Tenerla dormida junto a mi es un deleite, la sensación más placentera de toda mi vida entera la, anhelo tanto que mi pasión desborda por todo mi ser. Tenerla así me recuerda aquellos días, cuando me revele a ella por primera vez, cuando le mostré mi verdadera naturaleza y le había explicado muchas cosas sobre nosotros en esos días, por primera vez después de muchos siglos nuestros labios habían colisionado en un beso tan suave y divino. Aún recuerdo la suavidad de sus labios, era como probar la más dulce miel del paraíso sus labios encajaban a la perfección con los míos sentía que en realidad fueron hechos para mí, pero aquel primer beso también fue el último pues ella murió al instante en que mis labios tocaron los suyos.
Fue un beso de tan solo un segundo, pero lo sentí como si fuera una eternidad. De nuevo mi castigo se hacía presente era absurdo preguntar ¿Por qué? Pues yo lo sabía porque había ocurrido todo esto, no tenía el derecho de refutar aquella decisión tomada por mi padre. Solo quería encontrar la corona y vivir mi vida junto ella, pero eso nunca ocurrió tantos siglos y todo seguía igual ella siempre de iba de mi lado, esta vez todo será diferente la corona esta tan cerca de mí que una vez que la recupere me iré y la pondré a salvo de todos los problemas que le he causado.
Me levanto con cuidado de su lado, tratando de que no se despierte me pongo al lado de su cama miro como su alma brilla aun estando dormida algo que me hace sentir tranquilidad, noto como tiembla un poco por el frio de la noche. En eso libero mis alas y las muevo en un suave aleteo produciendo una calidad brisa para abrigar su cuerpo –Isabela. No te imaginas cuanto te he extrañado. Te juro que esta vez te salvare –lo digo con mucha seguridad esta vez, lo conseguiré, lograre que ella viva la vida que siempre debió tener.
Salgo de su cuarto dirigiéndome hasta mi auto que desbloqueo, justo al momento de abrir la puerta noto a unos sujetos ocultos en las esquinas de las calles por su aspecto y sus acciones deben tener algo oculto. Ingreso al auto y arranco del lugar, pero me detengo en una parte alejada deteniéndome y salgo de nuevo para el edificio de Isabela esos tipos no me dieron buena espina. Situándome en una parte más alejada noto que aquellos sujetos aún siguen ahí a esas horas de la mañana, aprovecho la oscuridad que hay liberando de nuevo mis alas colocándome sobre ellos observando sus reacciones, no hacen nada en especial solo se limitan a observar en dirección al edificio de Isabela. Me quedo ahí un momento más que un auto negro aparece, aquellos sujetos que vigilaban se acerca a él y comienzan a platicar sobre algo que no puedo escuchar por lo que aterrizo cerca la terraza de una de las casas y finalmente logo escuchar algo.
–Todo está bien señor –habla uno de los sujetos.
–Asegúrense, de tenerla vigilada he esperado este momento durante mucho tiempo –es una voz gruesa la que proviene de aquel auto.
–Lo sabemos señor –habla otro tipo –muchos de nosotros hemos esperado por esta oportunidad. No lo decepcionaremos.
–Eso espero –continua aquella voz proveniente del auto –por cierto, que saben de aquel sujeto que ataco al grupo de Maicol.
–Hace unos instantes salió del edificio y se fue. Debimos enviar alguien para seguirlo –habla uno de los sujetos.
–Descuiden, algo me dicen que volveremos a encontrarnos con él. Por el momento vigilen a la chica es nuestra máxima prioridad. Entendido.
–Si –contestan todos.
El auto negro se marcha, dejando aquellos sujetos ahí volviendo a sus posiciones algo en todo esto me da muy mala espina, toda esta situación se vuelve más complicada algo me dice que no solo tendré problemas con adquirir la corona. Sino que también tendré que lidiar, con este grupo desconocido ¿Quiénes serán? Me pongo a pensar un poco y recuerdo algo interesante hace unas horas cuando esos tipos atacaron a Isabela tenían unas dagas las hojas eran de plata, además de tener engarzada un rubí en la empuñadura. Ahora lo recuerdo durante la inquisición había un grupo clandestino, que solía cazar en las sombras a personas que ellos consideran que tenían lazos con lados oscuros, su modus operantis era sencillo ingresaban a las casas de sus objetivos y los asesinaban. No obstante, había escuchado que su organización había desaparecido, después de que cometieron algo descabellado tan grave que hicieron que fueran ellos cazados y no cazadores, pues habían encerrado a un grupo de quince niños en una cabaña y la incendiaron provocando la muerte de esos niños.
Los padres de esos niños, y muchos de los habitantes del pueblo donde era los niños iniciaron una cacería en busca de los responsables de aquel macabro delito, cuando los encontraron ellos se defendieron diciendo que aquellos niños eran malditos, que habían sido concebidos por medio de la brujería. Algo que indigno más a los padres de los niños, por lo que fueron colgados de las ramas de un gran árbol y quemados mientras morían asfixiados.
Eso es lo que había escuchado hace mucho tiempo, pero nunca pensé que habían quedado sobrevivientes de aquel grupo de psicópatas que creían hacer el bien, utilizando el nombre Dios no obstante no eran más que unos simples aficionados. Pero esto me preocupa mucho si este grupo esta tras de Isabela, no debe ser nada bueno así que debía actuar lo más rápido posible tal parece que no será suficiente con recuperar la corona, ahora también debo asegurar la vida de Isabela para que pueda vivir tranquilamente. Aquellos sujetos vuelven a sus posiciones, me dirijo uno de ellos en la esquina de mi derecha aterrizo silenciosamente sin provocar el ruido suficiente para delatarme. En eso golpeo a uno de ellos en la nuca, dejándolo inconsciente su compañero rápido intenta atacarme, pero bloqueo su ataque hay una habilidad que puedo usar para hacer que me diga la verdad sin tener que recurrir a métodos clásicos que utilizan hoy en día.
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Editado: 07.06.2022