Solamente tú #2

21

¿Qué hice?

(JANE)

Paso las manos por mi rostro en signo de frustración mientras repiqueteo contra el piso nerviosamente con mi pie derecho.

No se que hice.

Ayer por la tarde Fabricio me invitó a ir a un bar, para recordar viejos tiempos. Y yo acepté ya que quería despejarme y si podía: bebería hasta olvidarme de todo, pero al llegar al lugar no encontre a Fabri, esperé y esperé pero no llego. Con un sabor amargo en la boca decidí pedir algunos tragos, perdi la cuenta de cuantos tomé cuando pasé el quinto. No se que pasó después, lo ultimo que recuerdo es que el barman me decía que debía dejar de beber, al cual no obedecí y en cambio le grité que trajera chupitos: Los chupitos son mi perdicion, puedo tomar cualquier bebida alcoholica y que no me pegue demasiado pero los chupitos son algo que no soporto.

Ahora amanecí aquí, en la habitación de Fabricio. Vestida unicamente con una camisa suya sobre mi ropa interior y el remordimiento de lo que imagino que pasó no me deja tranquila, ni hablar de la resaca tremenda que me dejo la borrachera.

¿Qué hice?

La puerta se abre de golpe y me sobresalto al tiempo que me abrazo a mi misma intentando tapar un poco más mi cuerpo, observo a Fabricio entrar a la habitación y rebuscar algo entre sus cosas desesperadamente.

En el momento que voltea en mi dirección me observa con una sonrisa torcida.

—Veo que despertaste —dice antes de tomar lo que sea que estaba buscando anteriormente y retirarse de la habitación sin dejar que abra mi boca siquiera para responder.

Maldigo en voz baja mientras comienzo a palpar el colchón de la cama en busca de mi teléfono celular y al no obtener ningún resultado doy una mirada a la habitación en busca de alguna ropa mía, pero no hay rastros de ninguna prenda de mi pertenencia. Sigo mi búsqueda con más impaciencia poniéndome de pie y desarmando el arreglo de la cama de un tirón, al escuchar el sonido seco de algo cayéndose al suelo abro mis ojos y me lanzo a la cama estirándome para alcanzar el aparato que se encuentra a un metro de esta. al tomarla entre mis manos aprieto el botón de desbloqueo para darme cuenta que esta apagado. Suelto un suspiro al tiempo que comienzo a encenderlo y me acomodo mejor en la cama, de modo que no tengo medio cuerpo colgando de ella y me encuentro acostada sobre el edredón boca para abajo.

Cuando termina de encenderse este comienza a vibrar de forma incesante y vuelvo a maldecir, papá debe estar hecho una furia, y ni hablar de Alina y Becky. Me fijo en la hora y pasó una hora desde que terminaron las clases de hoy.

Con algo de miedo abro el buzón de mensajes para comprobar que tengo 25 llamadas perdidas de mi padre, 13 de Becky y 42 de Alina. También tengo mensajes de personas que no conozco por lo que estoy segura que Alina le preguntó a medio instituto si sabían algo de mí. Solo espero que no le haya dicho nada a...

¡James!

Mierda, mierda y más mierda.

Hoy es el maldito encuentro definitorio y yo posiblemente me acosté con mi ex amante.

Genial, realmente genial.

(JAMES)

Al llegar al barrio que habíamos visitado con Jane una vez comienzo a caminar apresuradamente intentando recordar el camino que habíamos tomado ese día y no es difícil ya que logro divisar el maldito bache que había atrapado mi tobillo la ultima vez y se de inmediato que estoy cerca, realmente espero que se encuentre aquí.

Veo el taller a lo lejos y prácticamente corro hacia él, al estar en frente paro de golpe y trago con dificultad intentando recuperar el aliento perdido por la rápida caminata, puedo notar que el hombre con el que había hablado Jane la vez pasada se encuentra arreglando un auto a unos metros, un poco dudoso me acerco hacia él y carraspeo mi garganta intentando llamar su atención.

El hombre se incorpora dejando a un lado su trabajo y comienza a hablar—Hola en que lo puedo... ¡El novio de Janie! ¿Qué necesitas chico? —se interrumpe a si mismo y me da una palmada en el hombro dejando una mancha de grasa en mi abrigo, pero me importa poco .

—Si, soy yo —contesto sonriendo levemente—, este... señor ¿Ha visto a Jane por aquí?

—Por aquí no ha venido, pero quizá esta en casa con mis hijos, ve allí, es la que se encuentra en la esquina de este lado de la calle —sin más el hombre sonríe en mi dirección por ultima vez y vuelve a su trabajo.

—Gracias —murmuro al tiempo que emprendo camino a la salida caminando de espaldas, al momento que me volteo choco con alguien.

Es chico de la otra vez, el que me disparaba con la mirada. Me sonríe con burla antes de hacerse a un lado para dejarme pasar, frunzo en entrecejo pero no digo nada, sigo mi camino y al llegar al lugar indicado me adelanto hacia la puerta para tocar el timbre, pasan unos minutos hasta que una chica castaña me abra, cuando me ve sonríe provocativamente y relame sus labios antes de enterrar sus dientes en el inferior.

—¿Qué necesitas guapo? —pregunta parándose de forma extraña.

—Emh... ¿Se encuentra Jane aquí? —cuestiono con incomodidad.

Ella eleva una de sus cejas antes de lanzar una carcajada—¿Eres James? —asiento ante su pregunta algo confundido ¿De qué me conoce?— pues entonces, comprueba tu si ella está o no aquí —se aparta de entrada haciéndose a un costado y forma un ademán indicándome que entre—, sube y entra al primer cuarto que veas.

—Eh... gracias —contesto con confusión.

No dejo de pensar que la chica es algo rara pero aún así le obedezco.

 

(JANE)

Muerdo mi labio inferior y golpeo el aparato contra el borde de la cama cuando se apaga por falta de batería, los chuchos de hoy en día no soportan nada. Maldita sea el día que me dejé convencer de comprarme un celular más moderno. Me apoyo sobre mis codos y seguidamente paso a sostenerme con las manos, finalmente me incorporo y me pongo de pie a un lado de la cama, Fabricio debe tener algún cargador que me sirva, con eso de que ahora todas las entradas son exactamente iguales sería realmente una mala pata que justo él tenga uno diferente, cuando me agacho frente a un montón de cables enredados la puerta se abre a lo que no dudo en ponerme de pie nuevamente y despotricar contra Fabricio de inmediato antes de que me interrumpa y no me deje replicar huyendo como un imbécil.



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En el texto hay: amorodio, delincuente, chica ruda

Editado: 24.07.2020

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