Silver

Capítulo 27

RODRICK, SOBRINO DE SILVER

En las mochilas no cabe ni un solo gramo más de comida. Son muy pesadas, cuesta andar con ellas, pero tenemos comida suficiente para varios días y para todos. Nuestro objetivo está cumplido.

-¡Maestra! Cada vez que pases por este pueblo, no olvides saludar a tu estudiante.

-Sabes que lo haré Salina. Lamento que no me dejarás pagar nada, es algo que no me gusta.

-No diga tonterías maestra, sigo diciendo que es lo mínimo que puedo hacer. Espero que la próxima vez pueda disfrutar más tiempo de vuestra presencia.

-Prometido Salina. Estaremos más tiempo contigo la próxima vez, pero si ahora tardamos más, mi hermana me mata.

Salimos del pueblo, cuando está atardeciendo. Tiempo justo para reunirnos con Zelendi y el clan orko para seguir haciendo camino por la noche. Como dijeron mi tía y el mago, es importante no quedarnos parados más de una mañana porque se aumenta la posibilidad de ser descubiertos.

Según llegamos a la cueva, solo nos recibe Zelendi en la entrada mientras que los orkos están más escondidos. Sacamos la comida que tenemos preparada para este momento. Comida que no aguantará en la mochila y que les dará energía rápido: galletas elfas, bollos enanos y dulces humanos.

Los orkos se chupan todos los dedos y procedemos a empezar otra larga marcha hacia el nuevo escondite.

PRINCIPE ALORIAN

Después de firmar el acuerdo me dirijo a la tienda que me han preparado junto a mi exigua escolta. Ya dentro hablo con la persona con la que estoy cogiendo confianza:

-Capitán, su Regimiento, como mercenarios han firmado muchos contratos. ¿Qué opina?

-Señor, es difícil adivinar completamente si la otra parte cumplirá, pero lo que he podido ver es que este Herob tiene buena pinta. Si me permite, como usted cuando firmamos; es la misma situación. Hasta ahora ha cumplido con todo.

-Solo falta que yo pueda cumplir con mi parte y ser el dirigente de mi nación.

- Seguro que cuando lleguemos al campamento tendremos más noticias de su red de espías, señor. Podremos organizarnos a partir de entonces.

Al día siguiente, cuando ya estamos dispuestos para partir, Herob se reúne con nosotros con ropa cómoda.

-He decidió acompañaros hasta vuestro campamento; quiero ver a esos mercenarios que atrapasteis con mis propios ojos para poder calibrar cuánto dinero se la juega la reina.

-Por nosotros no hay ningún problema en que vengas.

Herob se pone a la cabeza del grupo dirigiéndonos hacia uno de los caminos que sale de la gran ciudad que tienen los horms. Nosotros, como cuando llegamos, solo tenemos que seguirle.

¿Os está gustando Silver? ¿Os guste que se publique el martes y el domingo? Os leo en comentarios.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.