El peor día de mi vida, perdí lo que más amaba.

Fuimos a cambiamos pero no quería estar segura de dejar a Dante, era muy pequeño e indefenso pero Gustavo insistió tanto que termine por aceptar, ya por salir le dije a todos los empleados que lo cuiden bien, salimos como un familia a la laguna, estaba ahi la pasamos de maravilla, Gustavo se divertía como nadie y mi hermana igual, vi que ella ha cambiado mucho, creo que la muerte de mamá la hizo madurar, nunca me imagine que ella levantaría está haciendo sola de la manera que lo ha hecho aunque se que su novio tiene algo que ver en esto, se nota que la apoya y la quiere.

—Viviría aquí toda la vida. —Dijo Gustavo sacándome de mis pensamientos.

—Si se nota, veo que te encanta el lugar.

—Si, desde niño he querido vivir en el campo, pero nuestros padres nunca compraron una propiedad así, mi hermana Laura detesta estos lugares.

—Es hermoso vivir aquí, pero yo no tengo lugar aquí.

—Claro que lo tienes, tu hermana al parecer no te odia, solo está herida al igual que tu por las mentiras y los engaños, deberían sanar su corazón y llevarse bien. —En algo tenía razón, mi hermana se notaba diferente, no se comportaba como la caprichosa, que era antes.

—No se tal vez ella no me quiera ver cerca, lo que le hice no tiene perdón. —Ciertamente no tenía perdón, me deje llevar por lo que me pasaba en la niñez y me olvidé que podíamos ser buenas hermanas.

—Es cierto, no tiene perdón pero cabe decir que Paul tampoco era bueno, porque sino, no hubiera traicionado a su prometida, no crees, las dos han estado peleadas por alguien que no vale la pena, así que piensa en reconciliarse definitivamente con ella. —Lo mire y el algo tenía razón, Paul tampoco era buena persona, él también jugó con nosotras.

—¿Qué tanto hablan?. —preguntó Pamela acercándose a nosotros, tuvimos que cambiar el tema enseguida.

—De nada importante. —Dije sonriendo, ella no creyó pero tampoco insistió, fue ahí cuando decidimos regresar, se veía que iba a llover, nos fuimos así que nos apuramos. Cuando llegamos vi que todos los empleados de la casa estaban preocupados incluso unas chicas lloraban.

—Me puedes decir que pasa aquí. —dijo mi hermana con voz imponente, Jose fue el único que se atrevió a hablar. 

—Señora Pamela, le tenemos una mala noticia. —Mi hermana torció los ojos porque era obvio que algo malo pasaba, como siempre digo nunca cambia.

—Eso ya lo sé, sino no estuvieran llorando, lo que quiero saber es que paso.

—Alguien entró a la casa y golpeó a Josefina, la chica que estaba con su sobrino y se lo llevaron. —Mi corazón se rompió al escuchar eso.

—¿Qué?. —Dije casi gritando mi bebe.

—No sabemos cómo entró cuando nos dimos cuenta Josefina estaba inconsciente, buscamos pero no vimos a nadie.

—Esto es una broma, tengo mucha gente trabajando aquí y pierden a mi sobrino, estúpidos llamen a la policía, llamen a todos, hoy no se duermen hasta encontrar a mi sobrino.

Pamela llamó a todo y empezaron a moverse, yo lloraba sin consuelo, mi bebe el no tiene la culpa de nada, Gustavo me abrazaba todo era mi culpa yo debo ser la que deba sufrir no mi bebe.

—Todo estaba bien ven vamos por un tè. —Mi hermana se apresuraba en ayudarme a buscarlo, su novio igual Gustavo también ayudaba acompañándome me llevó a la habitación y no se movía de ahí, me dijo que me cuidaría y que no me dejaría sola, hasta que de tanto llorar me quedé dormida.

Escuche un ruido que fue ahí cuando me desperté vi a Gustavo tirado en el piso me asuste pense lo peor, fui con él, me di cuenta que estaba inconsciente y tenía un golpe en la cabeza me levanté  sentí la presencia de alguien.

—Hola mi amor, tanto tiempo bueno no ha pasado mucho desde que maté a tu amor. —Esa voz, era Lucas, maldita sea él tiene a mi bebe, solo quería que no le hiciera daño.

—¿Qué es lo que quieres?. —Se acercó a mí despacio y sonriendo, sabía que algo malo tramaba.

—Quiero mi parte del trato ya han pasado casi 6 años y no he recibido mi recompensas, al contrario me mandaste a la cárcel.

—Tú mismo te lo buscaste, como fue posible que fueras el responsable del accidente de Camilo.

—Ya te enteraste.

—Y lo dices así, eres despreciable.

—Solo quise eliminarlo porque lo amabas, a Paul no le hice nada solo porque estaba seguro que no dejaría a tu hermana por ti, lo conozco desde que éramos niños, él y yo incluso éramos amigos, él solo tomó la manera de vivir fácil enamorando a mujeres ricas que le dieran todo, yo igual ahí está la directora del instituto o crees que yo vivía y tenía todo lo que viste solo con limpiar, ella me daba todo luego llegaste tú, igual viví bien pero yo queria mas queria toda la herencia pero te pusiste la dura, la difícil y me tocó hacer cosas que no quería pero todo era por tu misma culpa. —Lo escuché y no pude evitar llorar, toda mi vida mi amor fue un engaño, Paul también era parte de todo esto desde el principio.

—No lo puedo creer, Paul también me manipulo. —Como pude ser tan ingenua, los 2 me han engañado todo este tiempo, fingieron todo.

—Tu fuiste su pasa tiempo, aunque si se enamoro de ti el imbécil, me traiciono cuando tu decidiste traicionarnos, ahí fue cuando él también lo hizo, quise contarle a la policía y aunque lo intente, nadie me creería que él también era mi cómplice por eso deje las cosas así.