-Eres tan hermosa Leah…-soltó observando de pies a cabeza-no sabes cuantas ganas tengo de hacerte mía…
-¿que edad tienes?-no se por que diablos hice esa pregunta, me empecé a sentir nerviosa y solo salió de mi, no es como que quiera hacerle conversación a mi secuestrador-
-25 años-vaya, solo me lleva 5 años, eso explica por que se ve tan joven…-acuestate -soltó señalando la cama-
-¿que?-pregunté confundida y ofendida a la vez-
-Obedece, se te dio una orden-dijo, me miraba de una manera lujuriosa, en ese pequeño instante, me sentí intimidada-
Era estúpido tener que seguir las reglas de un extraño solo por miedo a que me hará. Me senté en la cama atenta de su siguiente movimiento, este se acercó a mi, hizo que me recostara cuidadosamente en la cama para después empezar a besar mi cuello. Después sacó un pequeño lazo rojo de uno de los cajones que estaban a nuestro lado.
-¿Que haces?-pregunté confundida y empezando atemorizarme cuando vi que se quitaba toda la ropa, para de nuevo quedar solo en bóxer-
Me atemorizaban todas estas sensaciones…que jamás sentí ni si quiera con mi primer novio. Empecé a observarlo de pies a cabeza, un pensamiento muy loco paso por mi…
Se ve tan lindo joder....
Vendando mis ojos, sentí como con otro lazo, ato mis manos, comenzó a tocarme, mi piel se erizó de nuevo, mi respiración agitada le siguió…no podía creer lo que este hombre me hacía sentir, en ese momento ni si quiera pensaba en escaparme, estaba en shock, sorprendida conmigo misma por todo, y mas con lo que dije después...
-¿Puedo…tocarte?
Carajo carajo carajo carajoooooo, por que dije esoooo.
Vaya lo que te hacen las ganas, puaj....
-¿Quieres hacerlo?-asentí, sin segundos pensamientos, sin razonarlo, solo asentí-
Este desató el lazo de mis manos, empecé a bajar mi mano por todo su tan marcado abdomen rozando las lineas que este tenia, aún con mis ojos vendados, exploré desde su cuello hasta su espalda, sentí algo parecido a una marca pero no le presté mucha atención…no sabía que hacia o porque pero instintivamente no quería detenerme…sentí como Jordan rompió la tanga que llevaba puesta para partir de ese mismo punto a quitar mi bata, deslizaba sus dedos por toda la orilla de mi cadera hasta que llego a mis hombros, al quitar mi bata, bajo sus manos a la curvatura de mis senos, empezó a jugar con ellos hasta que sentí su boca en uno, gemí inesperadamente por ese repentino movimiento, arqueando mi espalda mientras seguía, sentí su erección en mi entrepierna, al pensar que lo único que nos separaba era un pedazo de tela me arqueaba aún más, Jordan empezó a bajar sus dedos por mi abdomen hasta llegar a mi clítoris…
-Joder Leah estas tan mojada…lista para mi-susurró para mi-
De pronto sentí sus labios en los míos, enrede mis piernas en su cadera apretandome más contra su erección y lo besé…no se que demonios me pasaba, no sabia como reaccionar a todo esto, solo sabia que no quería parar…de pronto alguien empezó a tocar la puerta.
-Jordan-dijo Tom del otro lado de la puerta-
-¡Joder!…Leah colocate mi camisa.-ordenó, justamente lo que hice-¿que quieres?-pregunto Jordan, aún con bóxer, al parecer a este no le dio vergüenza que Tom lo mirara así-
-Harper esta abajo, quiere verte.-
¿Harper?
-¿Harper?-pregunté para lo que no recibí respuesta-
-Ya vuelvo-sus ultimas palabras al salir-
Me senté en la cama a analizar todo lo que hace un momento había sucedido, hasta que me percaté que Tom no se había ido, mis mejias empezaron arder al pensar que lo único que me cubría era la camisa de Jordan -que me quedaba como una bata- y que por debajo de esta, estaba desnuda.
-Ya veo por que tienes tan loco a Jordan…-soltó inesperadamente Tom, observandome de pies a cabeza, con una mirada lujuriosa que empezaba a causarme miedo-
-¿De que hablas?-pregunté confundida-
Empezó acercarse a mi, cuando sentí que puso una de sus manos en mi cadera, empecé a sentir mucho panico.
-Oye ¡¿que haces?! ¡sueltame imbécil!-empece a gritar cuando este me tiró a la cama de espaldas.
-Tranquila nena, te dejaré aun mas feliz que Jordan, te follaré mucho mejor que el preciosa.
Empecé a gritar con la esperanza que alguien me escuchara pero parecía ser inútil…
Narra Jordan
Justo cuando estaba a punto de hacerla mía, llega el estúpido de Tom a arruinar el momento, ni si quiera con buenas noticias, la molestia de Harper estaba aquí.
Baje dejando a Leah sola.
-Ay Harper, ¿ahora que demonios quieres?-pregunté fastidiado-
-Vaya, todavía sigues trabajando tus músculos para mi, cielo…-refiriendose a que solo tenia un buzo, mi camiseta la tenia Leah-
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Editado: 14.12.2019