchas de la propia hoguera. Bueno. No llegamos a ese plan. En mitad de la noche nos despertaron los gritos de los miembros de la guardia. Desaparecieron sin más. Y ahora quedaba lo más importante, ¿qué o quién se lo había llevado?
Capitán del Regimiento Pok:
Por fin el Regimiento de Pok está preparado para recibir el visto de bueno de nuestro cliente, el Príncipe heredero de Ofani. Yo estoy contento con las tropas y con el adiestramiento. Hemos tardado dos semanas en volver a la capital y a algunos les falta equipamiento y entrenamiento, pero es algo que podremos solucionar en menos de dos meses. Acampamos a menos de tres millas de nuestro destino.
Me voy a reunir con el Príncipe Alorian en mi tienda de mando. Por lo que me dicen desde los puestos de vigía, viene solo así que decido reunirme con él sin ninguna compañía. La tienda está situada en el centro del campamento en el eje de las dos grandes vías que pasan lo cruzan. El Príncipe tiene peor cara que la última vez que le vi. Si viene sin colaboradores es que no se fía de nadie para esta reunión. Debe sentirse muy solo en la Corte para llegar a esta situación.
- Señor, ahora mismo el Regimiento de Pok tiene ochocientos miembros. Conforme a nuestro contrato están a su mando. También le indico que necesitaremos dos meses y armaduras para tener plenamente operativos a trescientos miembros de infantería pesada.
- Está bien, capitán, ¿con cuántos soldados puedo contar ahora mismo?
- Unos quinientos soldados de diferente tipo señor.
- Encárguese de preparar una guardia personal para mí. Además, mándeme toda la lista de necesidades para que todo el Regimiento de Pok esté operativo. Por si no se ha dado cuenta capitán, no me fio de nadie de la Comitiva Real. Por otra parte, su movimiento defendiendo el Desfiladero de Rocker ha conseguido llevar mucha alabanza del pueblo llano, pero a los consejeros de mi padre les ha parecido ofensivo. Capitán, tenemos que hablar de la cláusula del contrato. Necesito un Regimiento totalmente afín a mí y ustedes no podrán salir con vida de este reino después de la defensa.
- Señor, lo he hablado con mis mercenarios y estaríamos de acuerdo de entrar a su servicio. Dejamos a muchos hermanos en el Desfiladero Rocker y quisiéramos rendirles homenaje cuando sea posible.
¿Os está gustando este formato? Espero vuestro comentarios para mejoras.