Una semana después, en un elegante salón, Jessica y Laura brindaban por su “victoria próxima”, sin saber que estaban a punto de ser sorprendidas.
Harry y Binna permanecían en la casa, siguiendo cada detalle desde la sala de monitoreo que Enrique había dispuesto para ellos. Las cámaras y dispositivos instalados en la última ubicación descubierta enviaban imágenes en vivo, mientras Herrera y una experta en operaciones encubiertas se movían con cautela entre la maleza.
- "No entiendo cómo alguien puede mantener un lugar así en secreto", murmuró Binna, con el ceño fruncido. "Es como un refugio para no sé qué".
- "Un refugio con intenciones oscuras, respondió Harry, observando la pantalla. "Y eso no es todo. La Fundación Seguridad Familiar tiene conexiones en altos niveles, no sólo es un negocio sucio: parece que están operando para eliminar a personas incómodas".
En el canal de comunicación, la voz seca y profesional de Herrera sonó.
- "Avanzamos hacia el edificio principal. Por ahora, ningún movimiento sospechoso, pero el perímetro está cubierto. Esperen instrucciones", dijo Herrera.
Enrique, al lado de ellos, apretó los puños.
- "Si intentan algo contra mi familia, les prometo que no quedará piedra sin mover", dijo Enrique.
Sia, serena, tocó el brazo de Binna, quien tiene una pierna moviendo nerviosa.
- "No estás sola. Somos un equipo. Vamos a detener esto juntos", dijo Sia dándome seguridad.
A cientos de metros, entre sombras y juncos, los dos expertos se acercaban al secreto que Jessica y sus cómplices querían mantener oculto.
En la casa, Harry y Binna permanecían en silencio, escuchando las comunicaciones con atención. La noche comenzaba a caer y la preocupación se mezclaba con la cercanía que sentían el uno por el otro.
Binna apoyó la cabeza en el hombro de Harry.
- "Esto no es solo una batalla externa, es también la nuestra", susurró Binna.
Harry la miró y sonrió con suavidad.
-:"Tenemos que salir de esta juntos. No dejar que el pasado decida por nosotros", afirmó Harry.
- "Prométeme que no importa lo que pase, seremos honestos", dijo ella, tomando su mano.
- "Lo prometo", respondió él. "Escribamos nuestro futuro sin mentiras ni sombras", añadió, sin saber que el futuro es tan impredecible.
Desde el comunicador, la voz de Herrera cortó la intimidad.
- "Detectamos movimiento en el interior. Procedemos con cautela", dijo Herrera.
Harry apretó la mano de Binna, ambos conscientes de que esa noche sería un punto de inflexión, no solo para la familia, sino para ellos.
La lluvia comenzó a golpear las ventanas con fuerza mientras Harry y Binna esperaban en el salón principal, la luz tenue del hogar creando sombras danzantes a su alrededor.
Sus corazones se mantuvieron expectantes durante la operación, sus padres tuvieron que salir de ese ambiente, tal vez los nervios, lo sucedido en todas esas semanas, habían afectado a Sia, pese a su seguridad, habían sido demasiadas cosas juntas.
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Herrera regresó con informes claros, pero no todo estaba resuelto. Jessica, la ex asistente de Enrique enviada al extranjero, había movido sus piezas con astucia, orquestando desde las sombras todo el regreso de Laura y la manipulación de Augusto; pero tenía videos, grabaciones y testimonios de las personas que interceptaron ese día, entre ellas, Carolina del Valle, la testaferra de Jessica, quien desviaba fondos de la compañía de automóviles. La organización criminal detrás de ellas, las abandonó a su suerte, con la advertencia de que si hablaban, estaban muertas.
Enrique no solo había usado sus contactos para congelar cuentas y cortar accesos financieros; también había movilizado una red de abogados y especialistas para frenar legalmente a Laura. Pero la verdadera amenaza seguía siendo Jessica, cuya presencia se sentía en cada movimiento inesperado.
Augusto, por su parte, parecía caminar en la cuerda floja. Aunque había dado información valiosa para anticipar ataques, también estaba demasiado involucrado emocionalmente, y a veces sus acciones sembraban dudas.
Una noche, en la casa, Harry y Binna hablaron a solas en la terraza, con el ruido lejano de la ciudad como fondo.
- "No es un final, aunque le hayamos arruinado los planes iniciales", dijo Harry. "Jessica todavía está ahí, y Augusto... no sé si es amigo o enemigo".
Binna apretó sus manos.
- "Pero ahora tenemos tiempo. Tiempo para entender todo, para decidir qué queremos sin que nos manipulen", expresó Binna.
Harry la miró, con la mezcla de cansancio y esperanza en los ojos. La guerra no había terminado, pero la batalla más importante estaba por comenzar.
Después de meses de investigaciones, Jessica fue finalmente arrestada por fraude, manipulación y conspiración. Esta vez, la justicia no dejó espacio para sus artimañas: prisión preventiva sin posibilidad de fianza. Laura también fue detenida como cómplice.
Augusto, aunque colaboró con la investigación, no logró esquivar cargos menores por su complicidad. La ley seguiría su curso para todos, según su participación.
En la casa, la atmósfera era de alivio y unión. Harry y Binna se miraron con la tranquilidad de saber que nada ni nadie podría separar lo que ya estaban decididos a construir juntos.
- "Por fin la verdad salió a la luz", dijo Binna con una sonrisa serena.
- "Y nosotros seguimos adelante, juntos", respondió Harry. "Más fuertes que nunca".
El veneno había sido eliminado, pero su amor, intacto y sólido, era la verdadera victoria.
Mientras que, Enrique está tratando de calmar a Sia últimamente se le han presentado constantes náuseas y malestares, él le insiste que deben ir al médico pero ella señala que todo debe ser por el estrés.
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Editado: 30.06.2025