Simplemente guerrera

Capítulo 3 la convivencia

Querido diario

La convivencia con mi familia digamos que hay discusiones como otras familias , pero hay siempre acusaciones por mi padrastro que creo le encanta crear discusiones.

Ahora tengo 16 años y en muchas ocasiones tengo que aguantar cuando saco mi lado más agresivo.
Siempre acaba diciéndome cosas porque cuando derramo un poco de leche en el microondas o cualquier otra cosa, se queja inmediatamente.

En algunas ocasiones me toca mucho, y cuando le digo con un gesto agresivo que no me toque, él no me escucha. Parece que debo sacar mi lado más agresivo para que entienda que no quiero que me toque, y mi madre está muy ciega.

Mi madre parece estar muy ciega porque no se entera de nada y no me siento protegida. 
Quiero contarle a alguien lo que pasa en mi casa, pero no me atrevo porque van a pensar que estoy mintiendo.

Aún recuerdo cuando le conté a mi profesora utilizando el lenguaje de signos que mi padrastro me toca ahí abajo de mis partes íntimas enseguida lloré como una niña pequeña y le dije que tenía miedo de contárselo a mi madre. Aún así, quiero contarle a mi madre lo que está sucediendo,

Por esa razón, di el número de teléfono de mi hermano. Al menos tengo a alguien en quien confiar y me quiere de verdad, pero es menor de edad.

Ella le avisó a mi hermano. Cuando llegó a verme, se dio cuenta de que estaba llorando y enseguida me abrazó. 
En sus abrazos me siento protegida, lo quiero mucho. Él es mi héroe, mi sostén y la persona que me da mucha fuerza para seguir adelante. Gracias a él logré decir unas palabras cortas; sin embargo, me frustra mucho no poder decir una oración larga.

En ese instante, mi profesora comienza a decir todo por qué no fui capaz de contarle. Aquel día, fuimos a la comisaría donde había un policía que me resultaba muy familiar, pero no me acuerdo muy bien. Sin embargo, él se quedó mirándome como si me conociera

Al darme cuenta de que era el padre de mi amigo , comencé a comunicarme con él utilizando lenguaje de signos

-Cuando tenía alrededor de 13 años, estaba sentada en el borde de mi cama terminando de vestirme, cuando mi padrastro apareció y me ayudó a terminar de vestirme. Yo guardé silencio aceptando su ayuda, pero sentí sus manos que rozaron varias veces por encima de mis bragas. Traté de deshacerme de él, pero él empezó a reírse e incluso me tiró a la cama intentando besarme. Le mordí y traté de defenderme mientras él seguía tocándome. 
Aun así, él sigue tocándome de esa manera. Intenté decírselo a mi madre, pero no me hace caso. Cuando terminé de contarle, él me quedó mirando con una expresión de odio. Sin previo aviso, se levanta y me abraza, diciéndome :

-Te prometo que haré todo lo posible para que tu padrastro pague por sus acciones en la cárcel y que reciba el peor castigo de su vida.

-Eso quiero que pague por todo el daño que me está causando.

Después de hacer la declaración, fuimos a la casa de mi hermano, ya que me quedaré con él. Eso me hace tan feliz. En aquel día, mi vida ha cambiado, pero al principio tuve muchas pesadillas. Incluso todas las noches, mi hermano se duerme conmigo 
El cual le agradezco mucho, ahora sigo teniendo pesadillas, pero sin duda alguna las superaré. Cuando empecé a ir a una buena psicóloga, gracias a ella he entendido que no soy culpable de lo que me ha hecho el novio de mi madre. Seguro que te estarás preguntando cómo es mi relación con mi madre, bueno, es un poco complicada y ya os contaré con calma.

Pero te cuento que mi hermano mayor...
Dylan es una persona que me conoce muy bien y me motiva a luchar por mis derechos, me entiende perfectamente. Cuando estoy en una situación muy incómoda, enseguida intenta intervenir para protegerme. Mi relación con mi hermano, que es el mejor del mundo, me protege mucho cuando hay un chico que está muy cerca de mí. Él adopta un modo de jefe de mafia con una mirada de asesino, lo cual me divierte mucho. Cuando tengo pesadillas, duermo con él. Siempre le digo que es mi héroe, sin embargo, hay otra persona que también es importante para mi vida es mi tío, a quien quiero como a un padre. A pesar de que está un poco lejos, me llama todos los días preguntándome cómo estoy. Por lo tanto, he intentado cambiar de tema varias veces para que no se dé cuenta de la situación que estoy viviendo. Cuando estoy con mi tío, me siento muy protegida, sin olvidar a mi hermano con quien también me encuentro protegida, ya que estoy cerca de él.

Mi tío es un hombre excepcional con un enorme corazón que a veces comete errores, al igual que cualquier ser humano. Se preocupa por mi bienestar y siento que en muchas ocasiones me trata como si fuera su hija en lugar de su sobrina.

En otros momentos, hace todo lo posible por saber cómo me encuentro en mi día a día y estoy muy agradecida por todo lo que hace por mí.

El miedo nos hace más débiles, la ignorancia te lleva al desastre y el orgullo te ciega sin dejar salir la valentía.

 



#244 en Joven Adulto
#3791 en Novela romántica
#1108 en Chick lit

En el texto hay: policas, amor dulzura, familia engaño

Editado: 28.04.2024

Añadir a la biblioteca


Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.