Inocente
(JANE)
—¡Un café doble sin azúcar!
Ruedo los ojos y comienzo a preparar el dichoso café asqueroso ¿A quién le gusta el café amargo?
—Jane así no... —vuelvo a escuchar la voz irritante de Alondra y volteo a fulminarla con molestia, ha estado más fastidiosa que de costumbre, desde que llegué luego de haber estado en el aeropuerto el señor Cooper me informó que nuevamente estaría en la cocina con menos paciencia que de costumbre, si es que eso es posible, y a Alondra la trató como un ángel caído del cielo por lo que ella ahora se cree la reina del lugar y me habla como si fuera su empleada, cómo si no estuviéramos en la misma miserable situación.
—Vuelves a decirme que hago mal algo y juro que te corto la lengua y te la hago tragar, desde hace un buen rato estuve soportando tu comportamiento idiota pero no te pases de lista que no te va a ir nada bien ¿Sabes lo que la gente dice de mí? —murmuro acercándome a ella lentamente y ella asiente sin poder cerrar su boca, sus ojos se abren más de lo normal— todo es cierto, puedo ser una pacifica chica y desquitarme solo con cosas materiales en algunos casos, pero si me molestas más de lo normal que te quede claro que el único color que vas a ver no va a ser el que esté en tu cacharro con ruedas, sino que va a ser el de tus moretones en cuanto te agarre ¿Esta claro? —Sonrío con inocencia mientras ella asiente con efusividad— muy bien, aquí tienes el puto café —sigo sonriendo mientras extiendo el vaso de café hacia ella.
...
—Becky no va a hablarte aún, siente que vas a matarla ni bien veas su cara —comenta Alina.
—Y lo haré —gruño con molestia, aunque no se si estoy enfadada por lo que me obligaron a hacer o por recordar al idiota de James apretujando la cintura de esa pelinegra ¿Es que ningún hombre puede contentarse solo con una mujer? No es que lo quiera solo para mí, eso sería absurdo... solo que podría haber esperado mucho más tiempo, una larga temporada quizá, para estar con una zorra, digo, es solo un pensamiento.
—Aquí pasa algo más, suéltalo J —canturrea Ali con su típica actitud cotilla.
A esta mujer no se le escapa nada, mierda.
—No te contaré Alina, deja de entrometerte.
—Eso me huele a secretos sucios ¿Qué hiciste Jane?
—No te lo diré, no vas a sacarme ni una palabra.
La escucho rezongar pero estoy segura de que no seguirá molestando con el tema.
—Sabes, no he visto a mi hermano desde ayer y creo que lo escuché hablar con Becky por teléfono antes de que salga —alza sus cejas sugestivamente y ambas lanzamos una risa con aire de complicidad.
—¿Será que nuestra chica virgen ya no es tan...
—¡Oh Jane calla! Ni lo digas.
—No te hagas la inocente Ali, si tu eres más pícara que nosotras dos juntas.
Se sonroja ferozmente y yo río burlonamente, Alina a pesar de ser bastante buena tiene algún que otro secreto oscuro, Becky y yo lo sabemos con seguridad ya que ella nos cuenta la mayoría de sus amoríos, no ha estado con más de dos chicos en todo lo que lleva de vida... intima, pero aún así es más de lo que Becky y yo tuvimos alguna vez, con suerte estuve con Fabri y Becky es virgen, sin contar que todo el instituto lo sabe, realmente fue el notición del momento en cuanto un chico publicó una noticia en el blog de chismes del instituto McKenvey, debió ser una tortura para Bec tener que soportar a medio alumnado pidiéndole un revolcón para "ayudarla" con su "problemita". Solo espero que Christian, el hermano de Alina, no sea un idiota con ella, aunque viéndolos a ambos juntos es imposible negar su atracción y el cariño que se tienen...
De repente el sonido de un celular sonando se hace presente haciendo que Alina chille y tome su teléfono, la observo con atención hasta que luego de unos minutos abre la boca con dramatismo y deja caer el celular sobre la cama, pongo los ojos en blanco antes de tomar su móvil y ver lo que la alteró tanto, se que si le pregunto su voz sonará más aguda de lo normal... si eso es posible. Al leer, o más bien pasar de largo lo innecesario y leer lo importante levanto mis cejas mientras abro mis ojos ligeramente sorprendida, hablando de roma el rey se asoma... aunque más bien estaba pensando en ello, bah, es lo mismo, el idiota que descubrió a Becky pidió perdón a todos y anunció que cerrará el blog de chismes. A mi lo único que me importa es que por fin se dio cuenta de que mi pelinegra favorita no es ninguna tonta por no abrirse de piernas al primer idiota.
...
Camino con discreción por los pasillos del instituto, es el primer receso y eso significa cruzarme obligatoriamente con el idiota de James, no quiero ni verlo y sinceramente no creo que el quiera saber de mí tampoco. Así que, nos hago un favor a los dos y evito el encuentro. Pero claro que la suerte no esta de mi lado, nunca, ya que Maddison alias puta con plata me choca con su hombro al pasar e inevitablemente me enfado y mi instinto hace que la tome del brazo con fuerza y la voltee nuevamente en mi dirección para encararla, dirán ¿Qué tiene que ver Maddison con mi mala suerte? Pues así como llega ella, llega James y la "rescata" de mis manos tirando de ella. Siento el calor subir a mis mejillas por el enfadoimbésil, Idiota, arrogante, mujeriego, malpari...
—Maddison, eres más fea que dos traseros arrugados juntos —lo escucho decir.
<<—Te ayudaré con una condición... —susurro acercándome él y sonríe.
—¿Qué no le diga a nadie sobre tu segundo nombre?
—No, eso se que no lo harás porque si lo haces te quedarás sin descendencia —murmuro con tranquilidad— tienes que decirle a Maddison —la chica chicle mayor, que suele hablar mucho con él— que es más fea que dos traseros arrugados juntos.
¿Por qué haría eso? —dice con confusión.
—Porque no me cae bien y me da flojera pintar su auto que ya por ser rosa chillón es feo —hago una mueca para restarle importancia, no comento el hecho de que ya me han llegado dos denuncias por parte de la putizorra, o mejor dicho por parte de su madre.