Malia llegó hace tres días, antes de que llegase yo no conseguí sacar nada de información a Maus, sobre porque quería matar a Luka, mientras tanto German investiga sobre la sangre de Luka tomando muestras de ella
Desde que llegó Malia, Luka no ha estado en casa, para evitar posibles ataques de parte de la antigua vampira, ni con su ayuda hemos conseguido sacar nada en claro, lo único que repite es que me va a matar
-Vamos a ver Maus- Malia ya estaba desesperada por la situación -Moriste ¿como es posible que hayas vuelto a la vida?
-Ya os lo dije Hel me revivió con magia negra, la amo y esa zorra- dijo señalándome -¡La mato!
Eso me dolió, se que desapareció hace 200 años, pero yo aun le amo, tengo que dejar me sentimientos de lado por muy difícil que me sea
-Eso es imposible Maus, no somos mortales, la magia de sangre no puede revivivrnos
-Ella lo hizo, lo juro
Malia me miro y me hizo un gesto con la cabeza, salimos al pasillo y subimos a la sala, cogí una botella y un par de bolsas de sangre
-Es imposible, no va a decir nada- se tiró cansada en el sofá
-No podemos rendirnos, tiene que haber una explicación, es imposible que lo haya traído de vuelta
-Lo sé Acacia, pero no veo otra explicación, su aura es muy oscura, la marca ha asomado por su cuello, no la tenía cuando murió, algo le debió de pasar, la oscuridad lo ha atrapado, esta obcecado en matar a Luka
La marca de su cuello, se extendía rápido, más de lo normal en otro vampiro, no puedo permitir que le pase algo a Luka
-Lo tuvo entre sus manos, podría haberle arrancado la cabeza, pero no lo hizo
-No entiendo sus motivos, pero lo que si entiendo es que hay que matarlo, no se como, pero tiene la marca- eso me chocó sobre todo viniendo de ella, su mejor amiga
-¿Como?- dije sin creer que esas palabras pudieran salir de su boca
Todavía recuerdo cuando llegaron al pueblo, Malia no se separaba de los hermanos, era muy alegre y risueña, ayudada a todo el que podía y sufría cuando uno de nuestro pueblo moría, incluso la vi llorar por la muerte de un viejo caballo, es la más humana de los cinco, siempre estaba pegada a Maus, era como su hermana pequeña, no se parecían nada pero se notaba el cariño que se tenían, incluso llegué a estar celosa de ella en un tiempo, pero de hace mucho siglos, todo pasó y cambio demasiado para mi gusto
Mi cabeza dejó atrás los recuerdos y volviendo toda mi concentración a Malia
-Murió, está muerto y así debe seguir
Nuestra conversación fue interrumpida por la puerta abriéndose, instintivamente cogí el collar y le di de beber la sangre del brujo, cuando pasaron la puerta Malia fue corriendo hacia él, pero yo me puse en medio mirándola fijamente, sin embargo ella no tenía los ojos inyectados en sangre, por lo que me relaje un poco sin quitar mi estado de alerta
-¿¡Que hacéis aquí?!- dije muy enfadada, pues le había prohibido que vinieran para mantenerlo a salvo
-Su sangre tiene una gran carga magia- añadió German ignorando lo que yo había dicho
-Nunca había sentido tanta hambre, tanta tentación hacia una sangre en concreto, excepto...- se quedó pensativas unos momentos
Yo estaba tensa, no dijo nada y se sentó de nuevo en el sofá y continuo bebiendo como si nada la sangre de la bolsa
-Malia ¿que ocurre?- todos nos quedamos mirándola expectantes
-Nunca había sentido esa hambre, excepto cuando me convertí- sus ojos estaban rojos como la sangre- la sangre de mi hermano, el humano que se sacrifico para convertirnos, la primera sangre que probamos, la primera sangre que probamos cada uno de los 5, él era el sexto el que se sacrifico para poder proteger a la humanidad de los lobos
Todos nos quedamos boquiabiertos ante lo que acababa de decir Malia
Mataron a su hermano, ella tuvo que bebe su propia sangre
Si sabía que un humano se presentó voluntario para ser el sacrificado, pero nunca me esperaba que fuera su hermano
-Es una idea un poco extraña, pero... ¿puedo ver tu sangre?- me quedé algo inquieta por como reaccionaria Malia
Ella sin decir nada se mordió la muñeca, la sangre negra comenzó a caer por su muñeca, German puso un cuenco debajo para recoger la sangre, sacó de su bolsillo un frasco e inmediatamente mis colmillos se clavaron en mi labio al abrir el frasco
Dijo algunas palabras en un idioma que no entendíamos y las dos muestras comenzaron a flotar delante nuestro, cuando las dos muestras se tocaron la sangre de Luka se volvió negra como la noche y German se quedó quieto
-Es sangre del hechizo original- todos nos quedamos mirándole sin saber muy bien que quería decir
-¿Que significa eso?- dijo Luka que es el que mas impresionado estaba
-Que es de la misma linea familiar que el sexto que sacrificaron y que... podemos matar a Maus
-Eso significa que podéis matarme- dijo Malia mirando a Luka sin ningún aviso lo agarró del cuello intentando ahorcarlo
Yo le aparté de él y la tiré por la puerta al jardín rompiendo los cristales, salimos las dos fuera, ella me lanzó lejos e intentó llegar a él, pero German cerró la puerta por lo que Malia no pudo entrar, en estos días habíamos rodeado mi casa con madera de espino
-¡Malia para!- grité,
Ella se acercó a mi y empezamos a gritar en círculos, sin apartar la mirada la una de la otra
-¡No vais a matarme, ni a mi ni a ninguno de mis amigos!
-No queremos mataros, solo a Maus, ¡tu misma lo dijiste!
-¡Mientes!- me atacó de nuevo, yo solo la empujé lejos de mí
-¡Malia! tranquilízate ¡No vamos a matarte, ni a June, ni a Eryx
-¡No te creo!- se lanzó de nuevo hacia mi y la esquivé
-Te lo juro por Admes- en ese momento se queda quieta mirándome desconfiada
-No jures por tu hermano en vano y menos ante mí
Malia ama a mi hermano, ella le convirtió y esta enamorada de él, ella nunca le ha confesado sus sentimientos y tampoco nos deja hacerlo a ninguno de nosotros, lleva conociéndole como 300 años y no se atreve a decírselo, me amenazó con arrancarme la cabeza si lo hacia por ella y cuando se enfada ah que tomar enserio sus amenazas