Simplemente Nina

Cápitulo 17

   Por menos ganas que tuviera de estar en aquella dichosa fiesta, tenía que asumir que los estudiantes habían hecho un enorme esfuerzo. El evento estaba increíblemente bien organizado y el lugar rebosaba de gente pasándosela bien. Nico me había sugerido invitar a las amigas con las que habíamos salido a New´s días atrás, y así lo hice. Aún nos quedaban un par de entradas gratis asique las aproveché con ellas. En casa nos habíamos preparado casi a las corridas, contando que habíamos salido del bar a las ocho y tantas de la noche, y aquella fiesta empezaba a la diez sin excepción de entrar más tarde.

-Nina ¿Qué decís? ¿Te gusta? –Tommy me ofreció un trago que no me dejó pagar.

-Está muy lindo todo. Se nota que les encanta organizar estas cosas.

-Sí, de veras está bien hecho.

-Tommy –por más que quisiera, no podía acallar mi curiosidad -¿De verdad estas disfrutando esto con Karem tan cerca?

-Nina, en este momento es muy reciente todo. Creo que todavía no caí en la cuenta, o no logro comprender qué es lo que ella se propone.

-Entiendo, perdón por sacarte el tema cuando estás decidido a pasar una buena noche.

-No te preocupes. ¡Anoche estábamos en medio de un escándalo y hoy de fiesta! Es hasta raro. –río y yo con él. De veras era de locos. Además de que ambas cosas, según mi parecer, eran culpa de Nico. Vaya dios a saber en cuantos dramas me iba a meter el muy condenado.  

-Es cierto. Si hoy a la mañana me hubiesen dicho que saldríamos juntos de nuevo esta misma noche, me hubiera reído de buena gana.

-¡Dejen de parlotear y vengan a bailar! –Nico estaba meneándose como un poseso y nos llamaba a los gritos junto a mis amigas que lo miraban deslumbradas. Obvio él lo disfrutaba a pleno. Al menos con él, tenías la diversión asegurada.

   Decidí en ese momento disfrutar de aquello. Si Tommy estaba buscando pasarla bien y dejar al menos por unas horas el drama atrás, no tenía por qué oponerme a darle esa oportunidad. Yo tampoco podía quedarme con el mal trago, me merecía pasármelo en grande también. Después de todo no había hecho nada malo. Que cada quién pensara lo que se le antojara y punto.

Nos sumamos a bailar y por un rato me despegué de todo lo que fuera que pasaba en mi vida. Como aquella noche en New´s, disfruté de la fiesta y mis amigos a pleno. Trago va, baile viene. Ni siquiera me inmuté cuando Karem se pasó junto a nosotros saludándonos efusivamente como si fuera nuestra amiga. A Tommy lo esquivó. Zorra. Él tampoco pareció darle importancia. Decididamente no había caído.

Cerca de las cuatro de la mañana, y como hacía mucho tiempo no me pasaba, un chico me invitó a bailar. Rogué que Nico no empezara a hacer de las suyas. Pero claro, él no podía dejar nada al azar. Durante todo el rato que bailé con él, Nico hizo caras y me mandó cerca de veinte mensajes a WhatsApp. Está de más decir que pesado como el no encontraría otro.

El chico se llamaba Baltazar, y estudiaba ciencias de la comunicación en la uni enfrente al bar. Jamás lo había visto por allí, o al menos no en mi turno. Era guapo, no voy negarlo. Y fue eso lo que más me llamó la atención. Los chicos guapos nunca se fijaban en chicas como yo. Rubio, alto y de esos que saben que las traen a toda muertas. Cerca del final de la fiesta me pidió mi número y se lo pasé. Después nos despedimos y prometió escribirme. Ni yo me lo creía. De todos modos no iba a hacerme ilusiones. Estaba segura que los tipos como el solo te buscan para una cosa en concreto. Mejor ni decirlo.

-Yo sabía que tenías que venir a la fiesta Nina –me confesó un muy destruido Nico  –al fin picaste algo. Era cuestión de soltarse viste.

Revoleé los ojos.

-¿Dónde está Tommy? –pregunté buscándolo entre el gentío.

-Las mujeres que me perseguían me distrajeron y lo perdí de vista. –a juzgar por su aspecto, parecía que venía de la guerra. Pero yo sabía que era el efecto del alcohol.

-Creo que voy a tener que conducir yo ¿A que sí? –dije enfrentándolo.

Me extendió las llaves con el mayor desparpajo y supe que no podíamos seguir allí dentro. Cuando a Nico le pegaba, mejor largarnos. Busqué a mis amigas y salimos de la fiesta.

 

¡Gracias por leer!

 ©Todos los derechos reservados a Melina Sol Gual

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