Solitaria Natividad.

PARTE 3: ¡SORPRESA!

Llevábamos ya 10hrs viajando en coche, claramente haciendo paradas y durmiendo en los asientos traseros ya que según Dolan era mejor llegar a florida en coche que esperar el avión, el me llevaría hasta Boca Ratón (donde vivo) después de descansar en Tampa (donde vive el), ese era el trato, ciertamente acepte porque por lo menos llegaría el mismo 25 a mi hogar.

Como eran las cinco de la mañana solo me desperté para comer el desayuno que Dolan me ofrecía y volví a dormirme. Me pase todo el viaje ignorándolo a posta, no entendía porque hacerme perder un vuelo solo para pedirme perdón, por algo que ahora considero una estupidez, con gusto lo hubiera perdonado a la primera, pero este chico es determinado y sé que hay algo más que esconde.

Escuche que timbraba un móvil a lo lejos, empecé a despertarme pero me quede en la misma postura, de espalda a él, así que termine escuchando su conversación sin querer.

—¡Hola, primito!— escucho la voz de Lea-Jean por el altavoz.

—¿Por qué me llamas si sabes que voy conduciendo, con Nat al lado? Si se despierta sabrá que me ayudaste en todo esto y se enojara más.

—Ay querido ¿no creerás que con lo observadora que es, no se habría dado cuenta ya?— ciertamente Lea tiene razón — Es mas estoy segura que sabe ya que fui yo la que saboteo el viaje cambiandole la fecha a su movil—, eso si no me lo esperaba—. Y ¿Cómo va todo?

—Un poco difícil, me ha ignorado todo el viaje y eso que falta aun 13hrs más, si contamos las paradas a comer y dormir, no creo que me perdone.

—¡Bobadas! Si ella supiera que alquilaste todo un aeropuerto solo para darle la mayor sorpresa de su vida, de seguro que si te perdona.

—Sabes lo que pienso de eso, una cosa es que crea que ella vale todo eso y más, a sobornar sus sentimientos por las cosas que hice por ella.

—Mason, te lo he dicho miles de veces, ella está coladita por ti, la conozco muy bien, de seguro se está haciendo la difícil, ya verás como todo se arregla.

Escuchar esa conversación me hizo darme cuenta por qué tanto enrede para pedir perdón, o eso creí, hasta que por fin llegamos a Tampa en Noche Buena, claro me encargue de hacer más ameno el viaje bajándole dos rayitas a mi drama.

Al llegar a su casa me di cuenta porque se dio el lujo de alquilar un aeropuerto completo, estaba frente a una mansión de tres niveles, no sabría decir de qué color estaba pintada la casona porque esta tenía una excesiva cantidad de bombillitos navideños apostaba mi carrera a que tenía una piscina detrás (como la mayoría de casas en Florida).

Esa fue mi sorpresa inicial, gracias al cielo que preví que conocería a su familia y le pedí que hiciéramos una parada para cambiarme y medio asearme, ahora lamento no haberme maquillado.

Al entrar a su casa tuve que retener las ganas de llorar, Mason Dolan me había hecho una fiesta sorpresa de cumpleaños por adelantado ¡Mi primera fiesta de cumpleaños! El lugar estaba lleno de decoraciones en blanco, azul «sip, tengo una obsesion por el color, y el lo sabe bien» y plateado. Toda mi familia estaba ahí y mis amigos de universidad con sus familias. El preparó un enorme banquete navideño para toda esta gente en mi honor.

Entre lágrimas salude a todos los que conocía y deje que me presentaran con los que no conocía, así pase la noche antes del buffet de brazo en brazo, había perdido a Dolan de vista y quería agradecerle por todo, pero Lea me había halado para el enorme comedor, me toco sentarme frente a él, esperaba que en algún momento me mirara para darle la gracias, aunque sea por seña, pero eso nunca paso.

Llegada la hora de traer el postre se levantó llamando la atención de todos, incluso la mía que estaba concentrada en deshuesar mi carne «parecía leona devorando su presa», Mason me miró fijamente, y pidió su atención a los invitados, cosa innecesaria porque ya la tenían, momento que aproveche para limpiar mis manos y boca con una servilleta de manera rápida «no sé porque, si ya él me había visto atacar al pobre pavo».

—Gracias a todos por venir a celebrar la vida de tan hermosa mujer, que está sentada frente a mí. Decidí tomar este día para reunir a la gente que ella más ama y hacer este día propio para ella, quería que sintiera única la fecha y que no la compartía con nada más que con gente importante, porque después del nacimiento de Jesús lo que más importa es reunir a la familia, así que delante de todas estas familias me tomo el atrevimiento de pedirte que seas mi novia—. No sabía que lloraba hasta que Lea me pasó una servilleta para que secara el rio que salía de mis ojos, nunca me había sentido tan amada en mi vida, a pesar de lo unida que es mi familia.

Me pare de mi silla, rodee el comedor y respondí desde lo más profundo de mi alma uno de los SI más sincero que el escucho de mí.

—¿Mami y cuál fue el otro SI?

—Cuando le pedí matrimonio, un año después—. Respondió Mason por mí.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.