Solo es un beso, No?
Me dirijo hacia una cafetería cercana de donde estudio para ir picar algo ya que no me ha dado tiempo de desayunar en mi casa, todo el mundo se ha levantado más temprano de lo normal y no me han podido levantar.
Me he quedado totalmente dormida me he levantado a las 7 am, que por lo normal esa es la hora a la que tengo que entrar, bueno, no es que haiga cometido un pecado o algo atroz pero me gusta llegar temprano, así sacrifique mis bellas horas de sueño.
Pero el mundo no puede estar más en mí contra ya que me encuentro con una mirada escudriñándome de arriba abajo y a quien menos me lo esperaba encontrar hoy…Sebastián.
Sebastián
Mi vida por así decirlo, es complicada ya sea por mis problemas, mi hermano y sus tontas reglas, mis padres y el insistirme a que vuelva a mi país con ellos, pero eso no va a suceder yo ya tengo mi vida hecha acá junto a mi hermano me quiero zafarme de las ataduras de mis padres y sus dichosas obligaciones, aparte que si llego a regresar será para mal si vuelvo todo me recordara a ELLA, y eso es algo por lo cual me he mudado y he decidido venirme a vivir con mi hermano a Ecuador.
Luego de haber conocido a la inigualable y testaruda de Ali, todo para mí ha cambiado, trato de mantener mi mente ocupada para no pensar en ella pero se me hace tan complicado, antes de que entrara a esta universidad yo tenía sueños un poco raros ya que por último se convirtieron en sueños mojados, sé que suena raro, pero así es, luego fueron tomando forma con la silueta de una chica bellísima, hermosa, y muy sexy que me traía loco en cada sueño, pero siempre supe que todo se quedaba en sueños.
Era la chica más linda que haya visto en toda mi jodida vida, pero en cierto punto comenzó a tomar forma y fue todo después de que entrara a la universidad y conocer a la testadura de Ali y vaya que ella también me parece sexy con todo lo que se ponga, hasta con un saco de papa, en fin ahora que estoy en la universidad he comenzado a soñar con ella, hasta me parece otra en mis sueños ella es… tierna, cariñosa, risueña conmigo en todo momento hasta vemos el atardecer juntos todo es tan increíble con ella en mis sueños somos como una pareja que irradia amor y luz propia solo por el hecho de estar juntos.
Me levanto como todas las mañanas con mucho sueño, ya que la noche pasada me trasnoche ya que unos amigos míos me invitaron a festejar, no sé qué, pero eso es lo que me acuerdo en fin de en cuentas no me acuerdo ni como los conocí, pero sé que fue por mi hermano, en fin bebí, me desmadre hice de todo con tal de olvidar mis tontos problemas.
Baje a la cocina donde se encontraba mi hermano el cual había llegado de parís la noche pasada, esta vestido con tarje formal color azul marino su cabello muy bien peinado hacia un lado, y una taza de café que lleva en su mano.
—Buenos días Sebas, que tal tu noche? —me pregunta con una sonrisa ladina en su rostro
—Ja,ja,ja, que bromista Charlie — le contesto con sarcasmo —bien como te fue en tu viaje.
—Pues muy bien, gracias por preguntar, y dime como te ha ido en la universidad
—Pues muy bien, muchas chicas, amigos nuevos, bla-bla-bla —le contesto mientras saco un poco de cereal de la alacena
—Pues que bueno mientras no sean chica formales… está bien —me contesta mientras se ríe, si será cabrón
—Sigue Charlie y lo siguiente que te parecerá bien será mi puño estampado en tu rostro
—Que gracioso Sebas, que gracioso…
—Ahh, pues tu empezaste
—Sabes porque te lo digo, no quiero problemas Sebastián.
—No los tendrás —le digo con toda la seguridad que tengo —eso jamás volverá a pasar, he cambiado, nadie me podrá hacer lo mismo una segunda vez Charlie.
—Eso espero, no quiero que cometas alguna locura....como la de antes recuerda porque estas aquí.
—No hace falta que me lo repitas, o que lo recuerde, se porque estoy aquí —le digo con fastidio para que sepa que ya no quiero sacar a relucir ese tema.
—Bueno, eso espero no quiero que vuelvas a drogarte ni mucho menos a las peleas, eso lo único que te trajo fueron problemas.
—¡¡MALDICION!! Eso ya lo sé de memoria —y llego al punto el cual no quería recordar —deja de vivir restregándomelo, joder ya entendí, vale
Mi hermano me queda viendo con sus ojos oscuros, muy parecidos a los de mi mama, sé que le he gritado a la única persona que me ayudo a salir de ese hueco, pero es que ya me jode que me recuerden lo mismo siempre. Él se me acerca con paso seguro hasta donde me encuentro y me toca el hombro me dedica una sincera sonrisa
—Mira, sé que se te es difícil revivir viejas heridas y más si han dolido tanto como las tuyas, pero es mejor recordarlas porque así te harás más fuerte, que en vez de olvidarlas y que te las recuerden de la peor manera, ahí si te van doler y más, solo te lo hago saber, hermano
Y sin más se aleja, y no me da tiempo de responder a lo que me acaba de decir, y bueno es verdad lo que me dijo pero es que mientras más recuerdo más me duele, se que no debí de haberle gritado de esa manera pero no me contuve y termine explotando toda mi furia del pasado con el.