Solo déjate amar

Capítulo 5.

Ayer domingo , me quedé en casa. No tenía ganas de salir.

Hoy lunes , primer día de la semana , de vuelta al trabajo.

Estiró mis brazos y lanzo un bostezo , mientras quito las sábanas con mis piernas.

Algo se mueve encima mío. 

—Uh , hola , cariño. No sabía que estabas aquí.—saludo a mí gato. 

Muevo a mi mascota para poder levantarme.

Voy hacia el único baño de la casa a cepillarme los dientes y darme una ducha.

Unos minutos después regreso a mí habitación. Escojo una camiseta de colores , un jean claro y unas zapatillas blancas. Tengo alguna obsesion con las zapatillas de este color.

Miro mi rostro natural en el espejo.

Linda.

¿Ay , a quién engaño? Soy la copia exacta de la muñequita rosa que sale en los Trolls. 

Arreglo un poco mi cabello , sujeto el lazo por atrás de mi cabeza. Lista.

Agarro mi pequeño bolso ; acomodo mi celular , cargador , llaves y dinero dentro. 

Salgo de casa en silencio.

Iré a la cafetería , no tome desayuno en casa. Necesito llenar este gran estómago. Me tomare mi tiempo hasta llegar , es temprano.

🍂🍂🍂

—¡Maddie! Toma , te compre un batido.

—Hola Tomatito. Gracias, pero ya estoy llena , vengo de la cafetería.

Mi amiga se encoje de hombros.

—Como sea , más para mí.

Río mientras veo como se mancha su nariz por beber rápido.

Mi teléfono comienza a vibrar.

Videollamada entrante de Zed.

—¿Quién es?—mi amiga se asoma.

—Zed.

—Hasta que se digna el jovencito. Contesta , aún faltan minutos para comenzar.

Deslizo el botón de contestar.

—¡Hola , chicas! A...

—¡Deberias pedirnos disculpas! No nos llamás , ni escribes. 

—En realidad yo hablé con el ayer.

Carolina pone una cara de indignación.

—¿Por qué siempre me dejan de lado? Es injusto.

—Dejate de dramas , roja. Tengo algo que decir.

Ella entrecierra los ojos.

—Habla.—ordeno.

—Dentro de una semana saldré de vacaciones , iré unos días por allá. Veré sus feas caras después de tanto tiempo. 

—Ja–Ja.—habla Caro.

—Genial.—digo yo.

—Vayan prepandose para mí llegada. ¡Adiós! 

No me da tiempo de despedirme ,Zed ya ha cortado la llamada.

—¿Tu crees que tenga alguna novia?—me pregunta Caro.

—Quizas tenga un novio.

—¿Tu crees?

—No jaja. Con la reputación que tenía en la secundaria.

—Puede que lo haya estado escondiendo.

—Ahora me arrepiento de meterte esa idea en la cabeza.

—Pero...

—A nuestros puestos , tomatito.—la interrumpo.

—Aun faltan tres minutos para comenzar.

—No creo que quieras que la gente te vea con la nariz llena de batido de fresa.

Mi amiga va corriendo hacia el baño, mientras que yo me aguanto mi risa de foca.

🍂🍂🍂

Faltan diez minutos exactos para que se acabe mi turno. Por fin , ya me cansé de estar sentada. 

—Hola , Madison.—habla una voz conocida.

—Oh , hola Harvey. No pensé que venías hoy. ¿Leiste el libro?

—Solo los primeros cuentos.

—¿Y que has aprendido?

—Nada. ¿Que voy a aprender con cuentos para niños?

—Son fábulas.

—Ok , fábulas. No enseñan nada , más que los nombres de los animales. 

Cuando voy a decirle que está equivocado. Otra voz interrumpe.

—¿Lista para nuestra salida de hoy?

Alejandro.

—No puedes ponerte delante de una persona así , como si fueras el rey del universo. Ella está ocupada.

—Ya acabará su turno , no creo que haya problema. 

Cuando quiero responder me vuelen a interrumpir.

—Increible. 

¿Esta enojado?

Harvey agarra un libro del mostrador y deja un billete.

—Espero que sea suficiente. Hasta luego , Madison.

 Se da la vuelta , saliendo rápidamente del local.

—Hasta luego.—abro la boca algo tarde.

Espero que no cause algún problema que el libro que llevo Harvey no esté registrado. 

—¿Lo conoces? 

—Un poco.—contesto.

—Es raro.

—Si , quizás un poco.—me quedó un minuto en silencio.

Cuando Alejandro quiere decir algo , yo me adelanto.

—¿Te puedo decir Alex? Diminutivo de Alejandro.

—Esta bien , aunque también me puedes llamar Darío.

—No. Esta bien Alex. 

—Genial.

—Bien , Alex , tienes que comprar un libro.

—¿Por qué? 

—Se supone que para eso viene alguien aquí ¿No? O bueno si no querías comprar nada , deberías estar en la otra sección. 

—Okey , me llevo este.—lee el nombre del libro.—Los tres cerditos... 

Río con ganas.

Me entrega el libro para registrarlo , le dijo el precio y me pasa un billete. Le doy el cambio junto con el libro.

—Gracias por la preferencia a Magic Corner que disfrute su lectura. 

—¿Era necesario decirme eso?

Asiento y río.

—¿Algún lugar especial al que quieras ir a cenar?

—Dijsite que sería una sorpresa , así que , sorprendeme. 

—Lo haré.

Mi teléfono suena. Si yo soy la única que pone una alarma que avisa que es hora de ir a su casita o bueno a cenar con alguien que conoces recién. 

—Termino mi horario. Dame un minuto para despedirme y poder irnos. Espérame fuera.

—Okey.

Busco a mi amiga y la encuentro en el baño.

—Tenemos un cliente nuevo gracias a ti. No entiendo cómo haces para tener chicos detrás tuyo con esa cara.

—Shh , lo que menos quiero tener son chicos , solo dinero. Bueno me voy , hasta mañana, Tomatito.

—Hasta mañana , nariboo.

—Hazme el favor de no arreglarte más cuando regrese a casa. Eres la única que lo hace.

—Chau.—me mira acusatoramente mientras me empuja fuera del baño.

Salgo de la librería. 

Me encuentro a Álex hablando por teléfono con un brazo sobre el que supongo es su carro. Me mira y abre la puerta para que pueda entrar.

Wou , siento como si los asientos fueran algodón. 



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En el texto hay: amor, amistad, secretos y miedos

Editado: 26.12.2020

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