Solo Era Una Noche

Capítulo 17: Distancia emocional

Claire

Una parte de mí esperaba que corriera detrás de mí.
Otra parte deseaba que no lo hiciera.

Porque si lo hacía, si decía las palabras correctas con esa voz baja y esa mirada que me desarma… tal vez lo perdonaría.

Y aún no estoy lista para eso.

Apagué el teléfono durante tres días.

No asistí a nuestra ecografía programada. Cancelé las citas semanales. Volví a mi mundo: guardias, pacientes, café frío y noches solitarias. Y fingí que podía con todo.

Pero el bebé…
Él no entendía de orgullo ni de decepciones.

Cada vez que se movía, cada pequeño golpe en mi vientre era un recordatorio de que ya no era solo yo. Que cada decisión que tomara, incluso la de alejarme, debía pensarse por dos.

Mis compañeras empezaron a notar el cambio. Mis silencios, mis ojeras, el modo en que tocaba mi abdomen como si buscara anclarme.

—¿Quieres hablar? —me preguntó Laura, una enfermera de pediatría.

Negué. Mentí. Dije que todo estaba bien.

Pero no lo estaba.

Una tarde, al salir del hospital, lo vi.

Grayson. Esperando junto al auto negro. Sin corbata. Ojeras marcadas. Mirada herida.

—Solo quiero saber si estás bien.

—Estoy bien —mentí otra vez.

—Claire…

—No me sigas. No me llames. No vengas al hospital. No quiero verte.

Su mandíbula se tensó. No dijo nada. Solo asintió, como si eso fuera lo último que podía hacer por mí.

Y lo vi marcharse.

Y dolió más de lo que debería.




Reportar




Uso de Cookies
Con el fin de proporcionar una mejor experiencia de usuario, recopilamos y utilizamos cookies. Si continúa navegando por nuestro sitio web, acepta la recopilación y el uso de cookies.