Solo mírame

23- ¡Mios!

Mila Koster Dekker (Milena)

Aún no asimilaba del todo lo que me decían, pero dentro de mi ser sabía que todo era cierto y muy real, ver esos niños hizo que a mi mente vinieran varias imágenes de mí junto a Owen embarazada besándonos, luego con ambos bebes en brazos y sentí como mi sangre me llamaba para estar con ellos como podía sentir que eran míos.

Eso de que la sangre llama es muy real, pues sentí como todo ese líquido que bombea mi corazón en todo mi cuerpo hiciera el llamado para juntarse con sus similares.

Miro a Owen mientras caminamos y no puedo estar segura al cien que su amor es real y que lo que tuvimos fue tan cierto y hermoso como el me lo cuenta incluso es incierto que podamos ver renacer un nuevo amor entre nosotros tampoco puedo dar fe de qué seremos felices, pero de lo que si me atrevería a decir que estoy segura es de que esos niños son míos, míos y de nadie más.

—¿Crees que ellos me acepten y no crean que los abandone?—cuestione un poco nerviosa, Owen me hace detener y me toma de las mejillas, lo que me recuerda lo sucedido hace un rato cuando beso mi rostro con suma ternura y delicadeza.

—Siempre les hable de ti y les mostraba fotos y aunque tu voz es diferente y tu rostro tiene algunas alteraciones para no parecerse tanto a ti sin duda eres su madre y lo saben, te aman yo me he encargado de hacer que vivas en sus recuerdos, la que me preocupa es Dasha no quiero que sienta celos cuando pase de ser hija unica a tener hermanos y primos, pues aunque en esta familia todos los niños son tratados con el mismo amor y cariño con ella las cosas iniciarán ahora y quizas tarden todos en conectar—me dice con un tono preocupado en su voz, me alegra saber que los niños saben de mí y aún más su preocupación por mi niña Dasha no será mi sangre pero cuando desperté sabiendo que fui supuestamente una prostituta que consumía drogas si no hubiera sido por ella hubiera hecho lo posible para desvivirme, pues sentia que vivir no tenian sentido pero esa pequeña rubia robo mi corazón.

—Sabes que Dasha es especial no solo porque la considero mi hija, sino porque ella me salvó cuando me sentia que estaba en el escalón más bajo y aunque será difícil, confió que la adaptación sea buena para todos—digo mientras volvemos a seguir el paso.

Estamos frente a la puerta de la habitación donde vi los gemelos, mis gemelos; sin embargo, esta vez la puerta está cerrada.

Owen toma la manija de la puerta y al abrir veo una chica vigilando a unos seis o siete niños, incluidos Dasha y los gemelos.

—Podrías dejarnos solos con mis hijos, por favor—le dice a la chica y está asiente y sale con cuatro niños más, Owen me dice que los tres más pequeños son mis sobrinos hijos de Mason, el cual aún no me creo que sea mi hermano, no obstante me hace feliz saber que lo es.

—Luego te los presento —dice cuando me ve observando por donde se fueron mis sobrinos, la niña tiene unos cuatro años más o menos y los varones como seis o tal vez siete.

—¡Papá!—gritan los niños corriendo hacia Owen, mi pequeña se queda alejada mirando la escena.

—Mis campeones, quiero que vean a quién traje ella es su madre, está un poco enferma, asi que sean cuidadosos—le dice sin rodeos y como si hablara con adultos o niños más grandes.

—Mamá te hemos extrañado mucho, papá siempre nos mostró los videos y las fotos, además nos decía que tu nos amabas mucho donde quiera que estuvieras, aunque la abuela nos dijo que estabas en el cielo—me dice uno de ellos que sin duda es el más conversador.

—Yo también me alegro de verlos y los extrañe desde el momento que supe de ustedes. ¿Cuál es Elay?—pregunto para saber cuál es cuál espero aprender a distinguirlos pronto.

—Soy yo mami y el es Marck…

—Princesa no piensa venir a saludar a tu padre—le reclama medio divertido a mi hija que lo mira con anhelo y molestia, lo cual me parece muy raro viniendo de ella.

—Ya tienes hijos y seguros no me van a querer—le dice obstinada y gira dándonos la espalda.

—Dasha…—intento acercarme, pero Owen niega y el lo hace.

—Dasha princesa, tu también eres mi hija, mi unica princesa ¿No me aceptarás como tu padre si tengo más hijos?...

Mi hija me mira con sus ojos llenos de lagrimas se nota que está muy confundida con la situacion y a leguas puedo notar el temor a lo desconocido.

Nunca ha tenido un padre o hermanos, siempre fue mi consentida y de alguna manera retorcida también la de mis hermanos... bueno secuestradores, pues me niego a decir que son sus padres biológicos, ella es mi hija.

Owen permanece de rodillas frente a ella esperando que lo acepte, yo también anhelo eso, los gemelos igual que yo, observan la escena, todos estamos esperando que ella al fin responda.

—Sí, yo quiero que seas mi papi—dice al fin y cae sobre los brazos de su padre por elección, mientras veo la escena sentí como volvía a respirar y pude darme cuenta de que a Owen le paso exactamente lo mismo.

—Gracias, princesa, prometo amarte y protegerte toda la vida— le promete sin aún soltarla.

—Dasha cariño, ellos son tus hermanos mayores, Marck y Elay espero todos se lleven muy bien y formemos una hermosa y gran familia—digo ya cuando nosotros tres nos acercamos.

—Si mi princesa ellos son tus hermanos mayores, siempre te cuidarán y protegerán—dice Owen y ellos la miran y asienten.

—¿Papi ella también es tu hija como nosotros o como los hijos del tio Nasir?—pregunta Elay no sé a qué se refiere o de que tio habla.

—Ella es su hermana porque es mi hija y deseo que nos acepten a ambas en su pequeña familia—digo, pues no sé qué pensaba decirle su padre.

—Son cosas que hablaremos más adelante y con calma, ahora lo unico importante es que seremos una familia de cinco—les informa Owen con voz suave.

—¿Y sus primos también serán mis primos?—cuestiona mi niña y puedo percibir como sus ojos brillan con esperanzas.

—Si te compartiremos los primos, tíos y abuelos—musita Elay entonces me termino de percatar que es el más hablador.




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