~10~

Y así como inicio el beso este se acabo, cuando abró los ojos me siento desorientada ¿qué rayos he hecho? Landon no me agrada, él está atento a mis gestos, su mirada recorre mi rostro.

—Rubí —murmura suavemente que me hace dudar que me ha llamado y la duda queda por que suena su móvil, lo saca de su bolsillo,  observa la pantalla mientras frunce el ceño.

—¿Pasa algo? —Landon niega, me observa nuevamente pero sé que ya no está aquí en la habitación, está distraído.

—Debo irme al aeropuerto —suspira —cuándo regresé de mi viaje hablaremos 
—abre la puerta y sale de la casa de mi abuela, algo había cambiado después que sonó su móvil.

Me abracé a mi misma por un momento, le daría tiempo a que se marchará para salir, me sentía nerviosa, el beso de Landon había sido de mi agrado, levanté mi mano y con la punta de mis dedos toque mis labios... siempre había deseado un beso de él y esta noche lo había recibido, nada comparado a lo que había imaginado... había superado mis expectativas. Al poco rato decidí marcharme a la casa, al salir al jardín, la música aún se escuchaba, no deseaba regresar a la fiesta. Quería estar sola y procesar que ya era una mujer casada y con el hombre que desde mi niñez deseé casarme.

Subí por atrás, al llegar a mi habitación me despoje del vestido y en ropa interior me senté en el alféizar de la ventana, desde ahí pude apreciar el cielo estrellado y la hermosa luna, suspiré mientras abrazaba mis piernas. A pocas horas de haberme casado estaba sola, pegue mi frente en el vidrio de la ventana, jamás me había sentido tan perdida no sabia que me deparaba el futuro como esposa de Landon.

******

—¿Qué se supone es esto? —Josh está de brazos cruzados —dos días sin saber de ti

—He estado ocupada —me dejó caer en el sillón —te veo bien Josh —su rostro se contrae ante mi comentario.

—No lo estoy —responde y lo veo pasar su mano por su cabello alborotado —no me he sentido bien estos días y de no ser por mamá, no se que hubiera pasado conmigo —él me mira con molestia

—Debemos hablar Josh de nosotros —estaba decidida, iba a decirle que estaba casada

Él me miró de una manera extraña y luego se sentó, apoyo sus codos en sus rodillas y bajó su cabeza

—Estoy muriendo Rubí —siento que me he quedado sin aire, esto debía ser una confusión

—¿Qué? —Josh levanta la mirada, siento escalofríos ya que veo algo en ella que no puedo entender pero fue algo fugaz.

—Hace un par de semanas me hice análisis de rutina y hace dos días me dieron los resultados, tengo... —hace una pausa mientras siento que mi mundo se viene abajo ¿cómo es posible que alguien tan joven este muriendo? —leucemia

Llevó mis manos a mi boca, estoy impactada

—Mi amor por ti es lo que me mantiene a flote Rubí, sólo pensarte me ha ayudado sobrellevar está dura noticia. Gracias por estar conmigo, sé que contigo en mi vida podré vencer sea lo que sea mi amor.

Bajó la cabeza, esto era una pesadilla ¿cómo decirle a alguien que está muriendo que lo nuestro se terminó?

—¿Qué ibas a decirme Rubí? — levantó la mirada, él había dibujado una mueca de dolor, se levanta y se acerca a mi, se pone de rodillas y sonríe o ese parece ya que él desvía el rostro. Toma mi mano entre las suyas —dime mi amada novia.

La palabra novia me sonó a burla, tenía dos días de ser una mujer casada.

Sentía la opresión en mi pecho, no sabia que hacer. Josh en medio de su enfermedad me estaba poniendo como su tabla de salvavidas.

—Debes luchar por ti Josh, no por mi. Saldrás de esto... —sentí su boca en el dorso de mi mano

—Sin ti no podré hacerlo, no miento cuándo te digo que moriría si me dejas. Aquí —pone mi mano en su pecho, en el lado donde descansa su corazón —hay mucho amor para ti, te amo Rubí.

Cerré los ojos, yo apreciaba a Josh, era mi amigo desde siempre. No podía romperlo ahora que me necesitaba con la leucemia.

Aparte un mechón de mi cabello del rostro y con tristeza desvié la mirada para responderle.

—Claro que estaré contigo Josh —él sonrió y acercó su rostro al mio... él no sabia que yo era una mujer casada, se sentía con derecho de besarme por ser su novia pero yo si sabía que era la esposa de otro hombre a quién juré amar y respetar ante todos los presentes, desvié el rostro para recibir su beso en mi mejilla.

Josh se pone de pie y avanza hacia el centro de la habitación

—Gracias mi amor, deberías considerar el mudarte conmigo. Es mi anhelo dormir contigo entre mis brazos... y antes de morir deseo realizarlo.

—Papá no esta bien de salud, no puedo dejarlo Josh para mudarme contigo

—¡Nunca soy prioridad para ti! —él se ha alterado, me pongo de pie, su enfermedad me estaba impidiendo decirle la verdad, que no podía mudarme con él por que era la esposa de Landon, no sabia por cuanto tiempo

—Lo siento Josh pero es mi padre y no puedo dejarlo sólo

—¿Y tú madre? —negué

—Puede haber un ejército de enfermeras en casa pero él es mi padre y quiero aprovechar el tiempo con él

—¿Y yo? —pasé una mano por mi rostro, olvidé por un momento que él era sensible.

—Estaré pendiente de ti Josh —busco mi bolso —debo irme, llevaré a papá al médico.

—Quizás tu padre viva y yo muera Rubí, aunque supongo eso no te importa.

—Me importas pero no puedo estar contigo las veinticuatro horas del día, también mi padre está enfermo y me necesita

—Te necesita como yo —él sonríe —ve con tu padre Rubí

Salí rápidamente de la casa, antes que Josh tuviera una de sus crisis.

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—¡Es inconcebible! —la voz de mamá llegó hasta las escaleras, apresuró el paso para saber que estaba pasando.

—Debe existir alguna explicación —respondió papá.

Al llegar al comedor mamá me mira rápidamente y la veo estrujar el periódico como ocultándolo.

—¿Mamá? —ella intercambia una mirada con papá