Sin Testigos De Amor

Donde todo empezó.

Al siguiente día me desperté confundida, pensé que Lucas me besaría o por lo menos me abrazaría, pero no se levantó se vistió fue al baño mientras yo contenía mis lágrimas, era lo único que podía hacer, pues no tenía derecho a opinar, él fue claro conmigo, me prepararía para mi venganza nada más.
–Karina, mañana nos vamos a tu pueblo, alistarás toda tu ropa y tus cosas, debes llegar como toda una diosa.

–¿Tan pronto?, debo despedirme de Lili, no podrías esperar unos días.

–No, pasado mañana llega tu hermana con su prometido, debemos llegar antes para recibirlo, lleva tu ropa más sexy, el vestido rojo ese que tiene el escote en la espalda, ese se te verá perfecto.

–¿Qué vestido?

–Karina no puede ser que yo me acuerde de toda tu ropa y tú no, ese es tu defecto, no tienes entusiasmo por la moda, eres linda y perfecta gracias a mí.

–Si ya me acordé, lo llevaré.

–Debes estar lista para ese día, esa noche tú vas a hacer el centro de atención, todos te verán a ti, Pamela será por primera vez opacada por tu belleza.

–Eso espero, ella me hizo mucho daño cuando éramos niñas, así que ahora es mi turno.

Lucas se fue, por mi parte empecé a empacar toda esa ropa provocativa que Lucas me compro, la verdad siempre he querido usar pantalones y camisetas más sencillas, no sé ese es mi estilo, pero para impresionar a todos y ser la mujer glamurosa me toca usar zapatos bonitos y ropa seductora, solo espero que todo salga como lo planeamos, y que Lucas tenga razón, además él ha sido el único que ha estado conmigo por 3 largos años, años en los que mi madre y Pamela no me llamaron ni escribieron.

Por la tarde decidí ir a visitar a Lili, era mi única amiga y sería mala si no me despedía de ella.

–Pero pensé que estudiaremos en la universidad juntas.

–No va a poder ser, Lucas me dijo que sería el momento preciso para empezar mi venganza, ya que mi hermana con su prometido llegarán en 2 días, mi mama estará con la casa alborotada por su regreso.

–Karina no está bien que le hagas caso a Lucas en todo.

–Lili no empieces, él ha sido mi único apoyo desde que llegué aquí.

–Ósea que yo no cuento.

–Lili, claro que sí, pero tú nunca has estado de acuerdo con mi venganza, esa es la diferencia.

–Porque yo te quiero y si se me hace raro que tu familia nunca ha venido ni ha llamado, pero todo tiene explicación, deberías viajar sola para que reconsideres tus planes.

–Lili no, Lucas no me deja nunca sola, es la manera de demostrar que siempre me ha querido y que le importo, me va a ayudar con mi venganza, eso es mucho.

–Mucho, Karina no te voy a decir nada más, solo cuídate mucho y por favor, si necesitas algo llámame, siempre contarás conmigo amiga.

–Lo sé mi tonta favorita.

Nos abrazamos, ella fue la única que me conocía de verdad, ella sabe pocas cosas que Lucas no, sabe que muy en el fondo adoro a mi hermana, pero ella merece una lección, merece que alguien le baje los humos.

Regresé al departamento y Lucas ya estaba ahí, me miraba con preocupación.

–Karina ¿Dónde estabas?, me preocupo por ti.

–Fui a ver a Lili, te dije que tenía que despedirme de ella.

–Si me dijiste, pero no pensé que estarías con ella ahora, descansa y mañana partimos, ya compré los boletos de avión.

–Gracias por siempre ayudarme.

–De nada princesa, tú sabes que yo haría cualquier cosa por ti, eres mi pequeña niña.

–Bueno ojalá mi mamá me reciba bien mañana.

–Amor, de eso no te preocupes esa también es tu casa y tú llegas y punto, la pregunta es si me querrá a mí ahí.

–Por supuesto, tú vienes conmigo.

–¿Qué le vas a decir sobre mí?.

–No sé, que eres mi amigo.

–Dile que somos novios y que dormiremos juntos.

–¿Dormir juntos?

–Si, pero eso no importa, tú de igual te vas a acostar con Paul.

–Para eso le mentiremos que terminamos, ya sabes eso déjame.

–Está bien eso haremos.

Me fui a dormir, una parte de mí quería regresar, pero otra parte no, aquí tenía mi vida y aunque me duele que mi madre nunca me haya querido ese es mi destino, pero bueno eso no está en discusión, mañana viajaré y que se prepare Pamela, será el comienzo de su fin.

Al siguiente día era el momento ya en el avión mi corazón estaba latiendo fuerte, después de 3 años volvería a ver a mi familia, Lucas estaba a mi lado y tomaba mi mano fuerte, me ayudaba a relajarme.

El vuelo fue muy largo, y estaba cansada llegamos a un hotel que hay en el pueblo la hacienda estaba a 1 hora y ya era demasiado tarde, Lucas me dijo que mejor por la mañana lleguemos, justo antes de la llegada de Pamela. Así lo hicimos estábamos en el hotel y decidí ir a dar un paseo Lucas me dijo que era una mala idea, pero no le hice caso, tenía mucho tiempo que no veía este lugar, salí y fui al parque, vi la tienda de Camilo, ya que recuerdo que no estaba y tiene el mismo nombre que él, es un vanidoso.




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