JIMIN.
Una... Dos... Tres... Cuatro ¡Cuatro horas! Y Yoongi aún no volvía, quizás me estaba volviendo paranoico o estaba exagerado pero no podía evitarlo, no cuando él no me había avisado nada.
–Bebé tengo trabajo que olvide en la oficina, voy por el y no tardo.
Sus últimas palabras no dejaban de dar vueltas en mi cabeza, pero todo era una mentira, talvez si nunca hubiera visto esos mensajes no hubiera dudado de él pero todo era tan confuso.
Tome mi teléfono y las llaves para después salir del departamento, necesitaba estar tranquilo y despejar mi mente antes que cualquier cosa.
Camine hacia cualquier lado intentando pensar en algo que no fuera Yoongi... En algo que no fuera sus mentiras o la persona con la que ahora estaba.
Volví al departamento cuando empezaba a anochecer pero Yoongi aún no regresaba, suspiré pesado y camine hacia la habitación, me quite la ropa y me puse mi pijama entrando directamente a la cama.
Nuestra relación estaba bien, no discutíamos y éramos felices o ¿Yoongi ya no era feliz a mi lado? Empecé a llorar, ya no podía retenerlo, pensar en tantas cosas me hacía sentir realmente mal.
Luego de un rato la puerta principal fue abierta, escuché pasos y me escondí bajo las sábanas mientras sollozaba lo más bajo posible, los pasos estuvieron cada vez más cercano y luego la puerta de la habitación se abrió y cerró nuevamente.
–Mochi~ lo siento, tuve que quedarme en la oficina haciendo un trabajo, perdón por no volver mi amor, me daré una ducha, estoy agotado.
Escuché sus pasos dirigiese hacía el baño y luego volví a estallar en llanto, siempre que volvía del trabajo me besaba, pero estaba vez no lo hizo... Yoongi ya no me amaba.
Editado: 24.05.2021