Sombra Y Muerte

Capitulo 6

 

Mayo 2011

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Mayo empezaba y el calor se iba disipando a medida que pasaban las horas, el locutor de la radio del pueblo predestino fuertes lluvias en todo el mes, la idea no me gustaba, pero tampoco me desagradaba, ya que la temporada que hubo de calor es muy poco común aquí y por ello varias personas aledañas del pueblo, resultaron muy afectadas por la sequía y la perdida de sus cultivos.

El cielo esta nublado, la brisa que corre es fresca hasta incluso se podría decir que es fría, contemplo el atardecer desde la ventana de mi cuarto, admirando la belleza de la naturaleza y pensando en lo afortunados que somos al tenerla. Doy un sorbo a mi té de manzanilla y me acomodo en la butaca que está enfrente de mi ventada, subo mis pies hasta mi pecho y me quedo allí, perdida por horas contemplando el atardecer y como este va dando paso al anochecer, con la luna saliendo en todo su esplendor.

Me levando sintiendo todos mis músculos agarrotados y dormidos por la cantidad de tiempo que pasé en la misma posición, he estado pensando en la actitud de Jack para conmigo, me he planteado la idea de irlo a buscar y pedirle que me explique porque se comportó así, ya que de seguro estará en la fiesta de Lilian y si voy podríamos encontrarnos y hablar.

Decido ir a buscarlo a su casa para aclarar las cosas, pero antes voy al cuarto de baño y tomo una ducha, me visto con un vestido holgado de color plateado, me calzo mis converse y me recojo el cabello en una coleta. Salgo de mi cuarto y me despido de mi madre, le pido prestadas las llaves del auto y acepta encantada, no sin antes repetirme que no debo llegar tarde.

La carretera está sola y silenciosa excepto por el ruido de algunos animales que hacen al pasar, la casa de los Holland está repleta de gente y la música se escucha demasiado fuerte, aparco frente a la casa y entro, serpenteando entre el mar de caras tratando de encontrar a Jack, el vestíbulo se encuentra igual o más lleno de personas bailando y hablando, el ambiente es atosigador no apto para alguien como yo.

Visualizo a Lilian hablando animadamente con varios compañeros, me acerco y los saludo, ella se muestra complacida de que haya venido, le muestro mi mejor sonrisa y procedo a decirle lo que un principio quería preguntar.

-Lilian, ¿has visto a Jackson? lo he estado buscando, pero no lo he encontrado.

-No, no lo he visto, debe estar en la cocina, búscalo allí. -responde dándole un sorbo a su bebida.

Me despido y entro a la cocina, está repleta de vasos que por lo que veo es licor, solo hay unas cuantas personas, pero ninguna de ellas es Jack, tomo un vaso de la encimera y echo un poco de agua del frigorífico, lo bebo y procedo con mi búsqueda, viendo a Alex a un lateral de la sala de estar riéndose muy animadamente con una chica.

- ¡Nans! -chilla cuando me ve acercarme con una voz que me dice que esta de todo menos sobrio- Pensé que no vendrías.

-Sí, lo decidí a último momento- sonrío viendo a la chica con la que está mirarme con incomodidad.

-Jess- dice refiriéndose a su acompañante- Ella es Nancy, mi mejor amiga.

La chica sonríe fingidamente

-Un placer- masculla a regañadientes, se nota que no le caí bien

-El placer es mío- trato de verme formal y agradable.

-Alex- trato de llamar la atención de él sin importarme que la chica voltee los ojos- ¿has visto a Jackson? - él frunce el ceño.

- ¿Jackson? ¿el primo de Lilian? - me lanza una mirada inquisitiva

- Si, el mismo- fuerzo una sonrisa- Lo estoy buscado para hablar con él algo con respecto al trabajo de biología- miento

-Ah, si-  afirma dudoso- Lo vi hace rato… subir las escaleras- enreda un poco las palabras, pero logro entenderlo.

-Gracias, voy a ir … eh … a buscarlo- titubeo un poco nerviosa.

Salgo de la estancia ante la sonrisa de mi amigo y la mirada de reprobación de Jess, subo las escaleras percatándome de que nadie esté viéndome y llego al pasillo que conduce a las habitaciones, todo está oscuro, a excepción de la poca luz que se cuela por las ventanas, me deslizo suavemente por el extenso pasillo pensando en cual de todas esas puertas podría estar la habitación de Jack, así que pruebo abriendo todas, las dos primeras estas cerradas con llave al igual que las otras cinco, solo me faltaría una por abrir, la última, la que está al final del pasillo y cerca de una inmensa ventana. Volteo a mirar para todos lados, ya que la sensación de alguien observándome se ha instalado en mí, me acerco a la puerta de madera negra, el piso cruje a medida que voy acercándome y mi corazón bombea descolocado en mi pecho, pongo mi mano en la manija de la puerta y la muevo lentamente, esta cede y mi corazón da un salto creyendo que esta puede ser la habitación de Jack…

- ¿Se te perdió algo? - me sobresalto al escuchar la voz fuerte, ronca y algo conocida, que me habla desde algún lado.

Una imponente figura aparece ante mis ojos, custodiado por diversas sombras que no dejan ver su cara, pero si su porte.

-Yo…eh…Estaba buscando a Jack- balbuceo con un hilito de voz.

Se da la vuelta, recostándose en la ventada, lo que me deja ver una espalda ancha y brazos musculados.




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