Dia 60

Dia 60

Los últimos 5 días se la pasaron hablando de como me desmaye y lo increíble que fue la fiesta yo recuerdo algo … antes de irnos todos nos reunimos alrededor del asador , cocimos los últimos pedazos de carne para comerlos ya eran las 11 de la noche y todos estábamos ebrios y hambrientos … yo estaba sentada tomando refresco y Abram se encontraba a lado mío , entonces esteban se acercó de vuelta ,

 - ¿cómo te encuentras? – me dijo y se sentó a un lado

 – mejor – le dije con una sombra de sonrisa en mis labios 

  – que bueno – sonrió y se levantó , me sentia fatal , la cabeza me dolia aun y el apareciendo hablandome , mi corazon sangraba , hace una hora yo estaba en el cuarto deese niño precioso pensando en el , amandolo y llorando, ahora la habitacion estaba ocupado por una amiga y algun idiota que solo queria sexo . la siguiente media hora preparamos la carne  , esteban interactuó un poco conmigo cuando intente avivar el fuego de las brazas para que la carne se cociera bien 

- no se hace asi ,lo deja que lo haga yo– dio esteban con sonrisa arrogante ,quitando de mis manos el pedacito de cartón con el que soplaba las brasas ,sonreí                                                       

– encárgate y por favor quiero más carne – respondí devolviendo mi sonrisa arrogante , de reojopude ver que abram estaba observandonos , el bebia mas cerveza ,trataba de hacer parecer que no le importba que yo estuviera tan cerca de esteban; paso un poco más de tiempo cantamos canciones alegres y sin nada de que preocuparnos más                       

– ya hay que llevarlas – dijo Fran, que nos llevaría en su van verde a casa, Miriam ,Andrea ,quienes vienen de donde yo y Abram que lo dejariamos en elcamino aa su casa. asentí, camine hacia la entrada, pero me detuve , mis sentimientos , no me los podia llevar asi , no a llorar a casa , no hoy entonces me di la vuelta y fui hasta donde esteban                                                                 

– oye, siento mucho como terminamos – le dije, mi corazón estaba tranquilo, el solo sonrió

– tu ya no te preocupes más por eso – dijo tocándose la nuca, pero parecía estar bien

– gracias – fue lo último que pude decirle, me aleje y Sali con los demás para irme a casa por fin, llena de cicatrices y culpas irremediables.