Mia:
El día había empezado bien, pero me había despertado con ese extraño presentimiento de que nada estaba bien, de que algo iba a pasar. Caden se fue a trabajar como siempre y suspire de alivio cuando recordé que ya me había graduado y no tenia que ir a la escuela, no se si podría empezar la universidad, no quería que Caden me mantuviera y tampoco a mi hermana aunque era lo que probablemente estaba haciendo ahora. Gianella había vuelto extrañamente a comportarse bien, desde que había visto como lloraba y Caden le regañaba, ella solo se empezó a comportar otra vez de lo mejor y se lo agradecía enormemente, hoy tenia una cita para jugar con una niña que había conocido en el parque, Mony le llevaría, ya que con ella había conocido a la niña. Bañe y vestí a Gigi con un pantalón corto unas mini convers que papa James le regalo y una remera que decía “amo a mi novio”, regalo de Steven. Ella se preparo una mochila con juguetes y le di su chaqueta.
—¿Vas a portarte bien?—ella asintió y me beso la mejilla.
—Te amo.—me dijo antes de subir al auto de Mony.
Pase el resto del día ordenando y limpiando, solo salí cuando una pareja que esperaban un bebe me llamaron preguntando por la casa, nos encontramos y se las mostré, les había gustado y habían dicho que querían alquilar. Les había dicho que necesitaba hablar con mi novio para terminar de arreglar los detalles. En ese momento fue en donde me di cuenta que estaba mas que acostumbrada a Caden de lo que pensé. Cuando se hicieron la una y Caden no llego a casa me preocupe, el siempre aparecía y si no, mandaba un mensaje. Lo llame y su teléfono estaba apagado. Llame a Mark, ya que el era el único que siempre sabia donde estaba en realidad.
—¿Que paso nena? ¿Esta todo bien con Gigi?—dijo una vez que nos sentamos en el living.
—Si, ella esta con Mony, pero Caden no ha vuelto y no contesta el teléfono, ¿El acaso tenia una trabajo hoy?—Mark frunció el ceño y negó.
—No que yo sepa, déjame intentar a mi—Asentí y el intento pero nada, también le daba apagado.
Mark estuvo alredor de dos horas haciendo llamados e intentando llamar a Caden, que Mark se preocupara no era normal, por lo que me hacia preocupar mas de lo que lo hacia normalmente. En el ultimo llamado que hizo, el rostro se le había puesto pálido y me dijo que llamara a Matthew y Steven y que si era posible que también viniera papa James. El insistía en no decirme nada, pero sabia que algo pasaba y tenia que ver con los trabajos que el realizaba, y también era algo serio, porque nunca involucraban a papa James.
—Matthew ¿Que esta pasando? Y no me mientas…—Ellos se habían quedado hablando en el living y me habían pedido café, pero Matthew había venido a quedarse conmigo y no lo dejaría en paz hasta que me dijera que mierda pasaba con mi novio.
—El me miro y suspiro.—El esta atascado en un enfrentamiento, es algo en donde Caden no tiene que estar. El hace otro tipo de trabajos, no son tan peligrosos y le han dicho a Mark que Caden esta ahí con el jefe y por obligación.—Fruncí el ceño y mi labio sobresalió sin permiso hacia afuera, avisando que iba a llorar. Matthew se acerco a mi y me abrazo.
—Hay que buscarlo, por favor Matty déjame ir.—el me miro a los ojos y sabia que estaba a punto de convencerlo.
Mientras estaba acurrucada entre los mellizos que en este momento parecían mas grandes y maduros que nunca, escuchaba como hablaban de encontrar a Caden, esto no era para nada como en las películas, aquí la policía no intervenía, no se pedía un rescate o algo así, aquí ibas y buscabas lo tuyo luego volvías y hacías como que nada paso. Sin embargo seguía sintiendo esa sensación horrible en el estomago. Habia hablado con Mony hace como 20 minutos pidiendole que Gianella se quedara con porque algo habia pasado, ella parecía que sabia todo porque dijo que todo iba a terminar bien. Cuando todos se pararon preparados para salir hacia algún lugar, yo me pare con ellos y papa James me miro sin entender.
—Ella viene con nosotros.—hablo firme Matthew.
—Matthew ella no puede venir, puede pasarle algo.—Yo me acerque a Matthew y me sentía como una niña entre tantas personas tan altas y seguras de si mismas, cuando yo estaba tan asustada.
—Ella sabe manejar armas mejor que los mellizos.—Papa James dudo pero no dijo mas.
Tras ir a algunos lugares, hicimos por lo menos una hora en carretera y antes de llegar a un lugar que se parecía mucho a donde había estado secuestrada meses atrás, Matt me dio un arma, beso mi frente y me sonrió.
—Tu puedes protegerte sola.—dicho eso bajo del auto.
—No bajes hasta que te diga, si escuchar tiros, escóndete como puedes, ¿Bien?.—asentí ante las palabras de papa James, vi como los mellizos se bajaban y tras intercambiar algunas cosas se rodeaban el lugar por lo lejos.
Editado: 05.07.2018