Solo déjate amar

Capítulo 11. (Sin revisar)

Harvey

Llevo minutos caminando con el amigo de Madison a mí lado. El silencio es algo incómodo pero no quiero ser yo quien lo rompa.

—¿Harvey?...—habla Zed.

—¿Si?

—¿De donde conoces a Maddie?—rio por la manera en como la llamo.

—De la librería.—no pienso contarle que solo me acerque a ella por curiosidad o solo porque estaba triste. Sería algo raro.

—Aya...

Vuele el silencio.

—¿Y tu de dónde la conoces?—pregunto.

—De la secundaria.

—Okey.

—Me gusta Madison.—suelta.

Me quedo estático , pensando en que decir ante su confesión. No puedo negar que Madison tiene lo suyo y que aveces puede llegar a ser divertida , pero... ¿Enamorarse de alguien , que como ella dijo , puede estar tan o más jodido que tú?

—¿Por qué? Digo... ¿Como así? —me trabó entre mis palabras.

—¿A ti te gusta ella?—pregunta.

—No... La conozco hace poco. Y no creo en el amor a primera vista. Además ¿De que sirve enamorarse y estar detrás de alguien?

—No es estar detrás de alguien. Solo ser tal para cual y experimentar juntos. Ser los indicados para cada uno.

—¿Y cómo sabes que tu eres el indicado para ella y ella es la indicada para ti?

—No lo sé. Pero la quiero.

—Bueno.No tengo nada que decir. Madison si es una chica simpática.

—Trate de olvidarme de ella llendo a estudiar a otro lugar. Me junte con varias chicas. Pero fue imposible olvidarla , ella fue la que me saco de la oscuridad y es imposible olvidar a tu luz.

—Eso fue intenso.—digo.

—¿Vamos por algo de comer y así nos conocemos un poco más? Quiero saber con quién se junto mi Maddie.—rie.

—Oh si , muero de hambre. Y te aseguro que no soy una mala persona...o eso creo yo.

Madison

Faltan cuatro minutos para que acabe mi turno. Por si no lo sabían está librería está abierta las 24hrs como muchos más.

La librería está prácticamente vacía , solo hay unas cuantas personas leyendo los libros gratis. Así que me acerco a Caro.

—Oye tomatito.—la llamo.

—¿Si?—pregunta.

—¿Que tal si preparo una cita para Zed y tú?¿Te parece bien?

—No.

—¿Que, por qué?

—Zed sabrá que me gusta.

—Ese es el chiste ¿no? ¿Prefieres quedarte ahí esperando que venga por ti?

—¿Y si no le gusto?¿Y si le sigue enamorado de la chica que dejó?

— Ay bebé.—la agarro de los hombros y la miro fijamente.—Haz visto como los chicos babean por ti , ¿Quien dice que Zed es la excepción? Y... Yo creo que la chica le tenía harto. Conozco a Zed. Si de verdad le gustara , no la hubiera dejado ir. ¿No crees?

—Ya nos tenemos que ir.—avisa y se suelta de mi. Después de unos segundos, suspira y dice—Lo pensaré. Lo de la cita.

Asiento rápidamente con una sonrisa. Después de unos minutos los chicos llegan. Zed se acerca a Carolina, y yo los observo como si fueran dos superestrellas.

—¿No crees que hacen linda pareja?—pregunto a Harvey.

Él está mirándome fijamente.

—¿Tengo algo en la cara o el dientes?—le digo.

Él solo sonríe y niega.

—No tienes nada.

—Entonces por qué me miras como un ... No se qué.

—Nada.—baja la mirada.

—Ya no estoy molesta contigo. —digo.

—¿Entonces ahora sí me contestarás los mensajes?

—Si... No me queda otra opción.

—Bueno y...¿Has vuelo a hablar con él?—pregunta. Se que se refiere a Alejandro.

—No. Y quizás nunca más lo haga.

—¿Por qué?

Se que no debería decirserlo pero de todas maneras lo hago.

—Me confesó que le gustaba , que era la única que no me había alejado. No se... Cosas así.

—Oh.

—Solo dirás eso. Al menos haz que me sienta normal.

—¿Pero por qué te sientes anormal?

—Cierto. Eres hombre. Nunca conocerás mis pensamientos o sentimientos.

Él solo se rasca la nunca y se encoje de hombros.

Harvey

Estuve a punto de decirle lo de Zed , pero ella piensa y se que quiere que sus amigos estén juntos. No podré hacer nada.

Cuando me dijo lo de Alejandro , por alguna razón sentí celos. Creo que me estoy acostumbrando a ella. Sabe mucho de mí y ahora por alguna razón quiero que conozca todo o que me haga conocerme a mí mismo.

Puedo decir con seguridad que ella no me gusta o que me enamore. Conocería ese sentimiento a leguas ; los libros te explican muchas veces el sentimiento. Bueno en realidad te dicen que son cosas inexplicables pero maravillosas , que no puedes respirar muy bien cuando está cerca , que no puedes dejar de pensar en esa persona cuando se aleja. Yo lo único que siento es paz.

Ahora estoy en su cuarto. Observando el dibujo que cree para ella. No puedo dormir por alguna extraña razón. Ella si está completamente dormida.

Cuando salimos de la librería , solo fuimos por algo de comer y cada uno a sus casas , bueno en mi casa no. Fue raro cuando Madison me pidió que vaya con ella. No pude negarme. Nos despedimos con la mirada amenazante de Zed y un levantamiento de pulgares por parte de Carolina.

Al llegar a su casa , solo me hizo pasar me pasó unas cuantas sábanas y se fue a dormir.

Y ahora estoy aquí. En el complemento silencio , solo con la luz de la luna que atraviesa la ventana.

Madison se comienza a moverse , abre los ojos. Y salta hasta sentarse.

—Casi me cargó del susto idiota. ¿Que haces así y ahí?—sursurra y yo río.

—Viendo mi arte reflejado por la luna.

Ella levanta una ceja y habla.

—¿Quieres ver la luna conmigo?—y se aparta un poco haciendo espacio en su cama.

—¿Estas segura?

—Si. Solo no me vuelvas a asustar.

Me acuesto a su lado , poniendo mis brazos bajo mi cabeza. Madison se remueve y sube su cabeza a mí pecho. Y yo la abrazo . Se que ella debería ser protegida por mi , pero yo me siento protegido por ella.

—De verdad si eres suave como una almohada.—



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En el texto hay: amor, amistad, secretos y miedos

Editado: 26.12.2020

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