Capítulo 23

Fingir es lo mejor que se me da, de hecho creo que hasta me creo mis propias actuaciones. 
Mi padre me ha comprado los nuevos aparatos, sin saber que después los venderé para conseguir dinero además de pedirle a él.
Debo de ser cautelosa, y aunque no me guste comportarme de este modo, me he visto obligada a hacerlo.
Mientras esperamos a Annie que salga de su trabajo yo chateo con Hayan hablando sobre el vídeo que le he mandado de la conversación entre Brandon y mi padre.
Hayan me anima para que no me derrumbe, y deje de una vez por todas de pensar en Brandon, quedándome con lo bonito que me ha hecho sentir.
Anne al fin llega como siempre exhausta por su trabajo. 
Besa a mi padre hablando con él como si yo fuera transparente y por lo que observo mi padre le sigue la corriente.
Todo cambia cuando aparece Jordan jugando con las llaves de su auto. 
Toma asiento a mi lado dándome un codazo me saluda.

- Hola Marlene, ¿Cómo estás? - Habla pegado a mi oreja a lo que sintiendo asco me aparto unos centímetros de él.

- No es necesario que grites tanto, tengo aparatos nuevos y estos son mucho mejores, escucho perfectamente. - Respondo mirando a mi padre como trata de mirar su teléfono evadiendo la mirada negra que le está lanzando Anne en estos momentos.
Sonrío para mis adentros, Anne no sabía nada de hecho según me cuenta Berenice, ella no quiere que mi padre gaste dinero en mí, y muchas cosas las hace a escondidas de ella.

- Vaya Marlene, tienes que tener cuidado con los aparatos, son muy costosos y la próxima vez deberás pagarlos tú. - Habla con sarcasmo Annie.

- Es cierto, son costosos pero creo que valen menos que un auto, un apartamento, ropa de marca... A fin de cuentas esto es necesario pero hay caprichos que debe de pagar mi padre que no son necesarios. - Le lanzo una mirada negra mientras ella desvía su mirada a mi padre el cual permanece callado.

Cada vez me deja más claro Annie quien lleva los pantalones en el matrimonio. Ella manda y el obedece. 
Después de intercambiar algunas frases con doble sentido con Annie y Jordan, me despido de ellos para ir al apartamento, cada vez quiero pasar menos tiempo con ellos, pero antes de marcharme le suelto a mi padre de querer reunirme con el en su oficina. 
Tanto como Jordan como Annie me miran incrédulos, sí, me acabo de anotar un tanto a mí favor.
Si ellos no quieren que me acerque a mi padre, más cerca estaré de él.

Nos encontramos casi terminado de cenar, Hayan nos cuenta que ha encontrado un empleo de repartidor y Danna nos comenta de querer poder encontrar un empleo al menos como niñera. Mientras mis amigos hablan yo escucho sin prestarles demasiado atención hasta que Danna llama mi atención devolviendome a la realidad donde al preguntarme en qué pienso le respondo sobre la conversación que he escuchado en la oficina de mi padre, con cada detalle de la conversación ellos se quedan callados escuchándome con atención.
Nada más termino de contarles lo sucedido, miro los rostros de mis amigos. Danna mira a Hayan y él a mí haciendo que empiece a preocuparme esperando que me den al menos una opinión.

- ¡Qué! ¿No vais a decirme nada? Tú Hayan que tanto hablas con Brandon.

- Escucha Marlene, si quieres seguir mi consejo es mejor que sigas actuando como tú padre quiere que seas. Una inútil discapacitada porque así es como deduzco que te ve, te trata como su hija pero al mismo tiempo parece que le agotas o incluso se llega ha avergonzar de tí. Al menos esa es la impresión que me da.
Sobre Brandon por supuesto que hablo con él, pero entiende mi posición, no quiero perder su amistad. Sólo quiero que sepas que él se equivocó en algunos aspectos, pero nunca te engañó y su amor hacia tí fue verdadero. 
Sí, cayó en la ambición del dinero, sí. Lo hizo y no estuvo bien lo que hizo y mucho menos estoy de acuerdo con ciertas cosas que hace. Tú ahora eres mi amiga y compañera de piso, por lo que te aconsejo que hagas lo que tengas que hacer para defenderte de los ataques de tu padre y su familia sabiendo que no estás sola. Yo estaré aquí para cuidaros a las dos. - Me sonrojo con las palabras alentadoras de mi amigo y como estoy tan sensible acabo dándole un afectuoso abrazo donde Danna se une a nosotros y acabamos juntando nuestros dedos meñiques haciendo la promesa que pase lo que pase no romper nunca el lazo de amistad el cual nos mantiene unidos.

- Mis hermosas chicas os propongo a ir a un pub animaros - No viene mal salir a divertirnos.

- Hayan me animo además necesito un buen trago -Mi amigo se queda mirando a Danna esperando que hable

-No me apetece mucho salir prefiero quedarme en casa -Pero Hayan no se quedo tranquilo sabiendo que va a estar sola sin embargo Danna se da cuenta de la preocupación de nuestro amigo.

-Hayan quita esa cara de inquietud y anda ve a cambiarte yo estaré bien -Mi amigo se marcha a su habitación mientras yo voy a mi habitación.

Rebusco en mi clóset mirando entre mi nueva ropa para comenzar a arreglarme, me siento entusiasmada con la idea de poder divertirme un poco. 
Entre mi nueva ropa, me decanto por un conjunto de falta negra, una camisa roja de tela de seda que me gusta mucho como me queda y nada más termino de vestirme, pasa Danna para ayudarme con mi revoltoso pelo dándome un ligero maquillaje y como toque final utilizo un labial rojo haciendo que resalte más en mi piel morena. 
Me siento mal porque Danna no pueda acompañarme, ella sonríe animándome para pasarlo bien y de paso meterle prisa a Hayan. 
No me explico porqué tarda tanto en arreglarse si la que tardamos somos las mujeres. 
En fin, tendré que esperarlo mientras termina de arreglarse hablando con mi amiga sobre el tema de actualidad. Mi padre y su familia.
Cuando Hayan pasa al salón por cierto se ve muy guapo, veo como Danna observa a Hayan de arriba abajo comiéndoselo con la mirada embobada.