Tal vez no sea para siempre

Diez días han pasado desde que llegue aquí. Diez días en donde mis sueños me alejan cada vez mas de la realidad... Haciéndome preguntar todas las mañanas "¿Cómo pase de eso?¿ A esto?".

Deseando no hacerlo mas... Porque ya no consigo nada de ello, mas allá de torturarme constantemente fingiendo felicidad y actuando como mi jodida cabeza quiere, o de lo contrario, aquí vamos de nuevo...

Prefiero estar despierto, y no meterme en un mundo de fantasía que ya paso y no volverá... Solo hace que haya contraste y denotando mi horrible realidad.

Hace ya tres días que llegaron los militares para cumplir con su palabra de darme suministros. También me colocaron los servicios básicos como el agua, la luz y el gas. Cosa que pensaba que no podrían hacer. Digo, los suministros me los podrían haber enviado desde un helicóptero, pero los servicios obligatoriamente tienen que ser puestos de forma física. Lo cual ocurrió, solo que con todo lo que habían dicho de este lugar, en mi vida hubiera imaginado que se arriesgarían a venir aquí. Lo cual es algo que agradezco, pero no me resuelve la duda de  ¿Porque?

¿Por qué seguir arriesgándose en venir aquí? ¿Por qué aun intentar mantenerme con vida?

¿No se supone que ya no había nada que hacer conmigo? ¿Y si aun están intentando algo? ¿Tendré que vivir aquí hasta ello...?

Sentí un hueco al recordar aquello... No me lo había vuelto a plantear desde mi llegada.

Sali al patio para respirar un poco he intentar calmar la presión de mi pecho, encontrándome con la misma escena desoladora... Ninguna planta alcanzo a germinar, ninguna excepto un girasol. Solo verla germinando me alivio. Si, iba a seguir aquí, pero tal vez no para siempre...

Le puse agua y la lleve hasta donde mas diera el sol. Viendo aquello, mi mente hizo "clip". Quite todas las semillas marchitas y las reemplace por girasoles, "si funciono una vez ¿Por qué no dos? ¿O tres?"

Habiendo hecho aquello, pensé: ¿Y si aumento aun mas mis posibilidades? 

Tome el auto y fui de nuevo a la floristería, "con este segundo viaje ya me traería todas las mesetas". El tortuoso proceso se repitió, pero al fin lo logre, todo ya estaba aquí.

Cene spaguetti con albóndigas, pensando en el hermoso jardín que se formaría si todo saliera según lo imaginaba. Ni siquiera cuando niño estuve tan a la expectativa de algo asi. Puede que ahora las vea como algo mas que simples flores... Talvez porque (además de mi), sea lo único vivo en este lugar. Y no, los soldados de hace días no cuentan. Con suerte y me hacían señas, aunque creo que fue mas una cuestión de distancia. Fácilmente estuve a unos 50 metros de ellos, por lo que no entenderían lo que les dijera ni aunque les gritara. Vaya que se tomaron muy en serio eso de que mi radio aumentaría.

Lave los platos, me relaje para después cepillar, llegando finalmente a mi cama. Donde vi por las ventanas, el patio, en especifico a aquella luz de esperanza entre la obscuridad...