31. Cumpleaños

Cia ha estado absorta en sus pensamientos desde la semana pasada que regresamos al pueblo, Annya y Kion volvieron a la manada que estaba un poco inquieta, los lobos notan como la barrera mágica que encierra a la druida esta cayendo, notan ganas de asesinar están ocultos en lo profundo del bosque, a los brujos se le alteran los hechizos, todo esta patas arriba, Sabas y Malia han hablado con la yaya y se han ido a un aquelarre del sur de donde era original el aquelarre de los hermanos, no han conseguido nada pero siguen en ello

Se nos acaba el tiempo, nos han dado un mes para encontrar el cuerpo y destruirlo, Cia esta como loca buscando donde puede estar el cuerpo, como quemarlo y sobre todo un arma para matarla, no me habla, apenas la veo, es como si todo lo que pasamos en España no hubiera sido nada, como si no hubiese existido, como si nunca se hubiera puesto celosa al ver a otra tonteando conmigo, como si no se hubiera matado por salvarme la vida, como si no me hubiese dejado el alma cantándola aquella canción con la que me declaré

Ni siquiera dormimos juntos, ni me mira se pasa el día entero en la biblioteca encerrada leyendo viejas historias, leyendas antiguas y todas las armas sobrenaturales que han existido, mientras German y Astrid investigan todos los hechizos conocidos

Me bebí una botella de whisky mientras veía la tele y leía un libro sobre armas de los aztecas Cia paso a mi lado con una taza de café

-Buenas noches- aparté la mirada del libro

-Buenas noches- subió las escaleras sin mirarme siquiera 

Esta demasiado rara

Me acomodé en el sofá y seguí leyendo sobre una daga 

-Esta muy rara

-Cállate

-Bueno hijo yo solo te lo digo- estaba de pie delante mio

-Por que si quieres matarnos, intentas ser maja conmigo

-Porque me divierte tu sufrimiento

-Mira que amable ella

-Gracias- se rió de forma sombría

-Me cansé de verte la cara por hoy- saqué la daga

-Se os acaba el tiempo- se puso delante de mi

-Lo sé- la atravesé con la daga viendo como se desvanecía delante de mi 

Noté como me movían, abrí un poco los ojos, unos brazos se cogieron y levantaron del sofá, Cia me llevaba a la cama

La casa estaba a oscuras y solo podía notar el leve balanceo de sus brazos con me cobijaban en su pecho, mire su rostro serio como había estado toda la semana y como me miraba con esa mirada de preocupación y temor

Al llegar a la puerta de mi cuarto se detuvo un segundo como pensando que hacer, se giro en dirección a su habitación pero a medio camino volvió sobre sus pasos y entro en mi cuarto, me dejo despacio en mi cama, arropándome y dándome un beso en la frente; se sentó en la cama

-No puedo permitir que te pase nada 

Luego se fue cerrando la puerta detrás de ella 

Me quedé unos segundo pensando que hacer si levantarme e ir a su habitación o quedarme en la mía, pero el sueño acabó venciéndome

[...]

Me levanté temprano cuando el sol me despertó, salí de la habitación dispuesto a pasar un gran día, el de mi cumpleaños, notese la ironía...

Pasé por la biblioteca y la vi entre abierta y con la luz encendida, oí unos murmullos y entre quedándome en la penumbra de la habitación

-Luka, no 

Entre en le cuarto viendo a Cia dormida sobre un montón de libros  

-No vas a morir te quiero- apretó con fuerza sus puños rompiendo algunas hojas

Yo me acerqué a ella y la moví para intentar sacarla de esa pesadilla, la tenía se que la tenía, sus ojos lloraban y las heridas se fueron formando en sus brazos lentamente, por mucho que intenté despertarla no era capaz de lograrlo, cogí el bálsamo curativo que había hecho Sabas y se lo  extendí por las heridas

-Cia...- la susurre en el oído para intentar tranquilizarla -Estoy aquí ven hacía mi 

Eso fue lo que hizo que racionara, mi voz, mi llamada

-¿Que ha pasado?- me pregunto sobresaltada 

-Te tenía- le vende las heridas, de sus ojos no paraban de salir lagrimas 

-Lo sé- se apartó bruscamente de mi al intentar secar sus lagrimas -Tengo que irme

Y con una ráfaga de aire desapareció de la habitación dejándome solo en la oscuridad solamente alumbrada por un pequeño flexo, me fijé en el libro que estaba leyendo

"El poder de la sangre"

[...]

Geman me llamó después de comer que fuera urgentemente a la tienda ya habían vuelto del sur con información, así que cogí el coche y mientras sonaba Blackbear me sumí en mis pensamientos hasta que llegué

Todo estaba tranquilo y cuando entré todo estaba a oscuras, de repente la luz se encendió dejándome ver a todos cantándome cumpleaños feliz, yo me giré hacia todos esperando ver a Cia

Pero no estaba

Estaban German, Astrid algunos del aquelarre local, Annya, Kion y Olivia y algún lobo que reconocía de los pasillos del instituto, Sabas y Malia estaban el fondo, tiraron confeti y todos se acercaron a felicitarme la pequeña Olivia vino corriendo hacía mi y yo al cogí en brazos 

-¡Feliz cumple tito Luka!- me abrazó con todas sus fuerzas -Te hemos traído una cosa ¿a que sí mami?

-Claro, toma dáselo al tio- la dio una pequeña cajita y ella me la dio automáticamente

Yo la abrí con curiosidad era una figura tallada en madera

-Es un totem protector tallado en madera de espino- la madera que puede matar a un vampiro si se lo clavas en el corazón, excepto a uno de sangre negra- Lo ha tallado Olivia solita

-Me ha ayudado papa- Kion la cogió en brazos dandola un beso en la mejilla

Acababa de cumplir 20 años y Kion con mi misma edad ya es el alfa de una manda y tiene una hija, me parece increíble y más pensar que hace casi dos años, me odiaba y eramos niños de instituto con problemas de instituto 

-Es precioso Olivia, muchas gracias princesa

-Es una niña adorable- Sabas y Malia se acercaron a mi con otro regalo junto con Astrid y German