El entrenamiento

Habiéndose recuperado de sus heridas, Laramie inició su entrenamiento con su padre, Arithor le dice.

-Laramie debes dominar los elementos de la tierra, quizás nosotros por usar los bienes que nos proporciona la tierra, los aerials creen que somo bestias incivilizadas, debes tener muy presente que debes de respetar la tierra, si haces eso la naturaleza te brindará su apoyo.

-¿Por que los aerials creen que somos bestias?-

-Porque ellos usan magia que emana de la montaña en donde viven-

En ese momento recordó lo que Skyasia le habia dicho: "Los demás aerials dicen que los earthyals son bestias incivilizadas".

-Laramie ¿En que piensas?-

-Estaba pensando en Skyasia y...-

-¡Olvídate de ella!-

Laramie se sorprendió de que su padre le gritara.

-Entiende Laramie; ella es tu enemiga, aunque le hayas salvado la vida no dudes en que la estarán entrenando para que te odie y olvide la buena acción que hiciste.

-padre, la conocí por poco tiempo pero no creo que ella me odie, yo le dije...- Laramie se sonroja.

-¡olvídate de ella!- exclama su padre evidentemente enojado, pero Laramie decidido exclama.

-¡Yo le dije que era la niñas más bonita que había visto, por eso creo que ella nunca me va a odiar!-

-¡Apenas la conociste por un momento!, ¿¡Que te hace creer que ella no te olvide!?-

Laramie se quedó callado, pero pensó que quizás ella no logre olvidarlo.

-Comencemos con el entrenamiento hijo-

Laramie asintió, mientras Skyasia miraba desde lo alto de la montaña hacia el lago en donde conoció a Laramie, Marcius se acerca y pone su mano sobre su hombro.

-Debemos comenzar tu entrenamiento querida Skyasia-

-Si claro-

Marcius notaba que estaba triste.

-¿Acaso estás pensando en ese sucio earthyal?- dice Marcius evidentemente molesto, Skyasia voltea lo mira y pone una cara igual molesta.

-No se atreva a hablar mal de Laramie, aunque sea un earthyal él salvo mi vida-

Marcius se puso furioso; tomandola fuertemente del brazo le dice.

-Empezaremos tu entrenamiento, tendrás que olvidarte de él; empezaremos una guerra contra ellos, y tendrás que decidir si matarlo a él o él te matará a tí.

-aún así señor Marcius, yo no creo que él me mate-

-¿¡Y quién te garantiza que él no vendrá a matarte!?- dice Marcius realmente muy enojado, Skyasia le grita.

-¡Porque él dijo que yo soy la niña más bonita que había visto!- Dice Skyasia casi llorando, Marcius se da cuenta rapidamente de lo que Skyasia quiere decir, a pesar de ser aún una niña, había a florado un sentimiento de amor hacia Laramie.

-Comencemos de una vez Skyasia- Dice sombriamente Marcius.

-Está bien- Skyasia sigue a Marcius a la zona de entrenamiento.

-Aquí entrenaras conmigo, te fortaleceré y serás capaz incluso de combatir, nosotros nos dirijimos con sumo respeto a los elementos que habitan en las montañas y el cielo, nosotros somos seres que vuelan, respetar la integridad del cielo es impresindible para nosotros; no podemos contaminarlo la fuerza de nuestras alas se debe a que respetamos el aire.

Entonces Skyasia preguntó.

-Entonces, ¿fue por eso que pudiste lanzar a Laramie lejos con tus alas?-

-Así es, los earthyal están al tanto de nuestra fuerza, pero no poseen los conocimientos que nosotros tenemos, nosotros creamos elixires que nos curan cuando nos herimos, ellos no por eso antaño a esta epoca, esos sucios earthyals robaban nuestros elixires.

Skyasia se sorprendio mucho, Marcius se dio cuenta de eso; asi que decide hablar mal de los earthyal, para evitar asi que Skyasia siguiera enamorada de Laramie.

-Y eso no es todo- decía Marcius -ellos trataron de conquistarnos, no respetaron la integridad de los cielos, cuando aún era un chiquillo mi abuelo me contó que el había protegido a tu tatarabuelo de uno de ellos.

-¿De verdad señor Marcius?- Decia Skyasia muy sorprendida.

-Oh sí- decia cinicamente Marcius - Por proteger a tu tatarabelo el ya fue incapaz de volar- 

-Señor Marcius lo lamento mucho- Skyasia se puso triste casi al borde del llanto.

-Está bien Skyasia, yo quiero que siempre estés protegida, dejame protegerte-