DIECINUEVE: Las fans.

Me quedo en silencio, mirando con asombro a la chica. No me esperaba que dijera eso, y no parece para nada arrepentida, de hecho, me sigue viendo de arriba abajo, analizándome. Como si tratara de descifrar una especie de código. Ahora entiendo por qué me miraba así en la heladería, sabía quién era yo, y me odia por lo que Harry dijo en aquella historia, y ahora porque me besé con él.

Nunca creí que me toparía con una persona así, que se cree en el derecho de juzgar las decisiones de sus ídolos solo por ser fan. Y además, venir y decir que no soy linda, ¿acaso sabe lo hiriente que es? Lo peor de todo, es que parece tener mi edad.

―¿Q-qué dijiste? ―pregunté, con la esperanza de que solo haya escuchado mal.

―Lo que oíste. No entiendo por qué Harry saldría contigo ―repite, mirándome igual de mal.

Danniel a mi lado la mira con sorpresa, pero por su cara sé que no le falta mucho para decir unas cuantas cosas a esta chica. Sé que no es lo ideal una pelea ahora, menos después de que haya terminado el concierto de los chicos, podría traerles problemas. Tomo la muñeca de Danniel y comienzo a alejarme, pero la chica me toma del hombro y me obliga a girarme y enfrentarla. Esta vez se veía furiosa, muy disgustada. ¿Esa no tendría que ser yo? O sea, me estás acosando e insultando.

―¿¡Te crees mucho solo porque te besó!? ¿¡Por qué me das la espalda!? ―protesta, aun sujetando mi hombro con suma fuerza.

Las personas comienzan a notar la situación, por lo que comienzan a agolparse a nuestro alrededor, murmurando cosas ininteligibles. Los nervios comienzan a llegar a mí, y la ansiedad no tarda en hacerse presente. Dios, ¿por qué hay tanta gente acá? <Es una feria, ¿qué esperabas?>. No ayudas.

―¿¡Encima no dices nada!? ¡Eres una creída de mierda! ¡Solo estás con él por fama, seguro lo manipulaste para que dijera eso en su historia! ¡Eres una escoria! ―seguía con su discurso.

Yo no podía hacer más que mirar en dirección a todos lados, viendo como cada vez llegaba más y más gente. Danniel había desaparecido, no tenía idea de cuando se había ido o por qué, pero en ese momento sentía que el aire no llegaba a mis pulmones. Oh, no. Esto es malo, tampoco veo a Sam o a Josh.

―¡Habla, maldita sea! ―dice, comenzando a sacudirme con violencia.

―Savannah, para ya ―dice una de sus amigas, tratando de alejarla de mí, pero no lo logra.

―¡No! Esta zorra solo se está guindando de la fama de Harry, lo hirió y aun así él la besa. No merece ser tratada bien ―gruñe, su mirada de odio asustándome mucho.

―P-por favor, suéltame ―tartamudeo, sin poder evitar que mi voz se quiebre en el proceso.

Me sentía muy avergonzada y humillada, quería desaparecer en ese momento. Sentía como si todos se estuvieran burlando, como si la apoyaran y por eso no me ayudaban. Solo quiero salir de aquí, pero su agarre se vuelve cada vez más fuerte y yo me he quedado paralizada.

―Guarda tus lágrimas de cocodrilo, maldita zorra.

Alza su mano, lista para abofetearme. Cierro los ojos y giro mi cabeza, esperando el impacto, pero este nunca llega. De hecho, no escucho nada, todos se quedan en absoluto silencio. Abro lentamente los ojos, temiendo encontrarme con algo peor.

Al hacerlo, veo la muñeca de la chica en el aire, siendo sujetada por la mano de alguien más. Sigo el brazo con la mirada, hasta descubrir de quién ha interferido. Es Harry, y no se ve nada contento, en lo absoluto. De hecho, su mirada es filosa, incluso me da miedo a mí, y ni siquiera me mira a mí.

La chica frente a mí, al parecer llamada Savannah, está estática en su lugar, mirando a Harry con asombro. Todos se quedan en silencio, y solo en ese momento noto que varios han grabado todo esto. ¿Tuvieron tiempo de sacar sus celulares y grabar, pero no para ayudarme?

―¿Qué es todo esto? ―dice Harry, soltando el brazo de la chica de mala gana.

La chica me suelta y se echa hacia atrás, aún asombrada.

―Y-yo… yo no…

―¿Por qué la estabas atacando así? ―interroga, aún sin quitar su expresión molesta.

Me abraza y me pega a su cuerpo, me mira y se ve aún más furioso al notar que varias lágrimas se han deslizado por mis mejillas.

―E-es que ella… es una zorr…

―¡No te atrevas a insultarla de nuevo! ¿Quién te dio el derecho de insultarla así? Ni siquiera sabes qué mierda pasó ―espeta―. Les pedí que no la acosaran más, que el error había sido mío y no de ella.

―¡No la defiendas! ¡Todos sabemos que ella es la que se comportó mal! ¡Sabemos que te manipuló para que dijeras eso y…!

―¡Basta ya! ―grita, callándola de golpe. Ella se calla de golpe, viéndose asustada. Se gira hacia el resto de las personas―. ¿Quién empezó todo esto? ―todos señalaron a Savannah―. Okey, mira. No suelo hacer esto, pero estás vetada de todos y cada uno de nuestros shows, una persona como tú no debe estar en nuestro fandom.

Dicho eso, me tomó de la mano y me sacó de ahí. En el proceso veo a Danniel, quien se ve sumamente aliviado de que Harry me haya sacado de ahí. Verlo solo me enfurece, ¿por qué se fue y me dejó sola? ¿Qué clase de amigo hace eso? Sigo a Harry en silencio, dejando que él me guíe.

Tengo muchos sentimientos encontrados justo ahora. Me siento humillada, furiosa, triste, avergonzada… Se suponía que sería una buena noche, que todo sería divertido. ¿Por qué todo debe terminar en algún drama? ¿No puedo tener un poco de tranquilidad alguna vez?

De pronto, me detengo y suelto la mano de Harry. Este se gira hacia mí al notarlo, mirándome confundido. Por otro lado, yo solo veo todo borroso debido a las lágrimas que comienzan a agolparse, y no tardan mucho en deslizarse por mis mejillas. Él se acerca a mí a paso veloz, me sujeta la cara y limpia algunas de mis lágrimas, pero estas salen con más fuerza.

Me abraza, y yo escondo mi cara en su pecho, llorando libremente. Me sentía muy mal, nunca nadie me había tratado así. No creí que tendría que llegar a vivirlo. Justo ahora me arrepentía de haber salido de mi casa, de haber venido a esta estúpida feria.