Sobreviviendo a la edad del burro

Un solo poema más

I

Este es el final, al menos mi final

cada día me cae otro golpe de realidad.

Solia venerarte, admirarte mas ahora ya no.

Tan falaz eres que no vale la pena una pelea más en tu honor,

hoy te suelto, hoy me alejo de tus garras

y poder volver a mi amada preponderancia.

II

Me habías dejado lastimada, destrozada,

sin ganas de luchar, ni pelear o discutir.

Pero esto se ha acabado, está ilusión ha terminado

después de los escollos que me has puesto:

finalmente puedo soltar tu recuerdo.

III

Te queria, es curioso pues ahora te odio,

olvidaste lo astuta que puedo ser, que insluto.

Y lo novata que ere al engañar, tan obvio.

"No quiero mala gente a mi lado" pero es la única que tienes a un lado.

Pobre suave y jovial alma, tan engañada.

IV

Suerte la mía que de ti soy célibe

y si tienes suerte, podrías ser mi dicente

para que aprendas del arte que "no conoces".

A ser tan "hipócrita" como me conoces.

Es mi placer acabar aqui

y decirte que de ahora en más no eres nadie para mi.




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