Capítulo 11

Transcurrieron los días en la Facultad de Derecho. Sin ningún tipo de novedad ni malos augurios en el ambiente, Magnus y sus amigos continuaron con sus actividades habituales, entre estudios, certámenes, y salidas a citas, y claro, pues ahora eran dos parejas, Julius y Josy, Magnus y Sena. La única que se exceptuaba era Flora, pues estaba sola, pero bueno...uno nunca sabe.

Sin embargo, al Portador de Luz algo lo inquietaba. Sentía dentro de sí una suerte de lástima por el cruel destino de su rival. Aunque no lo comentaba con los suyos, Magnus pensaba en su subconsciente cuanto más sufriría él por el enorme desprestigio que había logrado, pues digamos las cosas como son, desde que Magnus llegó a la Facultad, Silfer solo se había dedicado a hacerle la vida imposible, desafiándolo durante dos años consecutivos, y perdiendo dos batallas seguidas, siendo la última la más terrible de todas por haber lavado el cerebro de Josy para destruirlo.

Así aconteció un día que estaban él, Sena, Julius y Josy, saliendo de clases, para ir a almorzar, después de un ajetreado día de estudios.

— ¡Ay Dios, no entiendo nada de Tributario! ¡Es como si el profe hablara en chino mandarín! —Exclamó furiosa Sena.

— ¡Vamos Sena, no es tan difícil! —Exclamaba optimista Julius—. Solo es cuestión de comprender lo esencial.

— ¡Sí claro, para ti es fácil decirlo, tú entiendes todo! —Exclamaba media fastidiada Sena.

Julius solo se limitaba a reír ante los dichos de la joven, cuando de pronto apareció Flora corriendo hacia ellos.

— ¡Oigan! ¡Miren esto! —Dijo de pronto Flora, mostrando un papel.

— ¿Qué es eso Flora? —Preguntó Josy.

— ¡Es un test! ¡Me fue bien chicos, saqué un 7! —Exclamó contenta la joven.

— ¡QUEEEEEEE! ¡¿UN 7?! —Exclamaron sorprendidos Sena, Julius y Josy.

— ¿Cómo es que sacaste esa nota? ¿De qué ramo era el test? —Preguntó con asombro Julius.

— El test era de Civil I. —Respondió Flora.

— ¿Qué? ¡No puedo creerlo! ¡Nadie saca 7 en ese ramo, ni siquiera en test! —Dijo sorprendido Julius.

— ¡Hermanita, me sorprendes! Veo que le has puesto mucho entusiasmo al estudio. —Decía Sena.

— Gracias Sena. —Afirmó sonriente Flora.

— Amor, parece que vas a tener que esforzarte más, sino Flora te va a alcanzar en notas. —Decía con humor Josy a su amado.

— Sería interesante ver si mi hermana te gana en notas Julius. —Agregó con sarcasmo Sena.

— ¡Oigan, no se burlen! —Exclamó algo incómodo Julius.

Las chicas solo rieron por el comentario. El único que estaba medio pensativo era Magnus, quien estaba callado, sin decir nada, como absorto en sus pensamientos. En un momento de la conversación que tenían sus amigos y su novia, ellos se dieron cuenta de la actitud algo extraña que tenía el joven, cosa que les llamó profundamente la atención.

— ¿Magnus? —Preguntó de pronto Flora.

— ¿Qué? —Dijo Magnus como sobresaltado.

— ¿Qué tienes? Estás algo distraído. —Decía Flora preocupada.

— Cariño, no has dicho nada en toda la mañana, ¿Estás bien? —Preguntó también preocupada Sena.

— ¡Sí viejo! ya dinos que te sucede. —Afirmaba Julius.

— ¡Sí Magnus cuéntanos! —Exclamó Josy.

— No me pasa nada, en serio. —Afirmó Magnus.

En eso se acercó Flora de improviso a tocarle la frente al Portador de la Luz con la mano derecha, para sorpresa de todos, especialmente de Sena, quien puso cara de enojada por aquella repentina acción.

— ¡Flora! ¿Qué estás haciendo? —Preguntó nervioso Magnus.

— No, no tienes fiebre. —Decía Flora con toda naturalidad.

— ¡Flora! ¿Qué significa todo eso? —Preguntó celosa Sena.

— ¡Calma hermana! Solo quería asegurarme de que mi cuñado no estuviera enfermo. —Respondía Flora calmando el desaire de su hermana mayor.

— Espera Flora, déjame ver... —Dijo de pronto Josy.

Como un relámpago, la joven usó su súper velocidad y le propinó un golpe al cuerpo a Magnus, el cual se sobó el abdomen con mucho dolor, en respuesta a la inesperada acción por parte de su mejor amiga.

— ¡Josy! ¿Por qué hiciste eso? —Preguntó adolorido el portador de Luz.

— No, Magnus está bien, solo está algo distraído. —Dio su diagnóstico final Josy.

— ¡Oye Josy! ¡Eso era innecesario! —Exclamó furiosa Sena.

— ¡Calma Sena, no te sulfures! ¡Solo quería comprobar que tu novio estaba bien! —Afirmó sonriente Josy.

— ¡Ese es un buen método para comprobar la salud corazón! —Decía risueño Julius.

En ese instante, Sena también le propinó un golpe al estómago al joven, quien terminó sobándose el abdomen del dolor, al igual que Magnus.