Owen Koster Dekker
Estoy en una de mis oficinas luego de meses sin venir ya al fin tengo unos días trabajando no hago todo, Mason me ha ayudado mucho e incluso varios de sus primos están visitando algunas de las sedes para asegurarnos que nadie se aproveche de mi situacion, Mason ha estado triste y se nota bastante pero al menos el tiene el apoyo de su esposa e hijos, mis suegros se tienen el uno al otro yo... Yo no tengo a nadie.
Mi mano derecha y algunos de mis hombres más leales y antiguos están allí para mí, pero no es para nada comparable.
Entre papeleo algunas reuniones y llamadas, termino un largo día de trabajo, suspiro profundamente cuando llego al departamento en el cual vivo desde que estoy solo.
Ceno lo que me dejo la cocinera, tomo una ducha, envío un mensaje al grupo familiar que aún pertenezco diciéndoles que estoy bien y que iré a dormir, aunque la verdad es que hoy tenga ganas de ver videos de Mila y los niños.
Busco mi computador portátil y busco el video que tengo de nuestra primera vez, si puede sonar pervertido pero en aquellos tiempos grababa mis secciones como amo.
Estábamos en una fiesta y ella entró por accidente o quizas fue el destino, eso nunca lo sabremos, era el día de su cumpleaños número 18 y esta había llegado allí con algunas amigas.
Ese día la temática era disfraces, ella me confeso que era un regalo por parte de sus amigas, ya que deseaba perder la virginidad que se suponía era con otro, pero al verme entrar se hizo la desentendida y entro a mi habitacion a propósito.
Lo busco y apagando la luz le doy Play, lo primero que se ve es la cama de la habitacion lo adelanto un poco y la veo entrar, luce nerviosa, pero igual obedece en cuanto escucha mi voz, ella no tenia ni idea que yo ya estaba allí en espera de mi sumisa.
—Por favor arrodíllate justo donde estás—digo con voz ronca ella lo hace aunque noto que tiembla. Para ese momento yo aún no sabía que ella era Mila.
—Mis reglas son simples, soy algo quisquilloso, asi que presta atencion, número uno no me gusta que me miren a los ojos o me reten, número dos solo puedes hablar si yo te lo pido, número tres el dolor es placer nunca lo olvides y la última si no te sientes comoda di tu palabra de seguridad. ¿Entendiste?—cuestiono acercándome a su espalda.
—Sí, señor—responde casi en susurros.
—Bien, lo primero es que me digas cuál es esa palabra y a cuantas secciones has asistido—dije, ella traga grueso sin moverse, no sé si mi voz la estaba poniendo nerviosa o queria salir corriendo.
—La palabra puede ser negro y esta es mi primera sección, hoy cumplo 18 y mis amigas me lo regalaron para que deje de ser virgen—esa voz siento que la conozco aunque sería imposible.
Mila no estaría en un lugar como este, Mason jamás lo permitiría, asi que supongo mi mente me jugo una mala pasada.
Me acerco a ella y comienzo con mi sección como de costumbre, claro que haré lo que me pidio y le quitaré esa tela que las mujeres e incluso algunos hombres le dan tanta importancia.
A mí no me importa en lo absoluto eso y me es irrelevante, pero respeto los gustos y pensamientos de cada quien.
Me quedo observando por un rato como le paso la justa por todos lados, luego le doy indicaciones que se saca lo que tiene puesto y quede desnuda, una vez me acerco a su rostro, me doy cuenta de que sí es Mila, ella intenta mirarme de reojo pero la ignoro, pues sé que no quiere que sepa que es ella.
Desde ese instante la trato con más amor y la hago disfrutar al máximo, ella me está dando lo que considera especial y pienso hacer que lo disfrute mucho.
—Eres preciosa tu cuerpo es caliente, ve a la cama—digo ella lo hace y luego la ayudo a tumbarse, literal le hago el amor sin secciones de amo y sumisa, ella me corresponde y acepta todo lo que le doy, entrar en ella fue lo más magnífico que me paso y luego de que ambos llegáramos a la cumbre del placer descansamos ella se quedó dormida entonces aproveche y la ate a la cama con sumo cuidado, ahora le haria sentir lo que era una real sección de BDSM.
Mila despierta cuando estoy torturando sus pezones, ella comienza a jadear y gemir, ya ninguno tiene su máscara y tanto ella como yo somos bien consientes de lo que sucede.
—Hace un rato, te hice el amor pero ahora sabrás lo que es tener un amo—musite golpeándola suavemente con una fusta, ella se mordió los labios, sin duda le gusta sentirse dominada, luego la tomo entre mis brazos y la llevo a la pared donde le ato los brazos hacia arriba y empiezo a nalguearla.
No puedo asegurar cuál de los dos disfruto más la sección pero si sé que los orgasmos que nos provocamos mutuamente o como la vi salir con las piernas temblando era el claro hecho que fue bueno y ambos no lo gozamos.
La experiencia más excitante de mi vida ha sido esa luego nos volvimos a reencontrar y seguimos con esa extraña relacion donde el sexo la sección y alguna que otra conversacion me hizo volverme loco por ella tanto asi que preferí alejarme cuando supe que tenia cáncer, no queria que ella se quisiera quedar a mi lado si posiblemente moriría, gracias a Dios no fue asi y sobreviví y aunque por un corto tiempo pude tener una familia con ella y disfrutar de ella con nunca pensé llegar a disfrutar.
Las lágrimas caen pero rápidamente las quito con enojo y me enfoco que algunas fotos y videos divertidos de cuando los gemelos nacieron y éramos dos inexpertos siendo padres primerizos y aunque tuvimos apoyo fue divertido ver nuestras reacciones.
...
Despierto por la insistencia de mi movil me había quedado dormido luego de ver innumerables fotos y videos de mi familia, veo un corto mensaje de Mason donde dice que necesitamos vernos, ya que sus padres tiene que hablar con nosotros de algo urgente.
Miro la hora viendo que son un poco más de las nueve de la noche, me visto, ya que había tomado una ducha, luego salgo directo a casa de mi cuñado.
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Editado: 12.02.2025