I
¿Lo sientes, verdad?
Tu ecuánime fantasía ha llegado a su final.
Tú no eres discreta, ni hablar de tu mirar.
Y sus triviales actitudes han salido a tu luz.
La tuya, pues para mi ya han demostrado su crueldad.
Ahora ya ves la realidad.
II
Mas no es lo único, ¿verdad?
Siento que me miras, siento lo que piensas.
Lo sé, aún puedo leerte.
Lo sé, fui yo quien se siento así hace meses.
III
¿Te preguntas cómo, verdad?
¿Cómo puedo estar tan feliz...
cómo, cuando tú te sientes tan extraña con ellas?
¿Cómo puedo ser tan jovial junto a ella?
¿Cómo puede ser que te sientas tan funesta?
¿Cómo recién te das cuenta...
que sin ti, sigo siendo ineluctable?
IV
Tu parca presencia es cuento barato
tú sola te has engañado.
No sé si ahora quieres escucharme
pero quiero que sepas que lo haré sin cuestionarte.
Para poder sanarme, para que puedas lastimarte.
V
Me he vuelto fatua, ni yo lo esperaba,
quiero que llores tan solo una vez
Y sientas lo que yo viví por tu pérfida amistad.
Una vez que lo hayas entendido, que te hayas arrepentido,
yo sanaré y tu recuerdo...
Se volverá un susurro del pasado.