Sin Testigos De Amor

Creaste un monstruo.

Ya era un mes de la muerte de papá, Pamela terminó con Camilo, según ella porque entendió que yo lo amaba, pero ya de que me servía eso si el daño ya estaba hecho, ella se burló de mí y ahora quería hacer como si nada, mi madre ya arregló lo de la herencia nos tocó a 3 partes iguales, pero yo era la única que no podía gozar libremente de mi dinero por ser aún menor de edad, Pamela y ella sí.
He pensado mucho en irme a otro país a estudiar y planear mi venganza, dicen que la venganza es un plato que se saborea frío, ellas dos deben pagar por lo que me hicieron, toda la vida me hicieron sentir miserable y eso no se le hace a una hermana ni a una hija, el haberme despreciado toda la vida nunca les voy a perdonar y mucho menos que mi hermana sabía que mi papá estaba mal, pero prefirió seguir revolcándose con Camilo, él también tendrá su parte, solo tendré que pensar que voy a hacer para eso tendré mucho tiempo, me pondré muy linda que mi hermana será un estropajo a mi lado, me canse de ser la fea.

En la cena todo estaba callado hasta que hable, tenía que decirle a mi madre que era lo que quería.

—Quiero ir a Europa a estudiar mamá. —Se quedó atónita con lo que dije, pero sonrió, llevaba varios días sin hablar que eso fue un alivio para ella, pero yo simplemente no le presté atención.

—Hija, volviste a hablar. —Mi hermana se asustó, porque tenía miedo que le diga a mamá lo que vi de ella y Camilo, pero no tenía la más mínima intención de avisarle, mi madre se va a decepcionar de mi hermana la perfecta a su tiempo.

—Karina hermanita, que bueno que hablaste. —Dijo fingiendo emoción, pero decidí ignorarla, no sería nunca más la tonta que siempre he sido, esa Karina murió junto a mi papá, el único que en realidad me quiso.

—Mamá qué dices, quiero irme a estudiar, quiero hacerme profesional, quiero ser inteligente, así como mi hermana. —Dije sonriendo de lado, tenía que ser paciente de nada me va a servir hundirla ahora, ella tiene que sufrir.

—Si mi niña, lo que tú quieras.

—¿Mi niña? ¿Acaso te pasa algo mamá? —No saben cuánto deseaba escucharla decirme así, pero nunca lo hizo, ahora que mi papá no estaba se hacía la buena madre, eso no le queda pero que hipócrita.

—Hija sé que hemos sido un poco diferentes contigo, pero sabes que eres mi niña, te quiero.

—No vengas con tus mentiras hipócritas, lo único que quiero es alejarme de todo, me voy a ir a Europa con mi parte de la herencia que me dejó mi papá, y realizaré mi vida allá lejos de ustedes, no les estorbaré más —Me levanté y fui directo a mi cuarto, lloré porque era la primera vez que me alejaba de mi familia, era la primera vez lejos de todos, pero esto lo haré para vengarme de mi hermana, ella acaba de crear a un monstruo, todo lo que me ha hecho me las pagara.

La noche pasó rápido casi ni dormí, busqué escuelas para estudiar, la verdad nunca fui la mejor estudiante, pero eso se acabará, estudiaré mucho y aparte de eso me pondré muy linda, más que mi hermana, destruiré a Pamela, ese será mi objetivo desde hoy.

Al siguiente día me levanté temprano, escuche que mamá estaba feliz, se me hizo extraño, ya que no estábamos como para estar felices, mi padre acababa de morir y ella festejando, que demonios le pasaba.

—Me podrían decir qué demonios pasa aquí. —Dije llamando la atención de todos, no me había dado cuenta de que estaba Camilo y sus padres, Pamela estaba a su lado, estaban agarrados de las manos, mi corazón se rompió en mil pedazos, pero disimulé, no quería demostrar debilidad.

—Hija Pamela y Camilo son novios, se acaban de comprometer. —Que les pasaba mi padre no llevaba ni una semana de muerto y ella ya estaba planeando una boda, que estúpida por eso odio a mi madre y a mi hermana, además se suponía que habían terminado.

—De verdad que te pasas mamá, mi padre acaba de morir y tú planeando la boda de esta estúpida, la verdad eres increíble mamá.

—Karina, no exageres, no se van a casar ya, ahora, toca esperar unos años, ellos tienen que conocerse.

—Ya se conocen lo suficiente mamá, no necesitan conocerse más. —Al decir eso Pamela agacho la cabeza, sabía perfectamente a qué me refería, ellos ya habían consumado su relación y la señora Martha, creyéndola santa, pero no me interesa, de igual manera me iré para preparar mi venganza, que hagan lo que le dé la gana.

—¿Qué quieres decir Karina? —Estaban pálidos, una sola palabra mía y les arruinaba todo.

—Se conocen desde niños mamá, a eso me refería, pero sabes que has lo que te dé la gana, yo no seré parte de tu circo mamá, no seré la que destruya los sueños que tienes para mi hermana, mándame al extranjero eso es lo único que quiero, lo que hagas con la estúpida de mi hermana me vale.

—Hija, no quiero que te vayas, ahora que tu padre murió debemos estar juntas.

—¿Para qué?, no te necesito cuando te necesite no me apoyabas ni me escuchabas ahora es muy tarde, solo no quiero pelear, quiero irme lo más pronto posible, si por mi fuera hoy mismo me fuera.

Regrese a mi habitación y lloré me dolía todo, me dolía que Camilo se case con mi hermana, yo lo amo, pero eso no se quedara así, me las va a pagar, pero por ahora soy pequeña y no puedo hacer nada, estaba pensando cuando llegó Pamela, no sé cómo puede entrar así por así.




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