Sobre tus alas [ Jason Todd]

LXIX Proposición

Hoy en el recreo, Brenda habla de los últimos detalles de su fiesta. Me alegra que vaya a ser pronto y por fin puedan venir otros temas de conversación.

—Serán ochenta y seis invitados. Ya contraté a un servicio de banquetería para que los atienda.

Casi escupo el jugo que bebo. Si yo invitara a toda esa gente a mi casa, nadie podría moverse. Dudo que tenga tantos amigos, probablemente no sea cercana ni a un cuarto de ellos.

Sin embargo, ella es feliz siendo tan sociable, qué se le va a hacer.

Del segundo piso del pabellón A, que queda justo frente a nosotras, veo aparecer a Jason. Baja tranquilamente la escalera seguido por Wally. Creo que le dice algo gracioso porque Jason comienza a reír.

Me gusta verlo reír. Creo que ese chico pelirrojo le hace muy bien a su ánimo.

—¿Invitaste a Jason a tu fiesta?

La mirada que recibo de Brenda me deja temblando y con ganas de salir corriendo.

—¡¿CÓMO SE TE OCURRE SIQUIERA PREGUNTARLO?! —grita indignada, poniéndose de pie y golpeando la mesa.

Supongo que fue error mío, ellos son como el agua y el aceite; completamente inmiscibles.

Me encojo de hombros y Brenda deja atrás su exabrupto, para seguir con los preparativos.

—Quiero al DJ sensación del momento. Hoy me confirmará su asistencia.

Jason ya ha llegado al primer piso y se ha encontrado con Kory, que venía por el pasillo.

¡Casi chocan!

Creo que al juntarse tanto conmigo se le ha pegado un poco de mi torpeza.

—La torta tendrá tres pisos y será de red velvet.

Ahora se han puesto a conversar y Wally los ha dejado solos. Kory le sonríe amablemente y juguetea con su hermoso cabello.

Creo que le está coqueteando.

¡Y Jason está nervioso!

Verlo es todo un espectáculo y muero por saber de qué hablan.

—¿Ya compraste mi regalo?

—¿Qué?

Se me había olvidado completamente.

—Yo...

—¡Era broma! Imagina qué haría con ochenta y seis regalos. Lo dije porque estás muy distraída y no me gusta que me ignoren ¿Qué estabas mirando?

Ella voltea y da un vistazo al patio, deteniéndose en la escena que yo misma veía con tanta curiosidad.

—Así que era eso ¿No me digas que estás celosa?

—¡Claro que no! Él y yo sólo somos amigos.

Ella asiente, pero su sonrisa me causa desconfianza. No me cree.

—Pensé que Kory tenía mejor gusto —comenta, con una mueca de asco.

—Yo creo que Jason es lindo... A su manera.

Ahora me mira como si me hubiera vuelto loca.

—¡Ay, Isabel! Cada día estás peor, que no te vaya a oír Dick diciendo esas cosas.

~🦇~

—Vi que estuviste hablando con Kory.

Es lo primero que le digo a Jason cuando nos juntamos en el estacionamiento.

No puedo aguantarme la risa nerviosa y él me mira con fastidio.

—Sí. No es importante.

—¡¿Cómo que no es importante?! ¡Claro que es importante! Ella parecía muy coqueta ¿Te dijo algo lindo?

Y lo que me cuenta hace que casi me caiga de la impresión.

—Ella me invitó a salir. 
 




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.